Viviendo Con Mi Ex.

Capítulo 42.

Bella.

¿Por qué siempre me despierta un pitido?- me pregunto mientras froto mis ojos con las manos.

Del Mac proviene una luz naranja, levanto la pantalla y pongo la contraseña de seguridad. En Skype Nicol me ha mandado una petición para hablar, la acepto y en cuanto puedo ver a la pelirroja, la miro con cara de pocos amigos.

-¡Buenos días!- dice mostrando sus dientes blancos.

-¿Buenos días? Buenos días se dice cuando después de andar por un museo que parece una ciudad he dormido lo que me ha dado la gana.- digo divertida.- ¿Qué tal?

Nicol me tira un beso y le enseño mi dedo corazón.- Bien, pero no tanto como tú.- Nicol sube y baja las cejas un par de veces y suelto una carcajada.

-¿Qué me quieres decir, pelirroja?- digo divertida.

-Que estás en New York con Max en un hotel que ¡joder!- dice riendo.

Suelto una carcajada.- Yo también te quiero pero siento decirte que me voy a la piscina del hotel antes de que Max se despierte.- le lanzo un beso y me desconecto de Skype.

***

Max.

Mes estiro en la cama de mi habitación de la suite mientras froto mis ojos y me siento como un indio sobre la cama.

Cojo mi móvil de la mesita de noche que hay al lado del lado en el que he dormido en la cama y el reflejo de una hoja pequeña, verde pegada en mi frente aparece en la pantalla antes de que encienda el móvil.

Dejo el móvil sobre la cama y despego la nota verde de mi frente para leerla.

Nota:

Estoy en la piscina del hotel. Si necesitas algo tendrás que esperar porque el móvil se queda cargando jaja. Nos vemos en la habitación :)

Dejo la nota en la mesita de noche y salgo de la cama cuando veo una luz morada que proviene del PC de Bella.

Levanto la tapa del PC y escribo su contraseña (se la había visto escribir algún día en el salón) y entro en la página que ha dejado abierta.

En Wattpad le aparecen diez notificaciones de hace cinco minutos. Hago Click en la novela de la que vienen las notificaciones y en el momento en el que aparece el capítulo 90, observo la imagen de la portada que aparece en una esquina de la pantalla. En ella sale una chica en cuatro imágenes juntas y en cada una de ellas, aparece una cinta en la que pone STUPID BOY.

Voy a la barra del índice que hay sobre el capítulo y le doy al primero de la lista, el prólogo.

Prólogo:

¿Qué pasa si un día tus padres te dicen que debes mudarte con ellos a New York? Un lugar del que lo único que sabes es que es famoso por sus rascacielos y que tu ídolo ha actuado en uno de los mayores estadios de New York.

Ese no es el mayor problema, simplemente, me mudo a una ciudad más grande que Londres, en la que no conozco a nadie pero, ¿qué pasa si cuando llegas al instituto solo encuentras a una chica agradable? ¿qué pasa si el hermano de la que se convierte en mi mejor amiga desde el minuto 0 decide amargarme la existencia? ¿qué pasa si justamente te enamoras de otro chico que no es tu novio?

Mi nombre es Natalie y tengo 17 años. Estudiaré mi primer año de bachiller en una ciudad en la que nunca he estado.

STUPID BOY.

Al lado de la portada de la novela, hay tres tiras rosas en la primera aparecen el número de visitas, en la segunda el número de votos y en la tercera, el número de comentarios. En cuanto veo los números excesivamente grandes, abro la boca formando una O.

-¡Joder!- digo al leer las millones de leídas, votos y comentarios.

Cierro el PC de Bella en cuanto siento como la puerta de la suite se abre y corro hasta mi cama.

-¿Aún estás en la cama?- pregunta Bella con una sonrisa desde la entrada de mi habitación.

El pelo de Bella está mojado y se ve más oscuro de lo que es. Lleva un bickiny morado sin mangas que se transparenta por el vestido corto de tiras y blanco que lleva puesto.

-Si, me he despertado hace poco.- tampoco es una mentira, solo han pasado diez minutos desde que me he levantado.

-Eres un perezoso.- dice divertida.- Me voy a duchar.- dice mientras camina hasta su baño.

-Si, yo también lo haré.

Bella.

En cuanto salgo de la bañera, seco todo el cuerpo y me visto con la ropa que he escogido antes de ducharme, un pantalón vaquero ajustado, unos botines de tacón alto, marrones con cordón y una blusa de tiras gordas rosa.

Pongo maquillaje en mi cara y peino mi pelo dejándolo suelto y ondulado.

-¿Estás listo? Tenemos que ir ya al museo.- digo a Max mientras cambio las cosas del bolso negro que había llevado ayer, para el bolso gris que había llevado en el avión.

-Si.- dice Max desde su habitación.- ¿Nos vamos ya?

-¿Quieres esperar a que el museo venga al hotel o prefieres ir tú al museo?- pregunto divertida.

Max suelta una carcajada y tras coger mi cazadora de cuero, salimos de la suite.