Cuestión de Tiempo

CAPITULO 16

°Brooklynn°

Bajo de mi camioneta con Ailie junto conmigo y me pongo mi abrigo gris encima, hoy el clima esta nublado para variar, así que mi simple blusa negra y mi pantalón de mezclilla del mismo color son un claro ejemplo de que este clima no me gusta mucho, en realidad no me gusta en días como hoy que forzosamente tengo que venir a la Universidad porque en realidad adoro quedarme todo el día en cama cuando se presenta este tipo de clima.

—Llegamos justo a tiempo. —Me dice Ailie mientras se reúne a mi lado y caminamos por el estacionamiento—.

—No te quejes, tú fuiste quien quiso ir por una hamburguesa. —Le recuerdo—. Como si no vendieran en la cafetería, Ailie.

—Si, pero las de la cafetería huelen a refrigerador.

No hago nada más que poner los ojos en blanco y sonreír. Yo no tengo idea de cómo le haga Calum para aguantar sus gustos tan peculiares.

—¿Dónde diablos se metieron? —Pregunta Dijkema saliendo de repente de no sé dónde—.

—Por Dios, mujer, necesitamos ponerte un cascabel.

Ailie se lleva la mano al pecho, sobresaltada por la repentina aparición de Diji y yo lo único que puedo hacer es reírme.

—Fuimos por una hamburguesa a petición de esta loca de aquí. —Señalo a la castaña—. Te llamamos, pero no respondiste, incluso te buscamos, pero no te encontramos por ningún lado, ¿Dónde estabas?

—Sala de estudios. —Contesta como en automático, haciéndome enarcar una ceja—. Tengo prueba de Dickens a la ultima hora, necesitaba el tiempo.

—Pero Diji, la prueba de Dickens es hasta la siguiente semana. —La corrige Ailie, y eso me deja más confundida—.

—¿De verdad? Que tonta, debí de haber confundido las fechas.

Decido no seguir cuestionándola, es obvio que algo no cuadra en su historia, pero ya no pienso quebrarme la cabeza averiguándolo, si no me lo quiere decir pues bien, solo espero que lo que sea que esté haciendo no termine haciendo que se arrepienta de algo.

Nos sentamos en una mesa frente al jardín del edificio principal, esperando la hora en que inicien nuestras clases, aún falta un poco y no pienso adentrarme desde antes en esa aula con olor a antigüedad.

—¿Ya les llego la lista de invitados a la gala de beneficencia? —Nos pregunta Ailie, mostrándonos su teléfono—.

—¿Qué no se supone que eso es privado? —Cuestiono—.

—Se supone, pero Jake la envió, así que no tengo ni idea de por qué o qué.

—¿Y Jake como porque la tiene? —Pregunta Diji, quitándole el celular de las manos a Ailie—.

Estoy a punto de decir que no tengo ni la menor idea hasta que recuerdo que mamá ayer me dijo que quien organiza la gala es Marie, la madre de Jake, de ahí debió de haberla sacado y no creo que haya tenido mucha autorización de su madre que digamos.

—La madre de Jake es quien organiza el evento, seguro de ahí salió. —Digo—.

—Pues como sea, pero definitivamente a esos niños de la campaña en África les va a ir muy bien, ¿Ya vieron quienes están en la lista? —Dice Ailie con los ojos muy abiertos—.

—Es sorprendente. —Exagera Diji—. La madre de Jake sí que tendrá mucho que hacer para impresionar a todas estas personas si quiere que la gala de resultado.

—A decir verdad yo no tenía idea de la madre de Jake es quien la organiza.

—La contrataron de último momento, la antigua organizadora renuncio, es por eso que la fecha se pospuso. —Les explico basándome en lo que me dijo mamá—.