Me despierto y lo primero que encuentro es una Raquelle y Ashley atareadas.
-Dios- Dije medió asustada, estas estaban casi encima mío, no dejaron ni que me estirará.
-Vamos Theresa despierta- Ashley me tomó de un brazo para ponerme en pie, claro que no midió la fuerza ya que ambas caímos al piso.
Mi cama estaba más calentita.
-¡Córrete, córrete, córrete!- Comencé a darle golpecitos con las manos, Ashley estaba sobre mi- No puedo respirar-.
-YAAAA, THERESA- Raquelle la puso de pie- Me estás golpeando-.
-Voy a llamar a Dylan, quédense en silencio- Nos miró retadoramente.
No sé que se trae entre manos está, Dylan quiere estar solo y siempre vamos a molestarlo.
Vi como marcaba, me acerqué a esta para oír.
-¿Alo?- Preguntaron desde la otra línea.
-¿Dylan?- Ashley contraatacó mientras con su mano me alejaba.
-¿Raquelle?- Se escuchó hasta aquí, sí que habla fuerte este hombre.
-Y THERESA- Grité para que supiera que estaba yo.
-si, Raquelle y Theresa- Bufo esta-Dylan, iremos a tu casa para verte, tenemos unos ricos pastelitos adiós- Y rápidamente corto.
-Hay, quiero un pastel- Le hice puchero, me comenzaron a sonar las tripas.
-No hasta que lleguemos donde Dylan- Dijo Ashley-.
-¡oye!, entonces porque tienes la boca blanca- Raquelle cual exorcista dio vuelta su cabeza para ver a Ashley.
-No puede ser, ¡haz sacado un pastel!.
-NO, vete, o llegaremos tarde donde Dylan, vamos Theresa apúrate-Primero salió Raquelle de la habitación, Ashley se quedo un poco, saco la mitad de un pastelitos de su espalda.
-Y eso- Apunte el pastel, de verdad tenía hambre.
-Es para ti, chillona, ahora apúrate- y Ashley se fue dejándome con el pastel.
Me vestí rápidamente, no me peine, solo pase ambas manos por mi cabellera rezando porque está no estuviera mal, tomé una coleta, me puse mis aros.
-maldita sea- tengo que ir al baño y no encuentro el otro aro.
-Dios, por favor- Seguí quejándome, era mi primer regalo de parte de Selena y no sabía dónde estaba.
-¡Theresa, apresúrate!- Chillaron desde la planta baja, baje las escaleras casi volando.
-Ya, ya llegue, solo debo ir al baño- Raquelle y Ashley me tomaron de las manos.
-¡Vamos no hay tiempo!- Soltó Ashley, ambas me arrastraron por la puerta.
-Pero no puedo aguantar- Susurré.
Me arrastraron por tres cuadras, cuando ya no era necesario.
-Basta, ya se me quitaron las ganas- Dije algo enojada.
-Esta bien- Ashley tocó sus bolsillos- Dios, se me han quedado las llaves de casa, ya vuelvo-Y corrió en sentido contrario.
-Es muy despistada, siempre se le olvida todo, nosotras sigamos- Soltó Raquelle después de que desapareciera Ashley de nuestro lado.
-Okay Raquelle- Le dije algo molesta.
Caminamos hasta que alcanzamos a tomar un taxi, el camino se hizo corto, poco tráfico, Raquelle no se callaba y yo solo podía pensar en su cabello, estaba más oscuro, ese tono le quedaba mejor aunque sus cejas seguían siendo albinas. Debería pintarme las uñas de otro color, tal vez azul o morado.
La canción de la radio es muy buena, creo que la he oído antes, es algo como. Tarara rara rara rara raaaa.
-¿Theresa?, ¿me estás oyendo?- No puede ser
-Si, ahhh, ¿estas segura de lo que dices?- Debía salvarme, esta me observó nuevamente, sonrío y solo asintió con la cabeza.
Al bajarnos del auto vimos como otro se estacionaba en la otra cuadra, si Ashley venía ahí, pero del otro costado los periodistas cual zombies hambrientos venían corriendo hacia nosotras, no esperamos a Ashley, solo avanzamos a paso lento, pero antes de poner un pie en el jardín de Dylan, estábamos totalmente acorraladas.
-Señoritas,¿ustedes sabían que Selena estaba embarazada?- Decían con los micrófonos encima de nosotras.
-Raquelle , teniendo en cuenta que Dylan fue el último que vio a Selena ¿usted piensa que estos tenían un lío amoroso junto con Max?- Está sólo miraba el suelo, yo no sabía dónde mirar, hasta que un periodista me dirigió la palabra.
-Theresa, aquí, Se dice que ustedes pertenecen a una secta y que han matado a Selena- Quería reír y llorar, como cosas tan estúpidas se pueden inventar.
-Saben dónde está Selena, ¿ha muerto?.-
-¡BASTA!- Gritó Dylan de la nada mientras nos tomaba de las manos a mi y Raquelle.
-Falta Ashley- Tire a Dylan hacia atrás.
-No te preocupes por ella, ella sabe ponerlos en su lugar- Me respondió Raquelle, me tranquilice al saber que era cierto.
Se escucharon jadeos a nuestras espaldas, era ella.
-Esa gente está loca, me preguntaron si pertenecíamos a una secta- Habló jadeante mientras Dylan cerraba la puerta, flashes inundaban la habitación desde la ventana, Ashley se acercó a esta, colocándose bajo la cortina para levantar el dedo de en medio y ponerlo por la ventana.
Después de un rato esta se tuvo que ir, la tía Mandy se estaba quedando en su casa con la familia.
-¿No has sabido nada más?- Hablo Raquelle rompiendo el silencio.
-No, Nada- Sonó como quejido.
-Estoy realmente asustada- Se escapó de mis labios, sentí cuanto la necesitaba- Tengo mucho miedo- Mi voz se quebró, comencé a mirar mis manos, sentía que ellos me estaban mirando.
-No llores Theresa- Corrió mi cabello, y me acarició la mejilla- Ella estará bien- Solo no llores, tú puedes, respiré hondo.
-No estoy llorando, solo , solo tengo calor- Me saqué la coleta de la muñeca para hacerme un moño.
-Amiga, ¿quieres que te ayude?- Preguntó Raquelle.
-Esta bien- Sonreí en modo de agradecimiento.
-Iré a buscar un vaso de agua, ¿se les antoja uno?- Dylan nos preguntó a ambas.
-No me gusta el agua- Dije algo sería.
-Bueno, Theresa te traeré jugo de naranja- Sonreí mientras Raquelle me peinaba con las manos.
-AHHHH,¡me estás tirando el PELO!-Grite.
-¡es que no te has peinado!- Se quejó esta.
-Si tan solo me hubieran dejado ir al baño me hubiera visto y orinado- Bufé.
-Quejona, ya terminé - Me tendió su celular para mirarme.
-No me gusta la coleta Raquelle, esta fea- Tenía todos los pelos desordenados.
-Pff, hacela tu- Bufo esta.
-Enojona- Le iba a gritar cuando siento una risa.
-¿Dylan acaso no se ve bien?- Raquelle se corrió para que Dylan me viera.
Dylan puso cara rara.
-¿Qué sucede, tan mal me veo?- Me asuste , pero este volvió a sonreír y nos entregó los vasos.
-No- dijo-¡Hey!, ¿te falta un aro?-Preguntó, recordé a Selena.
-Si, no lo sé, solo desapareció, lo tengo hace muchos años, fue un regalo de parte de Selena, dijo que fue la primera cosa cara que compro con el dinero que estaba ganando y quería que fuera para mí - Recordé ese momento y no puedo creer que lo he perdido.
-Selena siempre es linda con todos- Dijo Raquelle dándome un abrazo- Ya encontrarás el aro- Eso me tranquilizo.
-Dylan- Ya no podía aguantar más -¡Dylan!- Grité ya que este no me respondía.
-si, si perdón, estaba recordando algo- Dijo algo perdido.
-¿Puedo ir al baño?-.
-Claro, pero espera, ustedes cuando van con Selena a algún lado Richard no se ha comportado extraño- -Preguntó, solo quería ir al baño y el preguntaba cosas.
-No- Pff, obvio no- Le respondió Raquelle.
-Claro que no- Tenía mis manos en la entre pierna mientras daba brinquitos para no orinarme aquí mismo en la alfombra- Jamás hemos estado sobre ese auto, es solo de Selena, las únicas personas que suben ahí es Richard y Selena, ella es algo extraña le gusta estar sola cuando va a algún lado - Y no pude aguantar más, corrí hacia el baño.
No puedo creer que tenga tanto pipi, el baño huele muy bien.
Cuando terminé comencé a ver los cuadros que habían en la pared del pasillo, la cara de Dylan era muy graciosa cuando pequeño.
Escucho unos murmullos desde la sala de estar.
-Hueles a ella- Dijo este, llegue, no entre en la habitación me quede oyendo.
-Si- Raquelle lo miró, sabía qué significaba eso, maldita sea, Raquelle no lo hagas, no sabía que tomar para no gritar, vi un jarrón y lo sujete.
Lo beso, LO BESO Y EL SIGUIÓ EL B.. No, no lo hizo la separó de él, la miro con asco, que debía hacer, ¿me devuelvo al baño?.
No, ella le puso la mano en la pierna y nuevamente lo iba a besar pero Dylan le se levantó abruptamente con el enfado marcado en sus cejas.
-QUE RAYOS HACES- Gritó este.
-Hacer lo que ambos queremos- Mi amiga va de mal en peor, volvió a tirarse en sus brazos siendo rechazada por milésima vez.
-NO, RAQUELLE YO NO QUIERO ESTO- Dylan está rojo de furia.
-¿Por qué me gritas?- Vi como una lágrima se deslizaba por su mejilla.
-Perdón- Este se tranquilizó, la cordura volvió a su rostro y se sentó con Raquelle tomando sus manos.
-Raquelle, mírame- Prosiguió ,Raquelle lo miró asustada- Yo jamás he pedido que me beses.
-Pero tú eres bueno conmigo, me abrazas, yo ,yo, yo estoy enamorada de ti Dylan- Dios que vergüenza.
-Raquelle, no porque yo sea bueno contigo o te corresponda los abrazos signifique que quiero que me beses o algo más- Esta comenzó a llorar, sus ojos se inundaron, estaban llenos de tristeza.
-Lo sé, pero me gustas en verdad- Contra atacó esta.
-No me mal interpretes, tú eres realmente hermosa Raquelle, pero no eres ella- Y supe con esas palabras que Dylan estaba enamorado de Selena.
-Dylan- Dijo en un hilo de voz- ¿Qué tiene ella que yo no tenga?- Está vez se le entendió claro y firme.
-Ella me tiene realmente loco, no me gusta solo porque es linda Raquelle, o por cómo huela o luce, crees que no he notado que te estás vistiendo similar, has oscurecido tu cabello, hasta usas ondas, hoy vienes usando su mismo perfume, pensé que era algo de chicas pero con tu declaración entiendo todo. Es mucho más que eso, yo estoy enamorado de ella, yo la amo Raquelle y la seguiré amando sin importar las circunstancias- Solo quería correr hacia ella, sé cómo se siente.
-Pero, pero ella no está- Comenzó a titubear, lágrimas cayeron de mis ojos al notar el paso del tiempo, Selena no está hace semanas y notó su ausencia.
-La encontraré - Le dijo él lleno de esperanza, sin más se puso de pie y salió dando un gran portazo que me hizo brincar votando el jarrón.
-Ups- Solté y me tape la boca.
-Tu, tú viste, viste- Me hice la loca y lo mire extrañada.
-Perdón, es que venía corriendo y se calló el jarrón no vi que tan rápido... Hey y ¿Raquelle ya se fue?- Dije rápidamente cambiando el tema mientras fingía buscarla en la habitación.
-Si- Respondió casi suspirando.
-Bueno, yo, yo debo irme, bye- Dije rápidamente para poder seguir a Raquelle.
-Theresa, espera- Dios cuando uno está apurada todo el mundo te atrasa, me voltee rápidamente -Ven- Caminé tras de el, levanto la almohada sacando el aro que me faltaba.
-Es mi- No me dejó terminar.
-Si, tú aro- No entendía nada, solo me lo entregó.
-Muchas gracias Dylan, te preguntaría donde fue que lo encontraste pero perderé a Raquelle- tomé el aro y solo corrí.
La prensa no me noto ya que iba tan rápido, solo corrí, ya no sabía dónde estaba, hasta que la vi entrando a un callejón, al acercarme vi que este estaba totalmente oscuro.
-Mierda- Le tengo miedo a la oscuridad, Dios, Dios, es mi amiga, solo entra Theresa, maldita sea.
Entre, estaba lleno de cajas, basura, había un edor insoportable, habían trozos de rejas y humo, se desprendía de una caja colgada en la gran muralla de ladrillos color rojizo.
Se cruzó un gato negro logrando espantarme y caer detrás de una reja, Raquelle de volteo asustada, pero suponiendo que vio al gato y lo maldijo supe que no me veía pero yo a ella si, no sé cuál es la razón de estar escondida aquí, tendría que haberle hablado, pero tengo un presentimiento.
-Vamos contesta el celular- Decía mientras su pie chocaba con el suelo al ritmo de una música inaudible.
Su cara se notaba extraña, sentía que estaba enojada, su respiración era agitada.
-POR FIN TE HAZ DIGNADO A CONTESTARME EL CELULAR INÚTIL- Gritó hacia la otra línea telefónica logrando asustarme, jamás había escuchado a Raquelle hablando de esa forma.
-si, claro,DEJA DE DARME EXPLICACIONES INÚTILES, ESCÚCHAME BIEN, TE QUIERO EN DOS MINUTOS EN EL CALLEJÓN DE SIEMPRE, ¿ME HAS OÍDO?.- Y corto, la veía jadeante, no sabía qué hacer, seguiría aquí.
Solo, solo necesitaba saber que estaba pasando en mi vida, hipótesis estúpidas vinieron a mi mente como relámpagos, estaba al borde de un ataque de pánico. Cerré los ojos, respiré sin hacer el más mínimo ruido, la hiperventilación me hacía mantenerme calmada.
-¿QUÉ PASA AHORA?- La voz interrumpió mi tranquilidad, la vida podía emputecerme aún más.
-Pero que rápido- La ironía acompañaba cada pizca de su voz- Querido Dave, en realidad pensé que tardarías SIGLOS.
-DEJA DE USAR ESE TONITO CONMIGO- Gritó enfurecido.
-BÁJAME, EL VOLUMEN SI NO QUIERES QUE MANDE TODO A LA MIERDA.
-Perdón- Respondió sumiso.
-Escúchame, el ESTUPIDO de Dylan no me hace caso, quiero que te lo lleves dónde está la perra, ¡ahora!- Dijo en un tono autoritario.
-El me cae mal, pero no estaba dentro del trato- Tomó su cabeza con ambas manos negando.
-Dime, ¿quieres los millones de Selena o no?- Preguntó casi juguetona.
-Pensé que lo amabas realmente-Contraatacó este.
-Claro que lo hago- Dijo sería.
-¿Por eso quieres que lo lance dónde está Selena?, acaso estas loca, yo no sé como la tipa ha sobrevivido tanto tiempo, pero dudo que tú noviecito lo haga - Selena estaba viva, un sollozo interrumpió mi silencio, gracias a Dios no me han oído.
-Mira, tú no estás para darme órdenes, las doy yo, para tu información lo lanzaré ahí para que vea lo demacrada y horrible que está Selena ,luego llegaré yo y deberá decidir, aquí estoy yo y..- La interrumpió.
-y estas totalmente igual a ella, estás completamente igual - Soltó una risa irónica que inundó mis oídos- Pensé que el loco era yo, pero ya veo que se te safaron todos los tornillos- Terminó entre pequeñas risas.
- Estamos bien, Dylan piensa que es Theresa, dejé un aro en el carro de Richard cuando lo sacamos- Ella había sido, por eso él me vio extraño.
-¡Nada está bien!, tuve que lanzar a rechazo cuatro veces las pruebas de las muestra de cabellos, CUATRO MALDITAS VECES, eres una torpe dejaste un aro en el carro ¿y tú esperas que dominando a un policía todos tus problemas se solucionen?,claro que no, ¡yo quiero mi dinero ahora! para largarme de aquí de una buena vez- Soltó desesperado.
-¡No!, no, Dave primero té llevarás a Dylan y tienes que violar a Selena ¿me has oído?, ¡hazla tuya enfrente de él!, si lo haces no solo te prometo su fortuna sino que la de Dylan también, pero hazme caso, necesito tener a Dylan- La desconocía por completo.
-Lo hare por el dinero. Estas loca mujer, ¿estarías dispuesta a matar por Dylan?-Preguntó algo asustado.
-Si, por amor si, mi antigua pareja me engaño,todos creen que murió en un accidente, pero yo lo maté, y lo volvería hacer, si él me hubiera amado como decía no se hubiera ido con esa mujerzuela.
-Cállate, me aburren tus historias , ahora iré donde Dylan- No conocía este lado de él.
-vamos te seguiré- Soltó en un suspiro.
Mis dedos no apretaban los botones correctos, de milagro el número en el marcador era de Dylan.
-Vamos contesta, contesta- Solté en susurros.
Buzón.
-Dylan, Dylan debes correr, Dave va para tu casa- Lágrimas se desbordaban de mis ojos- Debes correr- Salí de mi escondite- Dave va a ir para llevarte donde Selena, te quieren matar, la quieren matar a ella, todo eto lo hizo Raquelle- Solté casi en un grito ahogado al ver una melena castaña enfrente de mi.
Sostuve el celular con firmeza,
-¿Theresa, que haces aquí?-Preguntó alegre mientras se acercaba a mi.
-No, no te atrevas a acercarte a mí maldita ESCORIA- Me volteó rápidamente para correr.
-Vamos Dylan oye esto- Corté para llamar nuevamente.
-Theresa que te sucede- Raquelle venía a paso lento detrás de mí.
Dylan nuevamente no contesto.
-Dylan por favor corre, no oigas a Raquelle- Pareció haberme oído ya que apresuró el paso.
-No sigas corriendo Theresa o te mato.
No hice caso
-Dylan, corre maldita sea, debes salvarte para poder salvar a Selena.
Callejón sin salida.
-Baja el celular Theresa- Solo podía sollozar, y gritar.
-POR QUÉ- grité mientras lágrimas caían de mi ojos- POR QUÉ HACES ESTO RAQUELLE, PENSÉ QUE TODAS ÉRAMOS AMIGAS, QUE NOS QUERÍAMOS.
-Theresa, claro que las quiero pero Dylan es mi prioridad ahora- Comenzó a acercarse.
-CLARO QUE NO, ERES UNA ZORRA- Me pego una cachetada- ¿ME PEGAS PORQUE DIGO LA VERDAD?, SABES PERFECTAMENTE QUE DYLAN Y SELENA TENÍAN ALGO, SABES QUE SE AMAN Y TÚ TE CREES CAPAS DE SEPARARLOS, ¿TE DAS CUANTA DE LO QUE HAS HECHO MALDITA SEA?.
-Lo se, y lo volvería hacer, porque lo amo.
-PERO EL NO DE TI RIDICULA.
Lo último que recuerdo es el puño de Raquelle que me dejo aquí ,en la oscuridad.