Camila's POV
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"Sabes? Lauren me dijo algo interesante anoche, antes de que nos fuéramos"
Giré para mirar a Adam, el hombre de cabello oscuro se veía un poco absorto en sus pensamientos.
"Tu me dijiste que nunca intimaste con ella, aún así anoche comenzó a alardear sobre eso- además, cómo te atreves a darle detalles de nuestra vida privada" sus ojos estaban fijos en mí como si estuviera disciplinando a un niño pequeño y ya había tenido suficiente de eso.
Estaba enojada y para ser franca, estaba más que molesta con Adam- sin contar que también lo estaba conmigo misma. "Lauren es-" hice una pausa para corregir "era mi mejor amiga. Así que, obviamente le conté todo sobre nosotros. Y sí tanto quieres saberlo, sí, te mentí Adam. Nosotras 'intimábamos' frecuentemente" El sacudió su cabeza con una expresión de disgusto y me acomodé en mi asiento, deslizándome para quedar muy cerca a él. "Ella y yo tuvimos sexo... en formas que ni siquiera podrías imaginarte... una y otra vez- Lauren es muy buena en la cama Adam y a mi me gustaba"
Mi prometido bufó, mirando rápidamente al chofer para asegurarse que no hubiera escuchado la conversación, "No seas tan vulgar Camila. No es nada atractivo. Eso extremadamente inapropiado y una esposa mía no usará ese tipo de palabras- no vuelvas a mencionar nunca su nombre. Hablaremos de esto más tarde"
Lo ignoré, continuando con mi discurso. "Ella me hizo gemir, gritar, arañar y morder"
"Suficiente!" gritó. Nuestro conductor nos observó por el espejo retrovisor.
"Está todo bien allá atrás?" me preguntó.
"Todo está bien" respondió Adam.
"Señor, con todo respeto, no le estaba preguntando a usted."
Levanté mi mirada para hacer contacto visual con el preocupado conductor, asintiendo a regañadientes para indicar que todo estaba bien y el auto cayó en un ambiente de silencio sepulcral.
Regresé a mi posición anterior, arrinconada contra de la puerta y observé el paisaje conteniendo mis lágrimas. Lauren dijo que me amaba.
Ella dijo que me amaba.
Y yo simplemente me fui, dejándola.
No sé en que estaba pensando- no estaba pensando. Estaba tan cegada. La expresión en su rostro...
Me sentí enferma. En serio iba a renunciar a Lauren por tener la simple comodidad de saber lo que el futuro me daría? Valía la pena perderla?
No podía creer que esto estaba sucediendo. No podía creer que Lauren me había dicho que estaba enamorada de mi y mucho menos podía creer que a pesar de eso, yo iba camino al aeropuerto con alguien que no era ella.
"Llegamos" escuché gruñir a Adam.
Rápidamente abrí la puerta y salí del auto, respirando con más facilidad ahora que no estaba cerca de él.
Lo vi abrir el baúl y comenzar a sacar nuestras maletas, una sonrisa estaba plasmada en su rostro después de nuestra conversación. Cuando el vio que yo no me estaba moviendo en absoluto, se detuvo. "Qué estás haciendo? Agarra tus maletas Camila"
"...No" afirmé con simpleza. "No" repetí, la palabra rodaba de mi boca fácilmente.
"No me desobedezcas" escupió. "Toma tu equipaje ahora!"
"No"
"Que agarres tus cosas!" levantó la voz, enojado y sin saber que hacer ahora que lo estaba desobedeciendo.
Crucé mis brazos, "No voy a ir a California contigo"
"No digas estupideces. No seas absurda" rió, sin tomarme en serio.
"Yo no te amo"
Adam cerró sus puños y me miró como si quisiera asesinarme en ese momento. "Disculpa?" cuando abrí mi boca para hablar, él me interrumpió. "Tu no me amas?"
"Lo lamento-"
"No" rió, pero tuve el presentimiento que no fue porque encontrara esto divertido. "Tú no me amas" repitió. "Tú no me amas?" Me quedé quieta, tenía miedo de haberlo llevado al borde. "Te he dado todo!" gritó Adam, señalándome con su dedo índice y logrando que las personas que estaban cerca se quedaran mirándonos. "Pasé cuatro años de mi vida contigo para esto? Te acogí cuando Lauren ya no te quería- te di un anillo. Te estoy dando una boda, una casa y una familia. Lo único que tenías que hacer era fingir ser la esposa buena- y ni siquiera pudiste hacer eso!" tragué pesadamente, alejándome un paso de él. "Si no querías estar conmigo entonces por qué te subiste al carro anoche?"
"Porque tu me dijiste que lo hiciera" murmuré.
"Oh, tienes que estar bromeando. En serio? Porque yo te lo dije? No, no acepto eso" sacudió su cabeza, exasperado. "No te entiendo Camila. Por qué dejaste a Lauren si no me amas?" no respondí y él volvió a hablar. "De hecho, por qué incluso ibas a estar alguna vez conmigo si no me amas?"
"Porque tu me amas y ella no. O- al menos eso pensaba. Pero resultó ser lo contrario- Lauren me ama"
"Entonces qué? Yo fui algún tipo de lección para ella? 'Si tu no me quieres, alguien más lo hará' ?"
"No, yo solo... no quería estar sola. Lo lamento" fruncí mi ceño y me quité mi anillo de compromiso en un intento por devolvérselo.
"No lo quiero" afirmó Adam cerrando la puerta del baúl con todas sus fuerzas y recogiendo sus maletas. "Y sabes qué Camila? Tú te mereces estar sola" dijo antes de alejarse para desaparecer detrás de las puertas del aeropuerto, dejándome sola con el chofer quien trataba de mantener una expresión calmada.
"Podría llevarme a casa?" le pregunté débilmente.
"Dónde queda eso señorita, cual es su dirección?"
Me congelé. No tenía una casa. Por primera vez en mi vida, estaba completamente sola. "Yo... no lo sé" admití, sintiendo que las lágrimas amenazaban con caer.
Una expresión compasiva llenó el rostro del conductor antes de que abriera la puerta del carro para que entrara. "Puedo reservarle una habitación de hotel señorita. En cualquier sitio que le guste"
Me subí al asiento trasero recostándome contra este. Mi mano estaba en mi frente y mi pierna brincaba de arriba a abajo ansiosamente mientras pensaba en que tendría que estar sola.
El gentil chofer comenzó a manejar, haciendo contacto visual conmigo de manera frecuente como si notara mi preocupación. Llevábamos cinco minutos de camino cuando me dijo "Yo no creo que usted merezca estar sola señorita"
"Gracias" le respondí suavemente.
Pero Adam tenía razón. Los herí a ambos en tantas ocasiones que no esperaba que alguno me perdonara. Quizás ni lo merecía.
Los últimos meses eran recuerdos borrosos. Demasiadas cosas sucedieron, todo porque Lauren y yo teníamos miedo de arruinar algo que ya habíamos arruinado hace algún tiempo. Ella me empujó al límite y yo hice lo mismo con ella. Eso era lo que pasaba cuando estábamos juntas. Había demasiada presión. Y eso no iba a cambiar solo porque ahora sabía que Lauren me amaba. Eramos pésimas en cuestiones de comunicación. Le tomó siete años admitir que estaba enamorada de mí, y ni así pude darle una respuesta coherente. Quizás no estábamos destinadas a estar juntas, no de esa forma. Quizás el amor no era suficiente.
Pero eso no cambiaba como me sentía por ella. Eso no cambiaba el hecho de que no podía dejar de pensarla o que quería estar con Lauren. Aún quería que fuera mía. El problema radicaba en que no sabía como mantenerla a mi lado.
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Me sentía mas ansiosa con cada timbre. Pensé que no iba a contestar hasta que-
"Hola?"
Apreté el teléfono con más fuerza, notando lo cansada que sonaba su voz. "Lauren?"
"Camila?" parecía sorprendida. "Eres tú?"
"Sí, disculpa. Mi celular se quedó sin batería así que estoy usando un teléfono público. Me siento como una verdadera newyorkina en estos momentos" reí para aligerar un poco el ambiente pero ella permaneció en silencio. "Qué estás haciendo en estos momentos?"
"Por qué me estás llamando?"
Mordí mi labio, acercándome más al teléfono. "Quería escuchar tu voz"
Su tono se suavizó, "No tienes que subirte a un avión?"
"No"
"Porque en serio deberías-" hizo una pausa. "Espera. Qué?"
"No tengo que subirme a ningún avión" expliqué, esperando su respuesta.
Hubo silencio por un momento largo y pensé que me había colgado el teléfono, pero entonces susurró, "Te quedaste?"
"Me quedé"
Escuché movimiento al otro lado de la linea y supuse que se había puesto de pie. "En dónde estás?"
"Estoy afuera del hotel Plaza"
"Iré a recogerte" dijo, caminando al rededor del apartamento.
"No, Lauren- ... espera" escuché que se detuvo y traté de mantenerme firme en lo que había decidido. "Me voy a quedar aquí por un tiempo"
"En el hotel? Por qué?"
"Necesito algo de tiempo para pensar... y creo que sería bueno para nosotras estar lejos por un par de días. Ambas necesitamos pensar"
"Ya he estado lejos de ti Camila. Hace dos meses o más que te fuiste"
"Esto es diferente. Yo solo quiero concentrarme en lo que es mejor para las dos"
La escuché suspirar. "Puedo verte?"
"No. No puedo... pensar cuando estás cerca"
"Y que pasa con el trabajo? No renunciaste?"
"No, Mr. Clarke me dio permiso por un par de días"
"Tienes dinero suficiente?" preguntó, sonando exasperada. "Necesitas que te envíe algo de efectivo? Y estás segura de que estarás bien sola? Sé que tienes problemas con eso. Quizás deberías mejor venir a casa. Prometo que no te molestaré. Puedes tener de vuelta tu antigua habitación-"
"Lauren, estaré bien, okay? Solo quería avisarte"
"... Okay" dijo finalmente.
"Okay"
"Supongo que... um, supongo que te dejaré para que te instales"
"Okay, adiós-"
"Camila?" dijo interrumpiéndome.
"Sí?"
"Te amo"
Asentí, sonriendo sin importar que ella no pudiera verme. Lauren colgó después de eso, dejándome solo con el tono de la linea muerta. "También te amo"
Coloqué el teléfono en su puesto y giré para tomar mis maletas. Se sentía diferente saber que iba a estar sola por los próximos días y mientras caminaba por el lobby del Plaza, supe que había tomado la decisión correcta.
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Resulta, que puedes encontrar un montón de cosas que hacer cuando quieres evadir algún asunto. Como desdoblar y volver a doblar tu ropa, arreglar las botellas del mini-bar, y hacer un par de flexiones de pecho en el piso hasta que tus brazos tiemblen.
De hecho, sentarme y tratar de pensar racionalmente sobre el próximo paso que iba a tomar respecto a Lauren y yo fue más difícil de lo que pensé. Así que estaba tratando de mantenerme ocupada. Aún así, todo tomó un giro inesperado y resultó en mí pidiendo excesivamente el servicio a la habitación, así que cuando me había comido mi propio peso en los platos especiales del chef, supuse que era momento de comenzar a reflexionar.
El problema era que no sabía como hacer eso. Bufé, abriendo mi computador y buscando: Cómo tomar una decisión importante.
Estaba desesperada. Debía haber una especie de 'Bola Mágica 8' en versión digital o algo que pudiera ayudarme, no? Pasé por muchas páginas web que decían algo así como "Busca en tu interior" y "Medita", hasta que finalmente vi una opción que podía tomar en serio: Una lista de pros y contras.
Coloqué mi portátil a un lado, tomé una pequeña libreta de notas y un lapicero que encontré en la mesa de noche, comenzando a escribir.
Tratando de descubrir todos los aspectos negativos primero, comencé a rellenar primero la sección de "Contras"
Contras: 1. Lauren es indecisa. 2. Tenemos problemas comunicándonos. 3. Problemas de confianza. 4. Discutimos mucho. 5. Sabemos como herir a la otra. 6. Nuestro futuro es incierto y probablemente siempre lo será. 7. Soy excesiva y locamente celosa con ella. 8. Lauren no siempre es abierta conmigo.
Pros: 1. Lauren NO es Adam. Reí al escribirlo, sonrojándome cuando el siguiente pensamiento atravesó mi mente. 2. El sexo.
Mi teléfono comenzó a vibrar y de inmediato escondí mi lista como si alguien fuera a atraparme.
Ally Hernandez: Qué número es tu habitación? Estamos en el lobby.
Fruncí mi cejas, escribiendo rápidamente una respuesta: Por qué estás en el lobby? Y quien más viene contigo?
Ally Hernandez: Normani y Dinah. Número de tu habitación?
Rodé mis ojos ante la forma en la que había ignorado mi primera pregunta y le envié el número de la habitación en la cual me estaba alojando. Coloqué el bloc de notas en la mesa de noche y traté de recoger un poco las cosas antes de que llegaran y vieran todo el montón de comida que había ingerido en las pasadas horas.
No pasó mucho tiempo antes de que escuchara que golpeaban la puerta y cuando abrí, las tres entraron como si estuvieran en su propia casa. Ally y Normani se sentaron en la cama mientras Dinah se recostó contra la pared.
"Qué están haciendo aquí?" pregunté, sentándome en la silla vacía.
"Lauren nos envió" Normani respondió como si yo debiera suponerlo.
Por supuesto. Sacudí mi cabeza, algo molesta.
"Ella solo está preocupada por ti" afirmó Dinah.
La miré. Las cosas aún estaban un poco duras entre nosotras desde que ella se enteró de mi aventura con la ojiverde. La polinesia no estaba muy complacida con la rápida despedida que tuve que darles ayer tampoco. "No necesito niñera- o niñeras, en este caso"
"Nosotras no estamos aquí para servirte de niñeras. Vinimos para asegurarnos de que estuvieras bien" intervino Ally, dándome una sonrisa amistosa.
"Sí. Quiero decir, hoy terminaste con Adam. Eso es algo grande-" comenzó Normani.
"Ella te contó sobre Adam?"
"No tuvo que hacerlo Mila. Sin embargo, nos dijo que no querías ir a casa y que tampoco querías verla" afirmó Mani. "Pero no quería que estuvieras sola, así que nos preguntó si podíamos venir"
Ally añadió, "No te preocupes. No estamos aquí para interrogarte. No tienes que decirnos por qué dejaste a Adam o por qué no quieres ver a Lauren-"
"Lauren me dijo que estaba enamorada de mi" espeté observándolas a todas, sus expresiones eran de asombro, similar a la que yo tenía anoche cuando la chica en cuestión me lo confesó. "No podía... no podía seguir con eso. Pensé que podía. Pensé que podía dejarla y tener una vida perfecta con Adam, pero todo eso no tiene importancia para mí ahora que sé como se siente ella. Todo lo que pensé que quería con Adam es nada comparado con la forma en la que la quiero a ella." Traté de explicarme sin dar muchos detalles, "Pero todo es muy complicado en estos momentos. Nos hemos hecho mucho daño desde que todo esto comenzó y ahora, no sé si podamos repararlo."
Hubo un silencio completo en la habitación antes de que Normani hablara, "O... kay..." dijo, "No me esperaba eso"
"Yo tampoco" confesó Ally.
"Qué va a pasar si no pueden repararlo?" preguntó Dinah. "Si no pueden superar todo? Quiero decir, de verdad crees que puedan volver a ser simplemente mejores amigas?"
"Escucha, no tengo todas las respuestas. Es por eso que me estoy quedando aquí, lejos de las distracciones, así puedo tratar de tomar una decisión lógica-"
"No hay nada de lógico en esto" afirmó la polinesia. "No hay una decisión sencilla que tomar aquí, si eso es lo que estás esperando que suceda, no va a suceder. Lo que sea que decidas hacer, ya sea que termines junto a Lauren o no, va a ser difícil"
Ally asintió, "Estoy de acuerdo con Dinah. Aquí no hay una opción fácil o simple"
"Nunca dije que fuera fácil" me defendí, pero Normani me dio una mirada cuestionante.
"Camila, te vas a enloquecer tratando de encontrar una respuesta racional- pero no hay una. Y quién dijo que la necesitas? Pueden resolver esto juntas"
Casi solté una carcajada. "Crees que estaría aquí si pensara que Lauren y yo podríamos resolver esto juntas?" Nadie respondió. "Estoy tratando lo mejor que puedo, okay? Tengo que enfrentar lo que hice- tengo que enfrentar el hecho de que la herí, y después ambas tenemos que reparar el daño que nos hemos hecho. Eso no es exactamente algo que sepamos como hacer."
"Lo único que estamos diciendo Camila, es que no deberías dejar a Lauren por fuera de una decisión que también le afecta a ella. Dale la oportunidad de cambiar."
Observé a Ally, preguntándome si ellas estarían diciendo lo mismo si supieran por todo por lo que habíamos pasado con Lauren. Si ellas supieran de nuestra aventura amorosa o sobre Kat, sobre James... fácilmente se estaba convirtiendo en demasiado que asimilar"
Dinah debió suponer lo que yo estaba pensando porque unos segundos después habló, señalando las bolsas que estaban sobre el escritorio de la habitación. "Trajimos la cena. Pero..." sonrió al ver todos los platos vacíos que estaban en la bandeja, "parece que ya comiste"
"Digamos que comí unos pequeños refrigerios" sonreí, aliviada de deshacerme por un momento de la presión de mi relación con Lauren. "pero siempre hay espacio para más" Normani y Ally se levantaron de la cama para sacar la comida, así que me acerqué a Dinah y me quedé de pie a su lado. "No sé que más decirte aparte de 'tenías razón'" susurré. "Estaba siendo demasiado egoísta y no tenía idea en lo que me estaba metiendo. Debí haberte escuchado. Lo que hice hirió a Lauren y ahora creo que he arruinado todo. Lamento mucho ser una completa idiota"
"Está bien" dijo con una sonrisa. "Además, creo que últimamente te han castigado lo suficiente" Dinah me abrazó antes de decir, "Y no arruinaste todo. Lauren te ama, no es así? Puedes encontrar una solución. Solo... no la dejes esperando por mucho tiempo."
Asentí, viendo como la más alta se unía a las otras dos chicas en el escritorio. Quise agradecerle a Lauren por enviarlas, a pesar de que le dije que iba a estar bien sola. Ella siempre parecía conocerme mejor de lo que yo misma lo hacía.