One and Only

Capítulo 13

Lauren's POV

Camila decidió que hoy quería ir caminando al trabajo, igual que en muchas ocasiones anteriores, y para ser sincera, agradecí que viviéramos cerca de la oficina.

Íbamos balanceando nuestras manos de adelante hacia atrás, sonriendo todo el camino mientras conversábamos de cualquier cosa que se nos ocurriera. Nuestro momento feliz se vio interrumpido cuando un rostro familiar se nos acercó. Sonreí ante los recuerdos que renacieron y que en algún momento creé con esta chica.

"Quién es esta?" preguntó Natalie, sin molestarse en saludarnos. Estaba celosa- podía notarlo en su voz.

"Ella es Camila." respondí, estudiando los rasgos de Natalie. Se veía bien, pero no tan bien como mi mejor amiga. Habíamos salido, o algo así, cuando me mudé a Nueva York.

La rubia ignoró a Camila y se acercó a mí. No parecía percatarse de nuestras manos entrelazadas- o quizás lo hizo pero no le importó. "Camila?" bufó observándome intensamente. "Ella sabe cómo hacer que tu corazón lata más rápido, así como yo?"

Sentí la incomodidad de Camila ante la situación, supuse que se debía a que ella y yo aún no habíamos dado ese paso, pero me mantuve sonriente, incluso cuando Natalie colocó su dedo índice en mis labios y comenzó a trazarlos. Todo esto se me hacía tan cómico- cuán vergonzoso debía ser para ella.

"Recuerdo lo que esos labios me hicieron." susurró. Solté la mano de Camila para poder mover a Natalie lejos de mí.

"Okay, Natalie. Eres una chica agradable pero-"

"Agradable?" repitió como si acabara de insultarla. "Estoy segura que fui mucho más que agradable contigo. No recuerdas como eran esas noches? Yo no he podido olvidarlas."

Mi roomate apartó su mirada de nosotras justo después de que noté en su expresión un atisbo de dolor. "Lo siento Natalie. No puedo darte lo que quieres." rápidamente tomé la mano de mi novia- sí, mi novia- apartándonos de la rubia.

Camila luchaba por contener sus lágrimas, lo podía notar. "Me veía como una maldita idiota parada junto a ti."

Mi corazón se hundió. "No, no es cierto."

"Claro que sí." espetó enojada. "Esa chica pudo ver en mi rostro que había dado en el punto- que logró enojarme. Dio Laur. Estuviste con ella por cuanto? Una semana máximo, y dormiste con ella. A mi, me conoces hace siete años, siete putos años!"

Oh Dios, habíamos regresado al mismo tema. "Ya hablamos de esto Camila" no pude evitar que mi voz saliera con algo de enojo.

"No, tú hablaste de esto." afirmó Camila y comenzó a caminar más rápido. Tuve casi que correr para alcanzarla.

"Por qué estás enojada? pregunté algo frustrada. "Porque una chica cualquiera se avergonzó a sí misma allá atrás?"

"No. Porque una chica me avergonzó a mi allá atrás."

Rodé mis ojos cuando retiró su mano de mi agarre, cruzó sus brazos para que así yo no intentara tener su mano de vuelta en la mía. Nuestro fugaz momento de felicidad se había desvanecido.

Cuando entramos a la oficina, nos sentamos en silencio. Esperé que el silencio lograra aminorar su tensión antes del almuerzo. Justo cuando comencé a pensar que estaríamos bien, Mark se aproximó a mí por detrás, susurrando en mi oído. Ni si quiera pude mirar a Camila- sabía lo furiosa que debía estar.

"Que opinas de los dos encontrándonos en el cuarto de aseo de allá?"

Rechacé su oferta, tratando de no hacer una escena, en especial con Camila escuchando nuestra conversación, pero él seguía insistiendo.