One and Only

Par nathalie-ag

923K 43.6K 18.3K

Traducción del fan fiction "One and Only". Todos los derechos a Hanna, su autora. La historia en su idioma or... Plus

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capitulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44 (Final)
Epílogo

Capítulo 9

21.8K 1.1K 397
Par nathalie-ag

Lauren's POV

-

"Qué sucedió?"

Ella sacudió su cabeza, como si tratara de recomponerse para poder contarme. "Terminé las cosas con Adam. Cuatro años de mi vida, ahora perdidos." susurró. "Ya no me voy a casar." yo estaba boquiabierta. No más Adam? Mierda. Camila comenzó a jugar con las puntas de mi cabello. "Supongo que no podrás deshacerte de mi."

-

"Cuándo terminaste con él? Adam estaba aquí?" pregunté, tratando de entender lo sucedido.

"Después que te fuiste."

"Qué? Camila, eso fue hace horas. Por qué no me llamaste?" la miré de cerca, tratando de que me mirara.

Ella levantó su cabeza. "Quería que pasaras un buen rato. Siento mucho haberlo estropeado de nuevo."

"No seas ridícula. Lamento no haber estado aquí para tí." suspiré, apretando mi agarre a su alrededor. "Estás bien? Quiero decir, como te sientes baby?"

"Me siento estúpida." se quejó, acomodándo su cabeza de nuevo sobre mi pecho. "Estoy aquí de nuevo, reteniéndote. He arruinado otra de tus citas- con esta ya son tres." respiró profundamente. "Soy una carga para tí, no es así Lauren?"

Fruncí mis cejas, acariciando su espalda. "Eres todo lo opuesto Camila. Eres una bendición. Soy la chica más afortunada por tenerte en mi vida como amiga. Haces mejores mis días." una sonrisa alcanzó mi rostro ante el pensamiento, sin importar que ella no me estuviera mirando. "Eres lo mejor que me ha pasado." encogí mis hombros, expresando mi siguiente pensamiento. "Tú no amabas a Adam y eso está bien. Sé lo mucho que intentaste- y lo mucho que querías amarlo- pero está bien si no es así, porque hay un montón de personas ahí afuera para ti Camz. Podrá tomar días, semanas o meses, pero encontrarás a alguien. Tendrás tu cuento de hadas."

Se sentó un poco para observarme. "No Lauren, creo que tenías razón. Ese amor estúpido no existe. Nunca voy a tener ese tipo de amor emocionante que ves en las películas- todo es una mentira. Tenías razón." repitió. "En estos momentos deseo haberte escuchado antes."

Oírla decir eso rompió mi corazón. Sonreí tristemente. "No, no tengo razón. No tenía razón. Tu estas hecha para esto Camz. Tú estas hecha para encontrar a alguien que esté loco por ti, alguien que pueda darte todo lo que quieres- quien pueda darte tu cuento de hadas. Cuando dije que ese amor no existe, estaba hablando de mi. Nunca encontraré el "indicado." Nadie va a querer estar a mi lado. Soy buena en la cama, no me malinterpretes, pero como novia? Soy una mierda y todos lo saben. Me agrada la gente y sus particularidades... la gente es bonita, pero nunca podré enamorarme de alguien. Tú lo harás. Tienes el corazón para eso."

Ella se quedó mirándome fijamente, su mano acariciaba mi rostro. Camila jamás me había mirado de la forma en la que lo estaba haciendo ahora. Sin embargo era una expresión familiar para mi, muchas chicas me miraban así todo el tiempo. Parpadeé. Por qué me estaba viendo así?

"Si yo tengo el corazón para eso, entonces tú también."

"No tengo corazón para nada."

Mi mejor amiga quitó su mano de mi cara. "Tú y yo sabemos que eso no es verdad."

Asentí lentamente. Oh no, Camila tenía que dejar de observarme así. Es hermosa, pero no puedo traspasar los límites. No lo haría. Decidí que lo mejor era cambiar de tema. Sorpresivamente, mi autocontrol era fuerte. "Cómo lo tomó Adam?"

Ella se desplomó de vuelta sobre mí con un gruñido. "Nada bien." hizo una pausa. "Creo que estaba demasiado sorprendido con el hecho de que yo tuviera una opinión- que no fuera algún tipo de robot sin cerebro que obedece cada orden." frunció sus cejas. "He sido ese robot sin cerebro por los últimos cuatro años- todo por alguien que ni siquiera me gusta." su mano encontró la mía, frotó su pulgar contra la palma de esta. "El te trataba mal. Odiaba eso"

Le sonreí. "Yo tampoco era la persona más amable con él."

"Sí, pero siempre estaré de tu lado y del opuesto a todos los demás."

"Hmm, yo también siempre estaré de mi lado."

Levantó la vista de nuevo y rió. "Cállate" me empujó. El sonido de nuestra ropa mojada fue audible.

"Creo que deberíamos salir de aquí." dije.

"Noooo" se quejó. "Quedémonos aquí por un rato, okay?"

Accedí a regañadientes. Esto iba a arruinar mi vestido, pero Camila era más importante. Hablamos por otra hora o más, antes de que se durmiera en mis brazos. La cargué hasta su habitación, agradeciendo a Dios que no se me hubiera resbalado en el camino. La acosté en su cama antes de dirigirme a su closet para buscar ropa seca. Saqué una camiseta y un short, los puse en la cama, a su lado. Cuidadosamente le quité la camiseta empapada y el pantalón, la vestí con la ropa seca lo más rápido posible, satisfecha de no haberla despertado. La tapé con el edredón y dejé un beso en su frente antes de ponerme de pie para irme.

"Espera." susurró entredormida. "Quédate... aquí."

Suspiré. Quería que durmiera en su cama? Por qué de repente era gran cosa para mi? Había dormido en su cama antes- cuando ella tenía un prometido. Para ser sincera estaba al borde de un colapso gracias a la forma en la que me había mirado esta noche. Llámenme engreída, pero tenía pleno conocimiento de las diferentes formas en las que las chicas me miraban. No es que estuviera incómoda, pero no había forma de que fuera a comenzar algo aquí. Sería tóxico para nuestra amistad. La acababa de recuperar y no iba a arriesgar eso esta noche. Ni nunca.

"Lauren?" se sentó un poco, apoyándose en sus brazos. Se veía preocupada, seguramente por mi falta de respuesta. No lo dudé.

Me acomodé a su lado en la cama, relajándome un poco cuando se acurrucó a mi lado. Esto era cómodo para mi- siempre lo hacíamos. Sonreí en la oscuridad mientras la sostenía a mi lado. "Buenas noches Camz."

"Buenas noches. Te quiero."

"Te quiero"

Rápidamente se durmió en mis brazos, como en muchas ocasiones anteriores, pero yo no podía conciliar el sueño. Tenía mucho que pensar. Miré el reloj. Era casi media noche. Bufé. No había posibilidad de que me durmiera pronto. Mi mente vagaba de nuevo por todo lo ocurrido con Camila. Mi mejor amiga no había estado soltera en cuatro años- esto iba a ser un cambio.

Recordé cómo horas atrás, estuvo a punto de salir de mi vida. Iba a estar a miles de kilómetros lejos de mi- pero ya no lo estaría. Se quedaba conmigo. Camila se quedaba conmigo. Sonreí, acariciando su cabello sin darme cuenta. Estaba contenta de que nuestra amistad no fuera a terminar pronto y tampoco esta cercanía en la que nos encontrábamos. Nunca dejaría a nadie, excepto Camila, saber lo mucho que amaba acurrucarme. Me hacia sentir segura y en ocasiones, lograba dormir una hora o dos. Creo que ambas éramos conscientes del hecho de que no muchos amigos eran tan cercanos como nosotras. Los amigos normalmente no se acurrucaban tanto y no tenían tanto contacto físico, pero no me importaba, Camila era mi hogar y yo el suyo, y eso era todo lo que nos importaba.

-

Estuve entrando y saliendo del sueño la mayor parte de la noche, durmiendo por un par de minutos o más. Observé a Camila, quien aún tenía su cabeza en mi pecho, y cuidadosamente la acomodé en la almohada mientras miraba el reloj- seis am. Respiré profundamente, me levanté y me dirigí a la cocina para preparar café. Podía decir que este sería un largo día.

-

Tuve razón, fue un largo día. Estábamos todas en la sala de receso, las chicas nos rodeaban, Normani y Ally me observaban, intrigadas por todo lo que habíamos discutido la noche anterior. Camila no les había dado la noticia aún y estaba comenzando a pensar que no lo haría, pero cuando la miré, supe que estaba a punto de decir algo.

"Tengo algo que contarles." dijo. Estaba de pie a mi lado, mi mano en la suya. Había estado demasiado afectiva hoy, más de lo habitual, si es que eso era posible.

"Estás embarazada?" escupió Dinah.

Pude ver a Camila hacer una mueca ante la idea. "No" todas se relajaron. "De hecho, yo, uh- bueno... terminé con Adam." Las chicas estaban boquiabiertas y Camila apretó mi mano, haciendo que su agarre fuera más fuerte. Normani y Ally me miraron. "Entonces, no habrá boda y al parecer me quedaré aquí." mi mejor amiga me observó sonriente. "Con Lauren."

"Que sucedió entre tú y Adam?" preguntó Ally, su delicada mano se posaba sobre su pecho en señal de sorpresa.

Camila las miró y dudó un poco antes de responder. "No iba a funcionar a largo plazo. Por más que quisiera... no iba a suceder." Suspiró. "No tengo sentimientos fuertes por él, me entienden? He visto la forma en la que hablan de sus esposos y... así no eran las cosas para mí. Nunca lo fueron."

Dinah observó nuestras manos, dejó escapar una risa incómoda y luego la habitación volvió al silencio sepulcral.

Fue Nomani quien finalmente habló. "Bueno, estamos felices de saber que te quedas Mila y apoyamos cualquier decisión que tomes."

Sonreí ante eso. Finalmente dijeron algo que hizo que mi pobre roomate se relajara. Ella abrazaba a Normani agradeciendo sus palabras cuando Mark entró. Se puso detrás mio y me cogió el trasero, golpee su mano para que la quitara.

"Que pasa baby?" susurró en mi oído, las chicas me observaban. "Eso parecía gustarte el fin de semana."

No dije nada, estaba demasiado avergonzada como para responder a sus comentarios. Creo que las chicas jamás me habían visto quedarme callada después de una isinuación como esa. Debo haberles parecido débil. Sentí a Camila a mi lado, frotando mi brazo suavemente. Mark se alejó para servirse una taza de café mientras yo trataba de respirar normalmente. Estaba tan enojada conmigo misma. El no debería controlar mis emociones de esa forma.

Segundos más tarde Mark regresó a mi lado, señalando a las chicas. "Mira a tus amigas- mujeres sofisticadas y elegantes. Todas tienen sus vidas hechas baby. Qué tienes tú?" sonrió.

De repente, Dinah se le acercó y le echó el café que tenía encima, empapando su traje. Él gritó de dolor mientras las demás miraban boquiabiertas la escena.

"Ella nos tiene a nosotras, imbécil. Que tienes tú?" gruñó Dinah, tomándome por el brazo y sacándome de el lugar. Me llevó hasta un sitio apartado pero no muy lejos de nuestros escritorios. "Mira Lauren." Comenzó. "Sé que no quieres hablar sobre tu fin de semana con Mark-estúpido," Sonreí al escuchar su apodo. "así que no voy a preguntar. Tampoco sé por qué pensaste que la mejor opción que tenías era llamarlo a él en lugar de llamar a Camila, Ally, Normani o a mí, pero quiero asegurarme de que eso no pase de nuevo. Siempre puedes llamarme y yo estaré ahí en un segundo, lo juro por Dios- y sé que odias hablar de sentimientos, así que no tenemos que hacer eso. Podemos ver películas, hablar mierda de la gente o hacerle un sacrificio a Beyoncé- lo que necesites, estoy aquí." afirmó sonriente.

Asentí, un poco sorprendida. No tenía muchos amigos y nunca los he tenido, pero esta era la primera vez que me daba cuenta que había ganado uno- bueno, como tres, en realidad. Dinah me ofreció su brazo y enlacé el mio con el suyo riendo. "Gracias D. Me impresionas. Tirarle el café encima a Mark? Toda mi imagen de ti ha cambiado- para bien."

"Te lo he dicho chica. Estas hormonas. Tendrías que ver con lo que mi pobre esposo tiene que lidiar."

Reí, caminando de vuelta a mi escritorio, en donde Camila estaba de pie, buscándome con algo de duda. Normani y Ally estaban cerca a ella, una sonrisa satisfactoria plasmada en sus rostros, seguramente orgullosas de lo que Dinah había hecho. Cuando mi mejor amiga me vio, me abrazó. Me tensé y me soltó. Había preocupación en sus ojos.

"Estás bien?" preguntó.

"Estoy bien Camila." dije, apenada de que estuviera haciendo todo esto en frente de las demás, quienes tenían sonrisas pícaras en sus rostros, especialmente Dinah. Me miró de pies a cabeza para asegurarse que estuviera completa. "Qué haces? No fuí atacada. Deja de hacer eso." la regañé.

Camila me miró, frunciendo sus cejas. "Solo quiero que estés bien."

"Deberían salir!" Dinah rió junto con Normani y Ally. Camila le dió su mirada asesina antes de dirigirse nuevamente a mí.

"Me siento culpable." Admitió. "No debí dejarte sola después de que Adam te contara sobre California." las chicas se miraron entre sí, obviamente sintiendo que sobraban en la escena.

"Podemos hablar de eso luego Camz" dije.

"Te dejé sola con un tipo que no me agrada." Frunció el seño, entrelazando nuestras manos.

Cual era su cosa con la constante tocadera hoy? Solo estaba logrando que mi corazón se acelerara. "No te culpo por las decisiones que yo tomé... además, yo te dejé sola anoche por la misma razón. Lo recuerdas?" Asintió, apartando la mirada, como si estuviera pensando en algo. "Te quiero" dije.

Tragó pesadamente y volvió a mirarme. "También te quiero."

-

El resto del día fue, por no decir más, extraño. Camila estuvo todo el tiempo cerca de mi, siempre con el contacto físico, pero la sentía distante, como si su mente estuviera en otra parte.

Las cosas empeoraron cuando llegamos a casa porque allá no estaban Dinah, Normani o Ally para distraerla. Le cociné su cena favorita, pero no obtuve mucha reacción con eso. No hablamos casi. Ella simplemente se estuvo a mi lado la mayor parte de la noche. Hubiera dado cualquier cosa por saber lo que pasaba por su mente.

Estaba escribiendo en mi diario, sentada en el sofá mientras ella estaba sentada a mi lado, recostada sobre mí, con su cabeza en mi hombro, completamente en silencio.

"Sobre qué escribes ahí Lauren?" me preguntó. Nunca había dejado que alguien viera mi diario y ella siempre respetó eso. Esta era la primera vez que me preguntaba algo al respecto.

"Escribo sobre muchas cosas." Encogí mis hombros.

"Escribes sobre mí?"

Sonreí y giró su cabeza para observarme. "Quieres que escriba sobre ti?"

Camila frunció sus labios, moviendo su cabeza nuevamente para regresar a su posición anterior. Después de un rato se levantó. "Me iré a dormir." Asentí y ella se dirigió a su habitación, cerrando la puerta detrás suyo.

Decidí ir a mi estudio, el sitio en donde pasaba mis noches de insomnio. Coloqué Hotel California de Eagles, manteniendo el volumen más bajo de lo normal para no despertar a mi mejor amiga. Pensé en su pregunta. "Escribes sobre mí?" Habían partes significativas de mi escritura que mencionaban características de Camila- cabello castaño, ojos marrones, facciones suaves- pero no sabía si estaba lista para admitirle eso. O admitirmelo a mí misma.

Ella era la persona más importante en mi vida, por supuesto que escribía sobre ella. De hecho, ella era la temática de todo lo que escribía, solo que tenía diferentes variaciones.

Saqué esos pensamientos de mi cabeza, decidida a continuar escribiendo. Supe que estaría despierta la mayor parte de la noche.

-

Fue a eso de las dos de la madrugada cuando Camila entró a mi estudio. Levanté la mirada de mi diario.

"No puedo dormir." Hizo un puchero. Su voz era casi desesperada. Se acercó cuando abrí mis brazos. Se sentó en mi regazo, aspirando mi aroma.

"Qué te está molestando?" pregunté.

Me observó por un momento, su expresión era de molestia. "No lo sé." dijo finalmente.

Con la yema de mis dedos tracé su espalda. "Quieres salir a caminar un poco?"

Asintió.

Caminábamos por la calle medio iluminada, nuestros brazos estaban entrelazados. Pasaron veinte minutos antes de que mi roomate se detuviera por completo, haciendo que yo me detuviera con ella. "Qué sucede?"

Camila me miró ansiosamente, pero en sus ojos vi deseo. Mi respiración se detuvo. Su mirada no era como la de anoche- era mucho más intensa. Se acercó a mí. "Camila..." Dije. "Qué estás haciendo?" Estábamos demasiado cerca, traté de retroceder pero mi espalda chocó con la pared de un edificio.

Sentí su respiración caliente sobre mi, sus ojos estaban en mis labios. Estaba nerviosa, lo podía notar.

Antes de que pudiera saberlo, me besó. Fue lento y se aseguró que solamente nuestros labios se tocaran. Ni siquiera sentí su cuerpo contra el mio. La observé cuando se alejó, sus ojos buscaron mi reacción. Lo que sea que haya encontrado, le dió confianza para volverme a besar y me alegró haberle correspondido el beso en esta ocasión. Sus labios eran suaves. No sabían a alcohol y ella no olía a perfume barato. Nuestros labios se movieron sensualmente, encajando a la perfección. Esto no se parecía a nada que hubiera sentido antes, incluso con toda mi experiencia.

Camila me acercó más, esto me hizo caer en cuenta de lo que estaba haciendo. Me alejé, suspirando al encontrarme con sus hermosos ojos marrones. "Camila no. Tú no quieres esto." Me miró confundida. "Te mereces algo mejor."

"No hay nadie mejor que tú." dijo frunciendo el ceño.

"No soy buena para ti Camila" Hice una pausa, observándola mientras ella apartaba la mirada. "Lo sabes."

Por un momento me miró de nuevo, habían lágrimas en sus ojos, antes de comenzar a caminar en dirección opuesta a la que íbamos. La llamé unas veinte veces pero nunca respondió.

Eventualmente, regresé al apartamento, caminaba de un lado a otro en la sala. Eran más de las dos de la madrugada y mi mejor amiga decidió desaparecer en la noche después de besarme. Mierda. Estaba segura que sólo lo había hecho porque aún estaba enojada por lo de Adam- esa era la única explicación lógica. Yo no le gustaba. Sería ridículo. No soy nada en comparación a lo que ella debería tener en su vida.

Había pasado una hora y aún no llegaba. Me senté en la mesa de la cocina, mis piernas saltaban de arriba abajo debido a la preocupación de la que era presa, tenía mi cabeza en mis manos. No había forma de que dejara que esta relación entre nosotras sucediera. Camila tenía potencial en la vida y no podía quitarle eso. Quería un cuento de hadas y yo era lo más lejano a esa idea. Tampoco sabía si ella quería algo serio. Acaba de romper su compromiso, me seguía recordando. No le gustas. Todo esto es por Adam. Mi subconsciente habló.

En un instante la puerta de abrió y ahí estaba mi Camila, de pie frente a mi. No pude evitar envolverla en un abrazo.

"Lo lamento, yo... traspasé los límites." dijo abrazándome débilmente.

Mi agarre en ella era desesperado y fuerte. "No me importa eso. Solo te necesitaba sana y salva. Lo estás?" La solté, observándola de pies a cabeza como ella había hecho conmigo en la oficina.

Asintió con una sonrisa triste en sus labios. "No quiero que las cosas sean raras entre nosotras, okay?"

"Siempre seremos mejores amigas Camz."

Su sonrisa se desvaneció al escuchar mis palabras y nos giramos para ir a nuestras respectivas habitaciones.

-

No podía soportar esto. Mi mente solo podía concentrarse en el beso. Fue inocente y no había nada extremo en él. Era tan diferente a lo que estaba acostumbrada. Nunca me había sentido nerviosa cuando alguien iba a besarme. Que carajos me estaba pasando? Que eran estos nuevos sentimientos? Gruñí contra mi almohada, noté que mi boca estaba seca. Bufé y salí de mi habitación para ir a la cocina. Me detuve cuando vi a Camila.

"Por qué estás despierta aún?" pregunté.

"No puedo dormir." dijo, su voz era débil.

"Yo tampoco."

Compartimos una mirada incómoda antes de que ella tomara algo de la alacena y yo fuera en busca de un vaso. De repente giró, chocando abruptamente conmigo. De inmediato la agarré, sosteniéndola cerca a mi. Su jadeo fue audible por la sorpresa que le generó el suceso y pude escuchar cómo su respiración se volvió mas rápida. O era la mía?

"Ten cuidado." susurré.

Ella bajó la mirada hasta mis labios y, como muchas veces en mi vida, quise besarla. "Sí. Lo siento" respondió.

La solté- ya no tenía sed. Caminé hacia mi estudio y escuché la puerta de su habitación cerrarse. Esto iba a ser más difícil de lo que pensé.

Continuer la Lecture

Vous Aimerez Aussi

9.5K 705 16
Luego de un accidente de verano en las montañas, Lauren y sus amigas tendrán que enfrentarse a una nueva realidad y nuevos obstáculos; pues, con el a...
1.5M 100K 74
Lauren Jauregui siempre ha vivido encerrada entre las paredes de los hospitales, no recuerda el sol contra su piel demasiado blanca para su gusto, n...
47.6K 3.6K 40
Después de ser estafada por su padre, Lauren Miller entra a la cárcel para cumplir una corta condena de seis meses, en los cuales deberá aprender a s...
442K 20.7K 44
Hay gente que cree en el destino. Hay gente que piensa que lo que pasa no es más que mera casualidad. Pero ¿qué me diríais si os digo que en toda ca...