En su firma se idealiza la figura paterna de forma rigurosa, usando una fuerza bruta muy acusada pero a veces infernal (cantidad de ángulos que se presentan).
No fue un emperador, sino también un General. La "n" aparece mal escrita como una doble "r" sintiendo en su interior los deseos incontrolables de triunfo cayera quien cayera, y teniendo que medirse muy a menudo para templar ese desenfrenado carácter para proyectar metas realmente acertadas.
Enlazó la rubrica con el futuro próximo, avanzando hacia el éxito material de forma enérgica y contundente. Se dejó aconsejar por quienes le rodearon, aunque a la hora de planear técnicas de ataque y la toma de decisiones corrieron totalmente por su cuenta.
A pesar de tener bajones de ánimo súbitos, creyó en sí mismo y supo levantarse tras las caídas.
Del 15 de agosto de 1769 al 05 de mayo de 1821