One and Only

By nathalie-ag

923K 43.6K 18.3K

Traducción del fan fiction "One and Only". Todos los derechos a Hanna, su autora. La historia en su idioma or... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capitulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44 (Final)
Epílogo

Capítulo 3

27.4K 1.1K 686
By nathalie-ag

Camila's POV

Cuando desperté, noté la ausencia del cuerpo de Lauren junto al mio. La sensación que esto me produjo me hizo sentir insegura de alguna forma - era algo que no había experimentado antes. Saqué ese pensamiento de mi cabeza, me levanté y busqué una camiseta en su closet. Para mi no era muy cómodo mostrar tanta piel en frente de Lauren quien tenía un cuerpo absolutamente impecable.

Caminé hasta la cocina y encontré que la morena medio vestida estaba haciendo desayuno - pancakes, para ser exacta. Tenía su ipod entre su brasier y sus audífonos puestos, por supuesto, sus pasos de baile no eran nada vergonzosos. Meneaba sus caderas sensualmente al ritmo de la música que estaba escuchando. Me sonrojé, sentí mi cuerpo tensarse - y eso me hizo sonrojar aún más. Debía estar perdiendo la cabeza para reaccionar de tal forma ante mi mejor amiga. Además, tengo un prometido. Mi ánimo decayó al recordar todo lo que le había dicho a Lauren la noche anterior. Mierda.

Ella giró pero no se sorprendió al verme. Se quitó sus audífonos y me sonrió radiante. Cómo alguien podía verse tan impresionante a estas horas de la mañana? "Buenos días Camz" dijo colocando algunos pancakes en un plato. "Mírame! Hice el desayuno!"

"Eso veo. Qué tan temprano te levantaste?"

Frunció el ceño antes de girar de nuevo para seguir cocinando. "En realidad no dormí mucho." asentí. Lauren rara vez dormía. Cuando no estaba en su habitación entretenida con sus invitados, estaba en su estudio... o con su horriblemente emocional roomate, supongo. "Dormiste bien?"

"Siempre duermo bien cuando me abrazas"

"Cuidado Camila. Cualquiera pensaría que me estás coqueteando." rió aún dándome la espalda. "Te ves muy tierna cuando duermes."

"Cuidado Lauren. Cualquiera pensaría que me estás coqueteando." me burlé. "También que eres un poco acosadora."

Lauren giró, encogió sus hombros y sonreí. Ese famoso gesto de Jauregui. Ella lo hacía todo el tiempo y pienso que le salía más que perfecto. "Verás a Adam hoy?"

"Que forma de cambiar de tema." mi sonrisa se desvaneció. "Creo que sí." ella se apoyó en el mostrador con sus ojos verdes mirándome fijamente. "Sé lo que estás pensando y no quiero hablar del tema."

"Querías hablar de eso anoche, así que creo que hay una parte de ti que aún quiere discutirlo."

"No Laur. Estaba cansada y él dijo algo que me molestó." sacudí mi cabeza. "Por favor no lo menciones, especialmente a él."

Lauren me miró por un momento, debatiéndose entre dejar las cosas así o no. Finalmente asintió. "Okay, pero quiero que hables conmigo si te vuelves a sentir infeliz o con dudas respecto a su matrimonio." me apuntó con su espátula de cocina. "Entendido Cabello?"

Sonreí. "Estás preocupada por mi Jauregui?" ella sonrió, rodando sus ojos y bajando el utensilio de cocina.

"Tú no me dejaste más opción. Entrando por esa puerta e interrumpiendo mi aventura nocturna con Rebecca."

"Rachel." le corregí, entretenida con su broma. "Creo que la pobre estaba muy enojada. Ustedes dos terminaron?" soné algo esperanzada y ni supe por qué. Lauren podía salir con quien quisiera.

Ella dió un mordisco a su pancake, encogiendo sus hombros de nuevo. "Rachel tuvo toda la noche para pensarlo y estoy segura de que me va a pedir que la perdone, pero igual sabes que no tiendo a repetir. De cualquier forma, fue divertido mientras duró, pero tengo una cita esta noche."

La miré boquiabierta. "Cómo? Ni siquiera has salido de la casa desde anoche. Y son literalmente las ocho de la mañana."

Lauren bebió un sorbo de su café, su cabello sedoso cayendo sobre su pecho y cubriendo su brasier. "Saldré con esta chica - es la directora financiera de una compañía, así que vive muy ocupada. Incluso había olvidado que hicimos planes hace algún tiempo hasta que esta mañana apareció en mis recordatorios para hoy. Le habría cancelado si aún estuviera con Rachel, pero ahora soy una chica soltera" meneó sus cejas divertidamente. "Además, es muy sexy."

"Cuantos años tiene?" UNA DIRECTORA FINANCIERA? Eso es un logro gigante para una persona de nuestra edad.

"No es tan vieja como Mark." admitió. Mark tenía treinta y cuatro años - once más que Lauren. Mi rostro reveló una expresión de aversión al escuchar su nombre. "Tiene veintinueve años"

"Así que estás interesada en chicas mayores, huh? Supongo entonces que no tengo esperanzas siendo menor que tú." fingí decepción y ella soltó una carcajada. "Traerás a la señora a casa?"

Lauren reflexionó un momento, "Sólo si ella quiere venir."

Me burlé al escuchar su respuesta. "Acaso has conocido a alguna chica que no haya querido venir a casa contigo?"

Una sonrisa de confianza se apoderó de su rostro. "Okay, supongo entonces que sí, probablemente vendrá a casa conmigo."

"A qué hora?"

"Hay algún horario estipulado para que yo llegue a casa Mamá?"

Rodé mis ojos. "A Adam no le gusta que esté aquí cuando traes chicas a la casa. Dice que son muy "ruidosas"."

Ella resopló. "Quizás él se siente inseguro de sí mismo. Acaso tú no gritas?" me sonrojé ante la pregunta. "Además, tú no tienes doce años Camz. No sé por qué te trata como si los tuvieras." Lauren me miró seriamente. "A menos que realmente el ruido te moleste."

Sacudí mi cabeza. "No, de hecho estoy bastante acostumbrada. Tengo la plena seguridad que me adapté a ignorarlo. Años de práctica dan resultados." Lauren rió al escuchar mi comentario y continué hablando. "Olvida que pregunté. Adam puede soportarlo."

"No - no, Camz. No quiero causarte más problemas." dijo y suspiró mostrando una expresión seria. "Sé que el hecho de que vivas aquí conmigo pone algo de tensión en su relación, más que todo porque no le caigo bien, pero quiero tratar de solucionar eso. Haré mi mejor esfuerzo, okay? Simplemente escríbeme cuando vengas camino a casa y tendré todo en orden."

"Lauren, está bien-"

"No, no lo está Camila. Quiero que seas feliz - necesito que lo seas. Yo puedo ser más discreta, okay?" parecía preocupada.

En ningún momento pretendía preocuparla. Lo que le dije la noche anterior se había quedado en su cabeza y lo único que ahora quería es que lo olvidara. Decidí acercarme al mostrador para quedar frente a frente. "Tú eres parte de mi mundo Laur - afrontémoslo, tú eres casi que la mayor parte de mi mundo. Yo no quiero que trates de ser "discreta" por mi o por Adam. Lo que él diga acerca de mi relación contigo - no me afecta porque tú eres mi mejor amiga y me niego a vivir sin ti." Lauren me abrazó y besé su mejilla por un momento. "Ahora, supéralo, sal esta noche y "cierra el trato" con esa chica. Yo estaré haciéndote barra de forma silenciosa mientras estoy por ahí en algún restaurante en una costosísima cena." su risa melódica sonó en mi oído e inmediatamente me relajé, deseando no romper el contacto aún. "Llamemos al trabajo y finjamos estar enfermas sólo por hoy." le propuse sosteniéndola aún cerca.

"Ya hemos hecho eso muchas veces - creo que se están dando cuenta que somos empleadas perezosas."

Me quejé. "Entonces más vale que nos alistemos."

"Te apuesto una carrera hasta la oficina"

-

Lauren terminó ganando la carrera porque: 1.) No puedo correr. 2.) ... No puedo correr. Ella estaba completamente inmersa en nuestro juego cuando nos sentamos la una frente a la otra y yo me debatía entre el pensamiento de si debía o no, hacer un esfuerzo para trasladar mi escritorio lejos del suyo. En ocasiones me hacía sentir como una niña pequeña. Me alegré al ver algunos compañeros de trabajo aproximarse a nosotras.

Dinah deslizó mi silla hacia un lado para así poder acomodarse junto a mi. "Mila, por qué la cara larga? Acaso Lauren y tú finalmente-"

Lauren echó su cabeza hacia atrás soltando una carcajada cuando interrumpí. "Dinah, no! Nos preguntas lo mismo prácticamente todos los días!"

"Está destinado a suceder algún día."

"Ellas han trabajado aquí por un poco más de un año DJ. Creo que tu pequeña fantasía no va a suceder." intervino Normani colocando su mano en el hombro de Lauren.

"Como sea..." comenzó Ally, sus ojos brillaban con entusiasmo. "Creo que la pregunta aquí era: Que te sucede Mila?"

Lauren me sonrió. "Camz está enojada porque apostamos una carrera al trabajo y yo gané."

"Apostaron una carrera? Esto de ser adultos no está funcionando con ustedes dos." rió Normani.

Resoplé. "Lauren tuvo una ventaja injusta."

"Cúal?" preguntó Dinah y fruncí mis labios.

"Ella se pone y se quita la ropa más rápido que cualquier persona que haya visto en mi vida - además, puede correr sin tropezarse, caerse o soñar con pizzas."

"Acéptalo Cabello; eres una muy mala y resentida perdedora." Lauren y las chicas rieron.

Levanté mi mano silenciándola. "Volviendo a los sucesos importantes, cómo están chicas?" pregunté observándolas. No nos conocíamos desde hace mucho tiempo, un año o quizás un poco más, pero se puede decir que éramos buenas amigas. Agradecía inmensamente que todas estuvieran casadas, pues sabía que así Lauren no intentaría nada con ellas. Estaba segura que esa era especígficamente la razón por la cual no teníamos más amigas aparte de esas tres chicas, pero tampoco me importaba.

"Yo soy importante." murmuró Lauren casi de forma imperceptible pero Dinah comenzó a contarnos sobre su baby shower, Ally sobre sus dos hijos y Normani sobre su luna de miel, de la cuál no hacía mucho había regresado. Pude notar que todo esto abrumó un poco a Lauren, pero las preguntas que vinieron enseguida fueron las que causaron un mayor efecto en ella.

"Adam y tú cuando se casan?" preguntó Ally.

"Quieres tener hijos?" presionó Dinah.

"Cuantos? Yo quiero tres!" habló Normani.

Mi garganta se secó cuando traté de hablar y dirigí mi mirada a Lauren en busca de ayuda. Ella se inclinó hacia adelante en su asiento y todas dirigieron su atención hacia su escritorio mientras yo logré recuperar mi respiración. No sé que sucedió conmigo, normalmente era buena respondiendo ese tipo de preguntas. Pude ver la preocupación presente en los ojos de Lauren mientras me observaba.

"Whoa, chicas. Déjenla respirar un poco. Están muy obsesionadas con la vida de la Señorita Camila Cabello aquí presente"

Dinah se burló. "No seguirá siendo la señorita Camila Cabello por mucho tiempo."

Ally le sonrió a Lauren. "Ya sé que es lo que está pasando aquí. Te sientes incómoda cuando hablamos de compromiso y sobre cómo algún día terminarás como nosotras, casada y con hijos."

Casi reí al observar la expresión de desagrado que se evidenció en el rostro de Lauren mientras Ally hablaba. "Uh, claro." le respondió. "Realmente me incomoda oír acerca de mi nefasto destino como madre y esposa." Lauren se estremeció.

Normani encogió sus hombros. "La parte de ser la esposa, no es tan malo."

"Aún!" gritaron Ally y Dinah a la vez, y me retorcí ante la intervención. Las dos chicas comenzaron a compartir sus historias sobre los peores momentos que han tenido en sus matrimonios - todas las peleas, desacuerdos y cómo a veces tú simplemente deseas "rendirte y divorciarte". Cerré mis ojos pensando que quizás así podría bloquear el efecto que sus palabras estaban teniendo en mí pero no funcionó. Esta conversación definitivamente no me estaba ayudando en absoluto, teniendo en cuenta las dudas que rondaban últimamente mi cabeza.

"Tú solo espera Milla. Una vez estés dentro, lo estarás para el resto del camino." Dinah rió y Ally asintió ante las palabras.

"Pero todo vale la pena cuando realmente amas a la persona, y tú amas a Adam, no es así?" dijo Ally, más como una afimación que como una pregunta.

"Así es." dije.

Las chicas cambiaron de tema pero yo perdí la noción de todo, no supe de qué conversaban ahora. De repente, sentí que hasta me costaba pasar saliva. Encontré los ojos de Lauren fijos en mi. Ella asentía cada vez que las chicas le hablaban, pero sus ojos nunca se apartaron de mi.

Rachel se acercó a nosotros y las chicas dejaron de hablar para observarla, Lauren seguía mirándome. "Puedo hablar contigo?" se dirigió a mi mejor amiga y al ver a las chicas alrededor de nosotras añadió. "A solas." Rachel desvió su mirada hacia donde yo me encontraba. "Es bueno verte cuando no estás llorando Camila." Ally, Dinah y Normani me observaron y Lauren decidió romper su contacto visual conmigo, levantándose de su silla. En cuestión de segundos acomodó a la perfección su blusa azul y su falda negra antes de seguir a Rachel quien hacía sonar sus tacones negros contra el piso.

Dinah me dió un codazo y las chicas se acercaron más a mi. "Qué fue eso?" preguntó.

"Y...-" interrumpió Normani. "Queremos la verdad."

"Estaba algo molesta anoche, por nada en realidad, y entré a la habitación de Lauren para hablar con ella..." Dinah se cubrió la boca con su mano, sus ojos destellando diversión. "Debí suponer que Rachel estaba ahí, pero supongo que no me detuve a pensarlo. De todas formas, para hacerles la historia más corta, las interrumpí y Lauren terminó echando a Rachel." ellas estallaron en carcajadas, pero yo por el contrario no pensé que fuera divertido.

"Rachel estaba enojada?" preguntó Dinah.

"Enojada es poco." respondí su pregunta, mientras Ally me estudiaba con detenimiento.

"Bueno, creo que Rachel no debería estar tan sorprendida de que Lauren te haya escogido a tí por encima de ella." afirmó y las otras dos chicas asintieron. "Ella te escogería por encima de cualquier persona."

Sonreí al escuchar sus palabras. "Lo sé." el sonido de los tacones de Rachel volvió a escucharse. "Yo también escogería a Lauren por encima de cualquier persona."

"Lo sabemos" gruñó Dinah. "Es por eso que pienso que ustedes dos deberían enamorarse."

Lauren apareció de nuevo doblando la esquina del corredor.

"Quiénes deberían enamorarse?" preguntó sentándose nuevamente en su silla.

"Camila y tú" Normani rodó sus ojos. "Ya casi están en ese punto."

"Apuesto a que Adam debe estar celoso." rió Ally y pude ver a Lauren fruncir su ceño ante esa afirmación. Sus ojos nuevamente se dirigieron hacia mí. Yo aparté la mirada.

"Camila encontró a un chico que la ama; nunca le quitaría eso." mi mirada se clavó en el piso y comencé a observar mis pies. Lauren debió percibir mi incomodidad porque continuó hablando. "Acaso ustedes no tienen trabajo que hacer? Dejen de preguntar por mi amorío secreto con Camila" bromeó. Sentí a Dinah levantarse de mi lado.

"Para tu fortuna, tenemos toneladas de trabajo por hacer" afirmó Dinah.

Ally se inclinó a mi lado. "Si en algún momento necesitas ayuda con la boda, avísame. Estaré más que feliz de ayudar." sonrió.

"Para ser sincera Adam no me ha dejado tomar ninguna desición sobre la boda, es un poco insistente en que las cosas deben ser como el las quiere." todas se quedaron mirándome como si acabara de decir algo inaceptable, sus rostros tenían expresiones tristes.

Las tres chicas se fueron a sus puestos de trabajo y sólo quedamos Lauren y yo. "Entonces..." comenzó a decir. "no hay nada de lo que quieras hablar?"

"Por favor, simplemente ignóralo."

"Prometiste que me dirías si estabas teniendo dudas respecto a tu compromiso de nuevo, y no parecías muy emocionada al hablar de tu prometido."

Suspiré. "Lo que suceda dentro de mi relación con mi prometido solo nos concierne a él y a mi - no a él, a ti y a mi." cuando terminé de hablar, me di cuenta que lo que dije sonó hiriente, pero Lauren no parecía ofendida. De hecho, nunca mostraba cómo se sentía. En lugar de eso, se limitó a darme una de esas miradas que dicen "Sabes que tengo razón." y continuó con su trabajo.

-

Lauren y yo caminamos hacia nuestro apartamento sin cruzar palabra, y estaba segura de que me estaba tratando con indiferencia por la forma en la que le hablé en la mañana.

Cuando entramos al apartamento, decidí romper el silencio. "Estás enojada conmigo?" pregunté, mi voz sonaba asustada. No pude evitarlo, la incapacidad de Lauren para mostrar lo que sentía, me asustaba a veces. Sentía que en cualquier momento ella simplemente se iría sin decir una palabra. No había respondido mi pregunta cuando se sirvió un trago.

Tomó un sorbo de vino y finalmente habló. "Yo no me enojo."

Asentí - era verdad. En los siete años que llevo conociéndola, ni una sola vez ha estado enojada. Ella era tranquila, calmada y serena 24/7. "Irritada entonces?"

"Tampoco irritada."

"Puedo preguntar entonces como te estás sintiendo respecto a mi?"

"Lo acabas de hacer." respondió y la observé. No iba a seguirle el juego. Ella se dió cuenta de mi expresión y dejó el vino en la mesa. "Estoy preocupada." Oh Dios. Aquí íbamos de nuevo. "Preocupada porque no quiero que cometas un error - no uno que te deje infeliz por el resto de tu vida."

Suspiré. "Lauren-"

"No, Camila. Esto no es una charla amistosa sobre algún novio cualquiera. Es tú boda. Firmarás documentos que te vincularán con un hombre por el resto de tu vida."

"Estoy perfectamente consciente de lo que estoy haciendo." la fulminé con la mirada. "Esto no es la secundaria Lauren. Ya no tengo quince años; tengo veintitrés. Deja de tratarme como si fuera una niña."

"Entonces deja de comportarte como una." Lauren encogió sus hombros. Mi boca se abrió ante semejante atrevimiento y calmado tono de voz, francamente, me molestaba. "Estas tan envuelta en lo que los demás quieren que hagas, o en lo que los demás piensen de tus acciones, y eso al final va a terminar por herirte. Quieres cumplir las expectativas de todos? Donde quedan tus propias expectativas? Acaso no prefieres cumplir esas antes que cualquier otra?" tomó otro sorbo de vino, tranquila, como de costumbre. "Se supone que debo quedarme a tu lado y ver que te casas con un hombre que no te hace feliz? Eso es lo que quieres que haga?"

"Sí!" grité. Ella no se inmutó. "Eso es lo que se supone que debes hacer! Y Adam sí me hace feliz."

"Estás segura de eso?"

"Por supuesto que estoy segura. Lo amo!" habiendo escuchado salir esas palabras de mi boca, incluso yo misma tuve que reconocer lo insegura que soné.

Lauren revolvió su vino en círculos sin dejar de observarme. "Bueno, será mejor que te alistes entonces. Adam no demora en llegar."

Entré a mi habitación después de dirigir una mirada asesina a mi mejor amiga y me senté en mi cama. No estaba enojada con ella - nunca podría estar enojada con Lauren - estaba enojada porque las cosas que me dijo no eran del todo erradas. Deseaba que mis dudas se desvanecieran. Deseaba que pudiera simplemente casarme con Adam sin pensarlo dos veces y vivir felices por siempre como en las películas. Quería tener mi cuento de hadas. Me levanté repentinamente cuando una idea cruzó mi cabeza. Iba a hacer que Adam me deseara.

Balanceé las puertas abiertas de mi closet, buscando por el vestido rojo que Lauren me había comprado hace algún tiempo. Me lo compró en caso de que cambiara de parecer sobre ir a discotecas con ella, pero decidí usarlo a mi favor esta noche. Rápidamente me lo puse y me dirigí al baño para terminar de arreglarme, usé los tips que Lauren me había enseñado en la secundaría para arreglarme el cabello y maquillarme. Finalmente salí, chocando los cinco mentalmente. Oh, Lauren se va a sentir orgullosa de mi.

Corrí hacia la sala, una sonrisa apareció en mi rostro cuando Lauren levantó la vista. Su mandíbula cayó y sentí mi confianza ir en aumento con la aprovación de Jauregui - la experta en chicas extraordinarias.

"Vestida para impresionar Cabello?" dijo cuando logró salir del shock inicial.

"Crees que le gustará?" pregunté.

Ella asintió, una expresión triste apareció en su rostro. "Claro que le gustará. A quién no?" sonreí. "Lamento mucho haberte dicho todo eso de tu relación con Adam. Tienes razón- no es de mi incumbencia."

Me senté al frente, descansando mis piernas sobre las suyas. "Está bien, sé que estabas preocupada. Pero no tienes que estarlo. Y de todas formas, eso hizo que se me ocurriera esta brillante idea. Debo decir que debí haber aceptado ir a discotecas contigo."

"Debo decir que, " comenzó. "estoy de acuerdo."

Ambas reímos por un segundo antes de escuchar un golpe en la puerta. Nuestras bocas se cerraron haciendo silencio.

"Yo abro." Lauren aclaró su garganta y se levantó, quitando cuidadosamente mis piernas de su regazo y colocándolas sobre el sofá. Caminó hacia la puerta y yo me puse de pie, arreglando mi vestido y esperando ver su reacción. En el momento en el que Lauren abrió la puerta, el entró mirando su teléfono.

"Vámonos Camila." ordenó, muy ocupado con su Blackberry como para levantar la mirada.

Lauren sintió mi decepción y habló con el único fin de que mi prometido apartara la mirada de su artefacto telefónico. "Es bueno volver a verte Adam."

El asintió cortésmente y luego me miró. "Qué es esto?". Caminó hacía donde yo me encontraba, guardando el teléfono en el bolsillo de su chaqueta. "No vamos para ninguna fiesta electrónica Camila"

Fruncí el ceño mientras trataba de bajar el dobladillo de mi vestido. "Pensé que te gustaría."

El me sonrió. "Claramente no es así. Quítate esas tonterías del rostro y cámbiate el vestido por algo mas femenino y formal." pude observar a Lauren morder el interior de su mejilla, intentando abstenerse de decir algo que fuera a insultarlo. "Qué estás esperando? Sabes que no puedo llevarte conmigo si luces así."

"Okay... es-está bien, te entiendo." di la vuelta para regresar a mi habitación y escuché los pasos de Lauren detrás mio.

"Creo que no necesita ayudarla a cambiarse, o sí Señorita Jauregui?" Adam dijo con desprecio.

"Y yo, creo que eso no le incumbe Señor Russo." la mano de Lauren se posó en mi espalda, empujándome ligeramente para entrar a mi habitación.

Arranqué mi vestido lo más rápido posible, corriendo hacia el baño para quitarme todas esas "tonterías" de mi cara. Por lo que mas quieras, Camila, no vayas a llorar. Ni se te ocurra llorar en este momento. Respiré profundamente, mi rostro estaba limpio y mis ojos secos, así que regresé a mi habitación y encontré un traje "aceptable" para una dama puesto sobre el colchón. Lauren estaba sentada al lado de este, sin decir una palabra. "Gracias." murmuré, colocándome el vestido gris rápidamente. Me recogí el cabello y lo dejé caer sobre mi hombro. Antes de que pudiera pedirle a Lauren que me subiera la cremallera, ella ya lo había hecho. Tenerla era un alivio.

"Pienso que te veías hermosa." susurró cerca a mi cuello y pude sentir mi piel hormiguear con sus palabras. "Y sexy, y atractiva, y preciosa, y todas esas palabras que van de la mano."

Me giré para quedar frente a ella, noté lo cerca que estábamos y por un segundo, quise besar a Lauren Jauregui.

Ella sonrió y tomó mi mano, guiándome hacia la sala nuevamente. Adam notó que nuestras manos estaban entrelazadas y su cara se retorció en un gesto nauseabundo. Lauren me soltó.

"Mejor" él dijo. Desviando su atención nuevamente hacía su teléfono.

Escuchamos otro golpe en la puerta. Lauren prácticamente corrió a abrir, desesperada por romper el silencio que se había apoderado del lugar. "Gabrielle!" sonrió saludando.

Una mujer mayor entró, era casi de la estatura de Lauren. Tenía un cabello negro azabache, piel de porcelana y unos labios rojos. Su pequeño vestido negro abrazaba su figura perfectamente. Podías ver su clase social irradiando al resto del mundo.

"Hola" dijo, e incluso Adam levantó la mirada. Gabrielle era impresionante, incluso al lado de Lauren, que era la persona más impresionante de todas. "Mi nombre es Gabrielle." dijo saludándonos a mi prometido y a mi.

Lauren me miró expectante y salí a su encuentro aún sorprendida por su perfecta cita. Había sentido esta misma sorpresa una sola vez - cuando conocí a Lauren. "Hola, mi nombre es Camila" le dí la mano y me retiré un poco para poder observarlas a las dos. Incluso al lado de Gabrielle, Lauren se veía radiante. A decir verdad, se veían hermosas juntas.

"Camila es mi mejor amiga y ya iba de salida." dijo Lauren sonriendo y miré a Adam esperando una confirmación.

El tomó mi mano y se sintió áspera - no como las suaves manos de Lauren. "Espero que se divierta con sus... aventuras esta noche, Señorita Jauregui." Adam levantó una ceja, empujándome entre las dos chicas para salir del apartamento.

"Oh, no necesito de sus bueno deseos para pasar un buen rato Señor Russo, pero creo que usted sí necesitará de los mios" respondió hostilmente.

El la obsrvó antes de cerrar la puerta. "Que pasó allá adentro? Acaso Lauren te había vestido así?" quise responder pero él me interrumpió. "Sinceramente, Camila, en qué estabas pensando? Iremos a cenar con mi jefe y su esposa, no necesito que te veas ridícula." Adam continuó regañandome en el camino al carro, al restaurante e incluso camino a la mesa donde nos estaban esperando.

Un hombre de aproximadamente unos cincuenta o sesenta años se puso de pie y a su lado, una mujer de unos treinta años siguió sus pasos. El jefe de Adam nos saludó.

"Hola Adam. Ella es tu prometida?" me señaló sin hacer contacto visual.

"Sí, Mr. Jones, ella es Camila."

"Hola." lo saludé y él gruñó en respuesta. Frunciendo el ceño me senté, dirigiendo mi mirada esta vez hacia su esposa.

"Soy Diana" la señora desvió la mirada un momento hacia donde Adam y Mr. Jones estaban hablando y regresó su atención a mi. "Te casarás con Adam?" preguntó y asentí.

"Sí señora." respondí y ella rió.

"Mi nombre es Diana."

"Oh, está bien... Sí, Diana." corregí.

Ella asintió, evaluando la situación. "Por qué te estaba hablando de esa forma antes de que llegaran a la mesa?"

Sentí mi rostro enrojecer.

"Sin mentiras. Dime." parecía entretenida.

"Yo - bueno... El - a él no le gustó como estaba vestida antes de colocarme este vestido." respondí y ella sonrió.

"Tú y yo" dijo inclinándose hacia donde yo me encontraba. "todos piensan que estamos viviendo nuestro cuento de hadas. Que estamos casadas con hombres adinerados y seremos felices para siempre." tragué pesadamente y ella continuó. "pero tú y yo" repitió, "sabemos que esas hipótesis solo son un montón de mentiras."

"Disculpa?" dije, sorprendida de escuchar sus palabras.

Ella se enderezó en su sitio. "Eres muy joven. Que pena." Diana levantó su mano, hizo una seña y un joven mesero apareció de inmediato a su lado. "Necesitamos una botella de algo." la miré temerosa. A Adam no le gustaba que yo bebiera.

"Qué le gustaría señora?" preguntó el mesero.

El joven se agachó y ella se inclinó hacia él. "Lo que tengas que me emborrache lo más rápido posible." Diana habló como si fuera la respuesta más obvia. Él se levantó rápidamente y asintió antes de desaparecer. La esposa de Mr. Jones me miró. "Bienvenida a lo que será tu vida."

Pasé el resto de la noche escuchando las confesiones de la ebria mujer sobre su matrimonio, sobre el hecho de que su esposo la engañaba con otra y ella hacía lo mismo, a decir verdad estaba mortificada con todo esto. Lo que más me sorprendió es que los dos caballeros que se encontraban al lado - mi prometido y su esposos - estaban demasiado absortos en su conversación como para notar lo que ella estaba diciendo. Así iba a ser mi vida una vez me casara? Llenándome de alcohol para poder soportar la noche?

Fuí sacada de mis pensamientos cuando Mr. Jones se levantó de la mesa. Adam le siguió, apretando su mano firmemente. El me miró por primera vez en toda la noche. "Fue un placer conocerla Señora Russo." fruncí mis cejas. Aún no estábamos casados. "Será una excelente esposa, igual que mi Diana."

Diana se puso de pie rodando sus ojos. "Sí Camila. Serás," hizo una pausa, "como," otra pausa, "yo".

La observé cuidadosamente, el olor a alcohol llenó el aire. "Es un honor conocerlos a ambos. Gracias."

Mr. Jones agitó su mano como si me estuviera desestimando y Adam apretó mi hombro, guiándome hacia la salida. "Ella es una vergüenza, no crees?" me miró, refiriéndose a Diana. "Tú nunca me avergonzarías de esa forma."

Caminamos hacia el carro, en el trayecto Adam solo habló de su admiración por Mr. Jones y cuando llegamos hablé. "Iremos a tu casa?"

El sacudió su cabeza. "No Camila, te llevaré a casa. Por más que odie dejarte ahí con Lauren, tengo trabajo que hacer. No tengo tiempo de sobra." miré por la ventana decepcionada. Adam tuvo que haberse dado cuenta pues tomó mi mano en la suya. "En una próxima ocasión, okay? No te enojes."

Giré mi cabeza para mirarlo mientras sus ojos estaban puestos en la carretera. Cada vez que me decía eso, funcionaba, pero por alguna razón esta noche no fue así. No sé si era producto de que él me había ignorado antes de la cena o si quizás era por haber visto a Diana, en todo caso quité mi mano de la suya y la dejé sobre mi regazo. Le envié un mensaje a Lauren recordando lo que ella me había dicho, porque si él llegaba a escucharla con Gabrielle, seguramente terminaría llevándome a casa con él y no quería eso en este momento.

Cuando llegamos al apartamento, Adam insistió en acompañarme hasta adentro. Estaba nerviosa porque Lauren no respondió mi mensaje y supuse que debía estar con Gabrielle. Conociéndo a mi mejor amiga, probablemente ni habían salido de la casa. Abrí la puerta lentamente, para mi sorpresa, pude ver a Lauren sentada en el sofá, sola.

Adam sonrió sarcásticamente. "Una noche solitaria, Lauren?"

Ella le devolvió la sonrisa, Gabrielle salió de la habitación de Lauren vistiendo una de sus camisetas y sus panties. El rostro de Adam enrojeció y tuve que reprimir una carcajada. "Una noche solitaria? Para nada Adam. De hecho, tuve una gran noche, supongo que ya debiste suponerlo. Y tú, puedes decir lo mismo?"

El sonrió falsamente, acercándome a su cuerpo. "Camila y yo tuvimos una noche encantadora con el señor y la señora Jones, no es así?" me miró y yo asentí. "De cualquier forma, tengo trabajo que hacer, así que debería irme."

"Aw, es una lástima." Lauren dejó caer su cabeza, fingiendo un puchero.

Adam la ignoró y se giró hacia mi. "Buenas noches Camila. Ve a dormir lo más pronto posible. No querrás desvelarte. Tienes que trabajar mañana."

"Buenas noches." dije y él se fue sin decir más. La nueva novia de Lauren aún estaba de pie en la habitación y Lauren me miraba divertida.

Gabrielle lucía mucho más accesible ahora, vistiendo la camiseta de Lauren, sin maquillaje y con su cabello recogido. "Lo siento, las dejaré solas." dijo y comenzó a caminar de nuevo hacia la habitación de Lauren.

"No, Gabrielle, espera" dijo Lauren. "Quiero que conozcas adecuadamente a alguien." la miré en shock. Ella se levantó del sofá y puso su brazo alrededor de la cintura de la chica de cabello negro, aproximándose hacia mi. "Sé que ya se presentaron pero... Gabrielle, ella es Camila. Camz, ella es Gabrielle."

Sacudí su mano nuevamente. "Debes gustarle mucho a Lauren. Ella nunca me presenta sus novias."

Gabrielle rió, un sonido agradable llenó el aire. Ella era casi tan perfecta como Lauren. "Creo que ellas no necesitan conocerte cuando Lauren se la pasa hablando de ti. Siento como si tu y yo fuéramos mejores amigas con todo lo que he escuchado de ti."

Elevé mis cejas mirando a Lauren. Ella se veía tan perfecta como cuando me fuí con Adam. Su cabello estaba recogido y su sonrisa iluminaba la habitación. "Tú hablas de mi?" sonreí.

"Es como si tuviera que hacerlo... siempre les advierto," sonrió, "que tengo una loca roomate."

Gabrielle rió de nuevo, "Oh, eso es mentira. Créeme, sólo dice cosas buenas."

Asentí sintiendo mariposas en mi estómago. Lauren le hablaba a sus novias de mi. Cosas buenas. "Probablemente eres la única novia cuerda que ha tenido." dije sin tener mucho con qué compararla. Nunca había conocido como tal una novia de Lauren. Pero estaba contenta de conocer a esta. Parecía una buena persona - bonita, y por ahí continuaba la lista.

"Oh, en serio?" preguntó Gabrielle observando a Lauren y estuve a punto de ahondar en las historias, pero mi mejor amiga me detuvo.

"No hablemos de mis relaciones pasadas con mi novia actual, si Camila?" me miró como pidiendo que me callara.

Asentí y Gabrielle tomó la palabra de nuevo. "Ese era Adam, verdad? Tu prometido. Ustedes dos han estado juntos por mucho tiempo, no es así? Cuantos años llevan?"

"Wow, Laur, tú realmente les hablas de mi." reí, contenta de responder las preguntas de la chica. "Hemos estado juntos por cuatro años." la novia de Lauren me miraba con atención mientras mi mejor amiga desvió la mirada, algo de lo que dije, claramente le molestaba.

"Desde que tenias 18?" dijo con sorpresa. "Estoy impresionada Camila. El es el indicado, huh?"

Lauren dibujó una sonrisa falsa en su rostro. "Sí! El es el indicado."

El es el indicado, no es así? Solía estar segura.

Continue Reading

You'll Also Like

173K 8.1K 41
Un día, dos chicas se encuentran en el metro. Violeta, que acaba de ser abandonada, se está recuperando de un corazón roto, y Chiara está lidiando co...
33.8K 2.6K 20
Una relación ya afianzada, planes de boda y un accidente que cambiarán sus vidas totalmente. ¿Podrá su amor con todo?
72.6K 3.7K 46
Dicen que cuando nos enamoramos de una persona a primera vista es porque esa persona fue nuestro amor en otra vida. Al encontrarte no hay duda de que...
8.5K 821 38
Dakota era una mujer diferente al resto, al menos para su época, dispuesta a ir en contra de las reglas con tal de ser feliz. Abbie en cambio era una...