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-¿y cómo esta Lauren?- pregunto Dinah mientras mordía su sándwich.

-ella esta...- suspiro y sonrió inmediatamente -mejor-

Dinah asintió levemente.

-fui a verla ayer y me dijo que volvería la semana que viene- comento Marissa -tiene la casa para ella sola y supongo que quiere aprovecharlo-

-¿lo ha aprovechado contigo, Camila?- preguntó Dinah arqueando las cejas acusadoramente.

-yo y Lauren no hacemos eso- dijo seria.

-¡bah!- exclamo -vas cada tarde a su casa y duras horas ahí, ¿y quieres que crea que no hacen nada?- se burló Dinah.

-Dinah, es obvio que no lo han hecho- comento Brad riendo - Camila es muy inocente y Lauren es muy cursi como para tener sexo todos los días- tomo un trago de soda -además, Camila no dejaría de hablar de ello-

-Brad tiene un punto- dijo Marissa mientras asentía con la cabeza.

-supongo que si- dijo Dinah dándose por vencida.

-además alguien debe llevarle los apuntes y la tarea. Y si mal no recuerdo, la última vez que te lo pedí dijiste que no y saliste corriendo- se burló Camila.

Dinah simplemente la ignoro y continuo comiendo; Camila riendo aún más.

-y Camila... ¿has arreglado tu situación?- pregunto Brad sonriendo -me refiero, ¿volverás a audicionar?-

-lo haría si hubiera conseguido que me escucharan en las primeras 29 llamadas- dijo con tristeza -supongo que tendré que buscar otro sueño-

-¡tonterías!- dijo Marissa -eres Camila Cabello, la chica que nunca se rinde-

-bueno, me he rendido- suspiro -ahora solo soy Camila Cabello-

Todos se quedaron en silencio y asintieron, porque a pesar de que odiaran verla así, sabían que no podrían hacer nada.

Los minutos pasaron en silencio hasta que la ronca voz de Hunter, los distrajo de sus pensamientos.

-¿qué está haciendo, Jauregui, aquí?- pregunto mientras observaba fijamente a la puerta; todos volteándose rápidamente.

-tu caballero en armadura ha llegado- susurro Dinah dirigiéndose a Camila, quien rápidamente se paró de su lugar y camino lentamente hacia la mayor.

Al notarla aproximarse, sonrió.

-hola, Camz- dijo alegremente.

-¿qué estás haciendo aquí?- pregunto ignorando completamente las palabras de la mayor.

-¿no te alegra verme?- dijo desanimada.

-siempre- ambas sonrieron –pero creí que debías estar en reposo- tomo su mano y las unió lentamente.

-supongo- se detuvo y sonrió ampliamente –pero debía verte- el corazón de Camila apresuro sus latidos –además, de las dos; tu eres la que ama dormir todo el día- se burló mientras Camila negaba con la cabeza juguetonamente.

-touché- trato de sonar seria pero la risa le había ganado.

Lauren solo rió y continúo observándola en silencio.

-¿por qué querías verme?- pregunto Camila curiosa -¿es por qué no puedes vivir sin mí?- golpeo suavemente la nariz de Lauren con su pulgar, juguetonamente.

-oh, no- se burló –yo solo quería ver tu trasero por la mañana- dijo mientras lo veía atrevidamente y mordía su labio inferior; Camila abriendo la boca sorprendida y golpeando su hombro suavemente.

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