18

12.9K 647 21
                                    

Camila

Me despertó el sonido de las olas y el peso del cuerpo a mi lado abrazándome. Quite su brazo con delicadeza tratando de no despertarla; fallé.

Se froto los ojos y con una suave voz dijo: “hola, ángel”.

Suspire. Ella me volvía loca.

-hola…- mordí mi labio inferior mientras pensaba en un apodo, ella lo noto y rió.

-Camz, no necesito un apodo- quito un mecho que cubría mi rostro –amo cuando dices mi nombre- sonrió y acaricio mi mejilla.

-creo que deberíamos irnos- dije parándome y sacando mi celular: 1 am.
-es muy tarde y mis padres van a matarme- extendí mi mano para ayudarla.

-quiero quedarme aquí para siempre- jalo mi mano, haciéndome caer encima de ella –contigo- susurro a mi oído y sentí mi piel erizarse.

-Lauren…- me pare rápidamente –llévame a casa, por favor- agache la cabeza y ella se paró.

-¿Qué sucede?- tomo mi barbilla haciendo que la mirara.

-esto no está bien. Tú y Luis…- me interrumpió –él no me importa, tu sí. Estoy aquí contigo y soy feliz –suspiro -¿tú no lo eres?-

Sonreí –más que nunca-

-entonces ¿Por qué volver? Podríamos quedarnos aquí o…- su sonrisa incremento –podríamos irnos a un lugar donde nadie pueda encontrarnos; solo tú y yo. –Entrelazo nuestras manos –juntas-

Amaba esa idea pero no podía ser, al menos no ahora.

-lo siento, yo no puedo- su sonrisa se desvaneció –Lauren, es difícil…- me interrumpió.

- te llevare a casa- camino al auto, alejándose de mí.

En el trayecto no hablamos; Lauren mantuvo su vista fija en el camino y yo trate de no dormirme. Después de un rato, el auto se detuvo.

Suspire –buenas noches, Lauren- sin esperar respuesta, abrí la puerta pero antes de que pudiera salir, ella agarro mi mano.

-¿Qué somos?-

-¿a qué te refieres?-

-¿Qué soy para ti?- pregunto y sus ojos se cristalizaron.

-no lo sé- me soltó y desvió la mirada –pero me haces feliz- una débil sonrisa se formó en su rostro.

-buenas noches, ángel- beso mi mano y yo sonreí, me voltee y camine unos centímetros para después volver.

-¿Qué soy yo para ti?- me miró fijamente a los ojos y me mostro una media sonrisa.

-eres la chica que me gusta- fue inevitable no sonreír.

 Y al final sin decir nada, nos despedimos con la mirada.

You found me.Where stories live. Discover now