06. Más solos que la 1

287 63 20
                                    

Así que jóvenes, a partir del lunes quiero a todo el mundo con el carnet en un lugar visible. La persona que no porte el carnet, no podrá entrar a la institución, así que por favor...

Jungkook torció los ojos, harto del cuentico. Tenía cuatro años en ese malparido liceo y todos los años era el mismo peo del carnet que duraban una semana con la ladilla y luego se les pasaba, y quedaban los sopotocientos carnets en su casa engabeta'os todos porque esa vaina para lo único que servía era para sacar libros en la biblioteca.

Todas los días escuchando la misma bendita cantaleta interminable de siempre, que si el carnet, que si la fiesta patria, que si el cumpleaños del perro de Diosdado, todos los días sin falta encontraban una vaina de la que hablar paja. ¿Qué acaso Sunhee no se hartaba de atormentar a la gente?

Jungkook casi siempre pasaba la ladilla escuchando música o viendo memes, pero la carae' guayaba de Adora iba a hablar con Seokjin a las 9, así que tenía que calársela.

El general Ezequiel Zamora fue un político militar venezolano protagonista de la guerra federal, que venció al ejecito conservador en la guerra de Santa Inés, en el año...

—Coñisimo de su madre, hasta cuandoooo cállate la jeta nojodaaaa —dijo Jungkook en voz baja, haciendo reír a Hoseok que estaba sentado delante de él. No eran del mismo año, pero Jungkook se había sentado con los de 5to porque él era sendo malandro y estaba ladilladisimo.

Actualmente, nuestro general Zamora es símbolo de patriotismo y socialismo, y lleva su nombre la Gran Misión Zamora, del comandante Hugo Chávez, que beneficia a familias campesinas persiguiendo la trasformación de tierras en unidades...

La caraja que estaba leyendo leía con una caliweba que nawebonada, Dios se la bendiga. La menorcita seguro le estaba mentando la madre internamente a la chavista de Sunhee por hacerla leer webonadas.

—Verga Hoseok, pero tú puedes aplicar a esa, tú eres el propio campesino.

—Nada más porque cuido las maticas de tomate que dejo mi abuela.

—¡La de tomate, dice! —exclamó Nayeon, metiéndose en la conversación—. Tomate, pimentón, albahaca, aguacate, acetaminofén, caña de azúcar, un árbol de mango, la de habichuelas mágicas...

—Coño amor, si eres dramática —dijo Hoseok.

—Hasta yo sería dramática, si a esa mata de albaca le hablas más bonito que a ella.

—Anda a mamarte un culo, Jungkook.

Ahora jóvenes hagan el favor de ponerse de pie para entonar las notas de nuestro glorioso himno nacional.

Jungkook rodó los ojos por millonésima vez en el día. ¿Pa' que tanto himno, tanta paja? ¿Por qué señor, por qué?

Si el señor Jeon, escuchará los pensamientos de su hijo, le habría dado un sermón kilométrico de porque fomentar la cultura eran importante para que los jóvenes blah blah blah... A partir de esa parte del discurso empezaba a sonar mamare en los pensamientos de Jungkook y no paraba más bola.

El punto era que para Jungkook, el himno era un beta para celebrar, para ser cantando en situaciones que lo valgan. Si matan a Maduro, si la vinotinto llega al mundial, si AuronPlay sale diciendo callase mamawebo... Una vaina mística y casi milagrosa que te haga sentir dueño de tu patria, hijo de Bolívar, con el cuatro en el corazón.

—Una vez dejo seis gallinas ponedoras en mi casa —retomó la conversación Nayeon, cuando la chillación, digo la entonación del himno acabó—. Mi mamá estaba que me corría con todo y animales.

Mala Junta || BTSWhere stories live. Discover now