Mala Junta || BTS

24. Por inventador

El martes en el recreo, Jimin fue a reclamar su pago.

—Mira, concejal —llamó a Jungkook, agarrándolo por el bolso, antes de que saliera corriendo a jugar en la cancha—. Dame mis fotos.

Jungkook se soltó del agarre y se dio la vuelta para verlo. Por supuesto que había traído las fotos, él era un hombre de palabra, pero no había chiste si se las daba ahora.

Tal vez era tonto de su parte, pero Jungkook tenía curiosidad de ver la reacción de Jimin a las fotos. Hasta el momento, solo había visto a Jimin reaccionar a las cosas con arrechera o indiferencia. Quería ver un atisbo de sentimientos cálidos que tenían que haber debajo de todo ese odio por el mundo.

—No, pero —dijo, sin saber qué más inventar—, espérate y las vemos en clase.

—¿Qué? —exclamó Jimin—. Yo sé que tú no paras bolas en clase, pero yo sí. Y de paso la próxima clase que tenemos es inglés, tú definitivamente tienes que estar loco.

—Coño, pana, es que Jaehyung trajo el bate y vamos a jugar béisbol.

—Bueno, vete a jugar, a mí que me importa.

Jungkook saltó en su puesto unos segundos, y se debatió rápidamente que era más importante. Satisfacer un deseo irracional o irse a jugar. No tardó mucho en recordar que el béisbol siempre era su prioridad.

—Bueno agarralas —dijo, dándose la vuelta para que Jimin revisará su bolso—, están dentro del cuaderno.

—¿Cuál cuaderno?

—¿Tengo cara de que uso más de un cuaderno?

Jimin no dijo más nada, y abrió el bolso para buscar. Sacó el cuaderno, y sin querer, las fotos quedaron esparcidas por todo el piso.

Y cómo las cosas siempre van a salir de la peor manera, justo en ese momento, Namjoon llegó al salón.

***

—Otra vez tú abusando de nuestra confianza —dijo Namjoon, mirando las fotos en el piso—. Nada nuevo. Buenos días a los dos.

—¿Quéeeeee? —exclamó Jungkook, fingiendo indignación, mientras recogía las fotos—. Ah vaina, que estoy haciendo yo.

—Si bueno- ¿y qué es eso que tienes ahí? —cuestionó Namjoon.

—A ver, Nam. Tú estás pasado. Yo soy abusador pero tampoco para que seas así. Eso que está ahí son unas fotos tuyas pues, que se me cayeron.

—Fotos que aparentemente le estabas mostrando a tu compañero... Jungkook hasta cierto punto dejo que te rías de mí porque tampoco puedo hacer mucho al respecto, pero no voy a dejar que te rías de mí con tus compañeros. Nada personal, Jimin.

—¿Y por qué me voy a reír de tus fotos? —preguntó Jungkook—. Es más, ¿quién te dijo que yo le iba a mostrar eso a Jimin? ¿Ves cómo eres? Todo esto era un lindo detalle, para recordar lindas épocas, y tú ya lo viste como algo feo de mi parte. De pana que por eso eres amigo de Seokjin, los dos puro piensan lo malo de mí. Mi mamá ayer estaba limpiando y sacó unas fotos y yo dije "ay prestamelas para mostrárselas a Nam" y te las iba a mostrar en clase, nada más.

—¿Y por qué Jimin tiene cara de que lo encontré robando un banco?

Jungkook, mentiroso por excelencia, se giró a ver a Jimin por un momento, para encontrarlo semi petrificado y con cara de pendejo.

Jungkook no esperaba que Jimin fuera a solucionar la situación, pero sus habilidades de disimular eran menores de las de cualquier ser humano. Que mongólico.