SUICIDE NOTE -∆-

CAPÍTULO XIII

📒Notas📒

“Siempre pensaste que era el mejor, pero nunca notaste que yo siempre traté de ser como tú”

Abrí la caja.

Y mi corazón palpitaba con una velocidad inquietante, tanto que me faltaba la respiración. Y todo por presenciar el montón de cosas que habían dentro; cartas, libros, papeles y todo tipo de documentos...

Traté de imaginar qué podría ser todo esto, o tener alguna pista de lo que me esperaba.

Mi respiración se vuelve ansiosa y por un momento siento que se olvida respirar...

—Tranquilo.

Solo eso eran, simples y pálidos papeles, no era tan malo después de todo.

Tomo lo primero que veo y era hoja de cuaderno con un pequeño escrito.

«Solo es una nota nada mas» pienso al sonreír por mis desesperados pensamientos irregulares. Así que me armo de valor y suspiro e inicio mi lectura:

“¿Cómo pueden pueden existir personas que disfrutan hacer sufrir a los demás? Hacer que toquen fondo, que lleguen a sus límites mentales, que queden rotos, destrozados... Sin esperanzas de volver a subir otra vez ¿Esas personas sentirán placer?”

Solo escucho mi respiración que vuelve a trabajar normalmente con la culminación de la nota. Solo terminaba allí, un borrón con lápiz y mas abajo un dibujo de un niño que se abrazaba las piernas y tenía la frente entre sus rodillas, estaba escondido, solo, roto, como... pidiendo ayuda.

¿Dániel se sintió así en algún momento? De ser así siento que nunca conocimos a Dániel completamente, me sentí extraño por él.

«Estaba enfermo» pienso y niego porque me costaba admitirlo.

Volteé la hoja y tenía algo más escrito:

“Hoy conocí a un chico pelirrojo, los chicos del equipo de fútbol lo encerraron dentro de un casillero. Siempre suelo salir de ultimo de las prácticas, y cuando entré a los vestidores él estaba dentro de uno...

Dejo de leer porque yo recordaba ese día, tampoco puede evitar acordarme del chico que había visto en la fiesta de ayer, el amigo de Valery, creo que se llamaba... Lan o algo así. Sí, me acordaba de él, era el mismo que Dániel había escrito aquí, aún lo recuerdo.

Continué leyendo:

“... Lo saqué del casillero, después fui hacia donde estaba Chuck y le pregunté por qué lo había hecho, sabía que había sido él, ¿quién mas podía ser tan inmaduro?
Solo es un nerd y un flacucho, ¿por qué no hacerlo? Eso dijo él, y empezó a reír como un idiota.
Aquel mismo día llevé al chico por su venganza, fuimos al casillero de Chuck y le pusimos un montón de ratas en su ropa. A la siguiente práctica llegué temprano con el chico, saqué mi teléfono y empecé a grabar disimuladamente, Chuck apenas abrió su casillero, saltó y soltó el grito más agudo que pudo existir, se escuchó en todas las esquinas del instituto”.