Capítulo 17

4.9K 563 9
                                    


Cuando nos dirigimos a clases, me encontré con Nich y Charl. 

"Luana, Sarah, Rachel!!" en cuanto nos vieron, corrieron hacia nosotras. Esos dos, parece que se han hecho muy amigos entre ellos. Supongo que pasar por una experiencia tan traumática les ha unido de verdad. La realidad es que entre nosotros hay una buena relación. 

Al principio, cuando descubrieron que soy una duquesa, les costaba hablar conmigo y siempre intentaban ser muy formales. No importaba las veces que les dije que en esta escuela no existen clases sociales, ellos seguían su rutina de hablar formalmente y con la cabeza agachada. Al final les tuve que amenazar. Es irónico que tengas que amenazar a alguien para que te hable menos formalmente, pero les dije o empezaban a verme como una más dentro de la escuela o se buscarán problemas. Si no estaban dispuestos a acatar esa norma con los demás nobles, me daba igual; pero conmigo ivan a tener que hacerlo. No quisieron saber a que me refería y empezaron a estar más relajados a mi alrededor. 

Aunque la escuela es un lugar para hacer conexiones, yo no voy a infravalorar a nadie. Si algo he aprendido en mi vida es que nada es eterno, ni estable. Hoy puedes tener la familia más poderosa del mundo y mañana perderlo todo. Los niños ricos que han nacido en familias influyentes, saben lo que es el poder; pero al tenerlo todo a mano, desconocen cómo ganarlo o incluso mantenerlo. Yo en cambio lo que más valoro es la actitud de las personas. Con dedicación y esfuerzo se puede lograr lo que queramos. 

"Como os ha ido estos días?" Se les veía bastante alegres.

"Muy bien! Charl y yo hemos aprendido a combinar nuestros poderes luz y sombra. Él es capaz de sanar heridas profundas, mientras que yo soy capaz de oscurecer y quitar los sentidos temporalmente. Cuando los combinamos, yo puedo quitar el dolor mientras é sana."

"Genial. Me alegro por vosotros. Se nota que haceis un gran equipo"

Nosotros seguimos hablando entre nosotros, cuando aparecieron de nuevo.

"Vaya, vaya. Quien tenemos aquí? Desde cuando han dejado entrar a chuchos y zorros callejeros?" Era una chica que iva en el grupo la que hablo. Antes no me había fijado porque no me importaba, pero esta vez si lo hice. Había cuatro chicos, además del príncipe y dos chicas, incluyendo a Anastasia. 

Charl y Nich agacharon la cabeza. Puede que hayan adquirido más confianza, pero después de la experiencia que pasaron era normal que aun sintieran temor por aquellas personas que ostentaban poder. Eso me enfadó de verdad. 

Podía tolerar sus tonterias contra mi, pero que se metieran con dos pobres chicos que habían pasado un infierno? Eso si que no. La mentalidad de las mellizas no estaba muy separada de la mía, porque se levantaron de repente y se pusieron delante de ellos. Las tres habíamos visto el horror que habían tenido que soportar esos pobres cachorros, y no íbamos a tolerar que las tonterías de esos niñatos arruinaran todo lo que habían conseguido. 

Sin nisiquiera pensarlo, agarré por el cuello a la chica, con una mano, y la levanté. Con la otra les hice una señal a las mellizas, que ya se estaban poniendo en posición de combate, para que no intervinieran. Como nunca había respondido, se quedaron sorprendidos.

"Tu..tu.. Como te atreves!" Esta vez fue el príncipe el que hablo.

"Hermana sueltala! Estas loca!"

"Porque debo soltarla? Quiero averiguar cuánto tiempo puede aguantar sin respirar" mi respuesta fue fría y sin emociones. 

El príncipe me lanzó una bola de hielo, pero la derretí sin nisiquiera mirar. Mi vista seguía puesta en mi presa. Automáticamente un cúmulo de ataques vinieron en mi dirección, pero simplemente cree una barrera y las desvié. Cuando noté que estaba por perder el conocimiento, me giré hacia ellos. 

"Queréis que esta escoria que os ha insultado viva o muera? La elección es vuestra"

La chica pareció darse cuenta que iba en serio, porque empezó a gimotear.

"Dejala." Charl fue el primero en hablar.

"Si, no queremos problemas"

Entonces la solté y cayó al suelo.  "Les debes la vida. Recuerdalo" Inmediatamente empezó a llorar.

"Hermana, que es lo que te pasa? Estas loca?"

Con toda mi frialdad me giré y la miré de frente.

"No soy tu hermana. Si vuelves a insultarme de esa manera, haré que entiendas a la fuerza"

"Se que estas celosa, pero..."

"Celosa de que?" Las tonterías de esa chiquilla estaban a la par que su imaginación.

"Se que tienes envidia porque soy muy cercana al príncipe heredero, pero no debes desahogar tu rabia con mis amigos!"

No pude contenerme. Empecé a reír sin poder parar. Tuve que sujetarme el estómago de risa. Entonces la miré y reí más fuerte. 

"Yo- enamorada- de-" Y reí con todas mis fuerzas. 

Mi reacción no solo sorprendió a todo el grupo, sino que por la mirada oscura que lanzaba el príncipe parece que herí su orgullo de gravedad.

"Hay, no puedo... parar..." Cuando por fin pude detenerme, me giré hacia ellos. "Está bien. Ha sido un buen chiste, pero ridículo. Si quisiera un idiota, egocéntrico, presumido y cretino lo buscaría más guapo. Mirad no se que es lo que queréis, pero la próxima vez que queráis acusarme de algo... intentad que sea creíble"

"No te hagas la tonta! Sabemos que has estado molestando a Anastasia! Por tu culpa se ha creado mala reputación y además, has estado acosandola!"

"Vaya... en primer lugar, la que se metió en la cama equivocada era ella no yo. Si no quiere que la enmarquen, que duerma sola en su habitación. Y en cuanto acosarla..." Miré a Anastasia "no te ofendas pequeña, pero no eres mi tipo. Además, si yo quisiera hacerle algo, como habéis podido comprobar, no lo haría contra bienes materiales. Si yo quisiera dañarla me acercaria, y la golpearía hasta quedarme satisfecha. Los trucos sucios no son mi estilo y conlleva demasiado tiempo."

"Mientes! Ana jamás mentiría, ella tiene el poder luz. No hay nadie mas bueno que ella!" La chica parece que al estar detrás de sus amigos le salieron agallas. Debí apretar más fuerte.

"Por casualidad. Que sabéis de mi?" 

"Sabemos que eres una mentirosa que odia a su hermana, porque ellas es más hermosa, especial y buena que tú! No soportas que tu padre se haya separado de tu madre y por eso la atacas!"

"No importa lo que hagas. Ana es la única para mi. Espero que te quede claro" Parece que seguía pensando que estaba interesada en él. 

"Por supuestisimo princeso! Mira me has hecho tanto daño que creo que voy a llorar..." Hice ver que buscaba un pañuelo en mis bolsillos. "Vaya me he dejado el pañuelo y no puedo llorar. Bueno que se le va hacer. Otra vez será." Me giré y empecé a reír. 

Las mellizas me miraron con una sonrisa, mientras que Charl y Nich parecían confusos. Les cogí de la mano y nos dirigimos a clases.

Ni siquiera me molesté en darles otra mirada, pero la energía que sentía a mi alrededor estaba bastante cargada.

Reescribiendo mi propia historiaWhere stories live. Discover now