Capítulo 16

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Pasaron tres meses desde que nació Chisp. Ya le habían salido las plumas de las alas y había crecido bastante. Los tres estaban adquiriendo un tamaño bastante considerable, de modo que fui a una tienda para comprar tres camas de alto confort  grandes para el piso de arriba, y tres camas de mascota para el piso de abajo. 

Íbamos a comenzar con las clases de vuelo para Liger y Chisp. Esperé asta después de clase y me los llevé al descampado lejos de la academia, justo en medio del bosque. Aterrizamos y les mostré como debían mover las alas. 

Volar es un poco difícil al principio. Cuesta encontrar un punto de equilibrio para mantener la estabilidad en el aire. Yo tardé un mes en dominar completamente mis alas. Cada especie tiene su propio punto, de modo que la única forma de poder aprender es con ensayo y error. Sobre todo es importante no forzar las alas, especialmente si no se ha volado. Es similar a una persona que nunca ha hecho deporte y por primera vez sin calentar ni practicar, corre un maratón.  

Ya en casa les había hecho practicar algunos ejercicios de postura, para saber como moverse en el aire; pero jamás habían volado por su propia cuenta. 

Cuando llegamos, les hice hacer ejercicios de calentamiento. Entonces, cuando ya estaban listos, los monté en mi lomo y alzamos el vuelo. 

"Bien. ¿Quien va a ser el primero en intentarlo?"

"Yo, yo, yo" Desde su nacimiento, Chisp ha mostrado tener mucha energía.

 A demás aprende muy rápido y es muy cariñoso, aunque solamente con nosotros tres. Cuando se lo presenté a Rachel y Sarah, no quiso separarse de mí. Ellas pensaron que podíamos hacer un día de familiares, de modo que trajeron a Chip y Liron para que aprendieran a relacionarse. Para Liger y Kitsu fue bastante fácil, de hecho Liger se llevó muy bien con Liron, pero Chisp no permitió que se acercaran. Se subió a mis piernas y no quiso separarse de mí. Cada vez que alguno de ellos, a parte de Liger y Kitsu, se acercaban a mí; les intentaba arañar o picar. 

Según la investigación que hice, los grifos son seres con muchísimo poder y magia. También poseen un gran orgullo y son muy posesivos y protectores con su territorio. Pueden ser desconfiados y solitarios. No suelen relacionarse demasiado fuera de su nido.

Finalmente, comenzó a sentirse más relajado en presencia de extraños, pero nunca baja la guardia. 

Liger, en cambio, es bastante más tranquilo. Tiene el carácter de un felino, pero es capaz de relacionarse un poco mejor. Suele estar bastante tiempo en la cama, especialmente desde que les conseguí las suyas propias. A demás, en un rincón de la terraza, les cree un pequeño espacio para que puedan salir y también compré un tronco mágico para que puedan afilarse las uñas con libertad. 

Kitsu es el más sociable de todos. Es inteligente y bastante pícaro. Ha estado aprendiendo a utilizar magia de zorro, lo que incluye: magia psíquica, fuego fatuo, sanación y conexión con el submundo. Tiene la capacidad de ver a través del velo (Velo: lugar donde van los seres cuando mueren).

"Bien. Chisp, acércate al borde de mis alas y extiende las tuyas. Respira hondo y empieza a mover-las con fuerza. No te preocupes, voy a estar debajo de ti para recogerte."

"Vamos, tú puedes" Kitsu decidió animarlo.

"Vas a ser un gran volador" Liger se le unió. 

Al ver a sus compañeros apoyándolo, le dio un gran empuje moral e intentó saltar de repente.

"Chicos silencio. Chisp, escucha solamente mis consejos" Mientras lo recogía en el aire. Los otros dos guardaron silencio de golpe. "Bien cierra los ojos y concéntrate. Mueve las alas como te enseñé y toma impulso" Entonces comenzó a hacer lo que le dije y salto a volar. Al principio, aunque se mantuvo en el aire, le costaba bastante mantener el equilibrio y se le cansaban las alas, así que me coloqué debajo de él para poder recogerlo.

"¿Necesitas ayuda, princesa?" 'El que faltaba' Hacia meses que no sabía nada de él y ahora se presentaba. Estaba en su forma de dragón y casi me hizo perder mi equilibrio. 

"Que... ¡Que haces aquí!" Di la vuelta y aterricé de nuevo. Reinald aterrizó justo a mi lado. Los tres se bajaron de mi lomo y se escondieron detrás de mi pata. La esencia del príncipe era muy poderosa y abrumadora, y eso los asustaba. 

"Estaba volando por los alrededores y sentí tu presencia. Sabes, en tu forma humana eres hermosa, pero cuando estas en forma de dragón eres magnífica"

"¡¿Quieres dejar de adularme?! Eso es todo lo que haces cada vez que nos vemos y no me gusta. No sé cuales son tus intenciones, pero no te servirá el mismo truco que usas con las demás."

Se quedó mirándome un momento. Como estábamos en forma de dragón era difícil saber que es lo que pensábamos. 

"Está bien, tienes razón. Desde que te conocí siento algo especial en ti. He conocido infinidad de mujeres, pero ninguna ha llamado mi atención jamás. Asta que te conocí. No sé que es, pero siento que no debo dejarte escapar. ¿No puedes intentar conocerme antes de rechazarme? ¿Qué es exactamente lo que he hecho para que estés con la guardia alta en frente de mí?"

"Soy desconfiada por naturaleza. La confianza se gana, especialmente si la persona no deja de adular y mentir en frente de mí. Si realmente quieres conocerme, te aconsejo que te dejes de teatros y te muestres como realmente eres. La perfección no existe, y si hay personas que quieren aparentarla es porque guardan secretos muy oscuros. Todos los tenemos y yo no soy menos, pero igual que no intento abrir la caja de los secretos que guardan los demás; espero que no intenten abrir la mía"

"Los dragones somos depredadores por naturaleza. Protegemos nuestros tesoros y derribamos a nuestros enemigos con fiereza. También somos leales. Te prometo que jamás haré nada que te cause dolor. Tienes razón en que he usado trucos para intentar cazarte. Por un momento, olvidé que eres más dragón que humano. Solo... déjame conocerte y cortejarte. Eso es lo único que quiero."

Yo no sabía que decir. Esta era la primera vez y para ser sincera me gustaba. Desde que le conocí, sentí algo por él. Pero mi desconfianza me había mantenido con vida, de modo que decidí que lo mejor era intentar pasar tiempo con él y conocerlo. Al final no perdía nada. 

"Está bien." Decidí ser amistosa con él. "¿Por qué no te presento primero a mis pequeños familiares?. Chicos os presento al tercer príncipe Reinald Delgon Vallest. Es un amigo, salid a saludar". Los tres dudaron. Kitsu fue el primero en salir, pero no se alejó de mí. Solamente se puso delante de mi pata. Liger le siguió de cerca, pero Chisp se negó a salir. Se puso en posición de ataque y tenía el pelo erizado. 

"Estos son mis familiares. Te presento a Kitsu, Liger y este pequeñin de aquí es Chisp" Levanté un poco la pata y le empujé con el morro. Mantuvo la cabeza agachada y la mirada desconfiada.

"Parece que no eres la única que desconfía de mí. Supe desde el momento en que te conocí que era especial, pero tres familiares divinos es algo fuera de norma. Encantado de conocerles. Pueden llamarme Rei." Entonces levantó el morro y se dirigió a mí. "Tú también deberías llamarme Rei si queremos empezar una relación amistosa." Así comenzó una relación entre nosotros. 

Cuando le conté el motivo por el que estábamos allí, decidió unirse. A Chisp no le hizo demasiada gracia y no quería que Rei se acercara, pero su miedo era mayor que su desconfianza. Pensé que pasar tiempo con otros seres le ayudaría a relacionarse. Fue más divertido de lo esperado. Rei era un volador excepcional, y un gran maestro. Excepto por Chisp, los otros dos llegaron a cogerle algo de confianza. Cuando fue hora de regresar, nos despedimos y regresamos a la habitación. Preparé un baño para los tres. Increíblemente les encantaba el agua, especialmente Liger, y siempre llenaba una bañera para los tres. Cuando terminamos de bañarnos, cenamos y fuimos a la cama. Al día siguiente era nuestro día libre y había pesado pasar el día en el campo para seguir practicando el vuelo y disfrutar.

Reescribiendo mi propia historiaWhere stories live. Discover now