One shots ⇝ Harry Potter ✔

Cedric Diggory

Sung Dae. Hermosa, inteligente, seria, amable. Slytherin.

Ella era descrita, por lo general, como la chica perfecta. Y solían emparejarla con Draco Malfoy siendo llamada la princesa de las serpientes.

A ella no le importaba, no tenía nada que ver con Malfoy ya que eran simplemente mejores amigos de la infancia.

De hecho, a Sung le gustaba Cedric Diggory. Pero ella no se animaba a declarar su amor por miedo al rechazo, algo bastante gracioso ya que hay muchos chicos que buscan su atención.

Sung había comenzado a hacerse amiga de Cedric gracias al quidditch, ya que ambos estaban en el equipo de sus respectivas casas y en ocasiones entablaban una conversación.

—Hola, Sung— dijo Draco a su amiga.

—Malfoy— dijo en forma de saludo.

El platinado tomó asiento junto a la chica.

—¿Ya tienes con quien ir al baile?

Sung dejó de escribir y miró al frente. Algunos chicos la habían invitado, pero ella realmente deseaba ir con Cedric.

—No, aún no.

—¿Estás demente?, falta sólo una semana.

—Lo sé...— suspiró— es sólo que el chico con el que quiero ir aún no me invita y lo haría yo, pero me da algo de vergüenza.

Draco soltó una carcajada y Sung le proporcionó un golpe en el brazo.

—Lo siento, es sólo que no me imagino a ningún chico rechazandote.

—Realmente no me importa ser rechazada, pero tengo miedo de perder su amistad y que todo cambie entre nosotros. Creo que así es mejor.

Malfoy resopló.

—Es algo absurdo, deberías ir con Diggory y decirle lo que sientes.

Sung miró a Draco con sorpresa.

—¿Cómo...?

—Es obvio que te gusta. Eres amable Sung pero se nota a millas que harías lo que fuera por él.

Dae rió, eso era medianamente cierto.

—Como sea, tal vez pueda ir con Nott o con un troll, seguramente es mejor compañía.

—Pansy quiere que vaya con ella...— suspiró cansado— pero podríamos ir juntos, ya sabes, por lo que todos dicen.

Sung le sonrió a su amigo.

—Sigo pensando que un troll es mejor compañía, pero creo que no parece tan mala idea ir juntos.

Estaba decidido, Sung y Draco serían pareja de baile.

Ya todos lo sabían, que Cedric iría al baile con Cho Chang, esa niña que se la pasa llorando por todo. A Sung no le agradaba para nada, pero si Cedric la había invitado no era sólo porque si.

El día del baile llegó. Sung estaba en su habitación retocando su peinado y una vez lista fue en busca de su pareja y juntos se dirigieron al gran comedor.

Todos los miraban, era como ver a la pareja perfecta. El príncipe y la princesa de slytherin juntos causaban gran conmoción.

La pareja se reunió con su grupo de amigos y conversaron un poco antes de que el baile diera comienzo.

Por otro lado, Cedric Diggory no dejaba de ver a la hermosa chica de slytherin. No tuvo el valor de invitarla por temor a su rechazo y Cho Chang fue la que propuso la idea de que fueran juntos.

Ese mismo día, Chang había escuchado un rumor sobre Sung. Se enteró de que le gustaba Cedric y eso le molestaba de sobremanera.

Cedric era sólo de ella y no perdería la oportunidad de hacer quedar mal a la princesita frente a todos.

El baile había dado comienzo, Sung disfrutaba junto a Draco pues los dos eran muy buenos bailarines y no se cansaban de bailar.

Para la mitad del evento, Sung fue a tomar un descanso. Fue el momento perfecto para Cho.

Chang se acercó a la chica muy decidida, Sung no se había percatado de su presencia hasta que casi un litro y medio de líquido le escurría de cabeza a pies.

Por un momento, los que estaban alrededor se quedaron en completo silencio impactados por lo sucedido.

La reacción inmediata de Sung fue sacar su varita y sin dudarlo le lanzó un hechizo aturdidor a su contraria. Para no causar más líos, decidió salir de allí.

Salió al jardín y se sentó en una de las bancas de piedra. Miró el cielo y cerró los ojos un momento.

—Sung— la llamaron— ¿está todo bien?

La nombrada volteó a ver a Cedric.

—Claro, no fue nada— dijo bastante tranquila. 

—¿Puedo tomar asiento?

—Adelante.

Los dos se quedaron en silencio por un momento.

—Escuché un rumor— dijo Cedric— y me gustaría saber si es verdad.

—Draco y yo no salimos, si es eso lo que quieres saber.

—Es otra cosa— dijo.

—¿Qué es?

—Escuché que... yo te gustaba.

Sung se quedó muda.

—Oh... eso— rió un poco— sí, bueno. Es o era verdad, aunque no deberías hacerle mucho caso a los rumores, ya sabes que...—

Cedric la tomó de la barbilla y la besó. Dae estaba muy sorprendida, pero no se negó a aquel beso.

Se separaron y se miraron a los ojos por un momento.

—Luces muy bella hoy.

—¿Aunque esté bañada en esta cosa?

Cedric rió.

—Aunque estés bañada en ponche. Me gustas Sung y mucho.

La chica sonrió.

—También me gustas, Cedric.

Volvieron a unir sus labios. Desde lo lejos, Draco observaba la escena bastante contento por su mejor amiga.