One shots ⇝ Harry Potter ✔

Harry Potter

Anne estaba en casa recogiendo todos los juguetes de su hijo James. Toda la tarde estuvo de un lado para otro sacando la mayoría de sus juguetes.

Para fortuna de Anne, la magia resolvía la mayoría de sus problemas, pero estaba realmente agotada, James tiene más energía que la mayoría de los niños de su edad.

Lo bueno, es que el niño se había cansado tanto y ahora dormía profundamente, no despertaría hasta el siguiente día.

Una vez que la casa quedó en orden y reparó la ventana que James había roto se sentó en el sillón para descansar un poco. Sin embargo, estaba tan agotada que se quedó dormida.

Cuando abrió los ojos, se dio cuenta de que ya no estaba en la sala, se encontraba en su habitación y ya traía puesta su pijama.

-Anne, imagino que James te entretuvo todo el día- dijo Harry, su esposo.

-Ni lo menciones. Toda esa energía la heredó de ti.

Ambos rieron. Harry se sentó en el borde de la cama y se quitó la corbata.

-¿Qué tal el trabajo?- preguntó Anne ayudando a su esposo a despojarse de sus prendas.

-Lo normal, no pasó nada interesante hoy.

Harry sonrió a su esposa. Anne por su parte, comenzó a masajear la espalda de Harry y este se dejó llevar por el momento.

Harry se puso de pie y miró a su linda esposa. Le sonrió con un toque de picardía.

-Creo que James necesita un hermanito- dijo.

Anne sonrió y se mordió el labio.

-Creo que tienes razón.

Harry terminó de quitarse la ropa y se acostó suavemente sobre su esposa, la besó con notable necesidad.

[DOS MESES DESPUÉS]

-Positivo- dijo Anne con una gran sonrisa.

Harry abrazó a su esposa y la hizo dar vueltas en el aire. Besó su mejilla y la dejó.

Se hinco frente a su esposa y acarició su vientre con suavidad.

-Mi pequeño Albus Severus Potter- dijo con los ojos cerrados.

-No, ni lo pienses Potter- dijo Anne- te dejé nombrar a James y no le pondrás así a nuestro pequeño.

-Anne... por favor- dijo Harry, poniéndose de pie y besando la mejilla de su amada.

-Potter, ni siquiera riman esos nombres.

-No importa, sabes lo importante que fueron esos hombres para mi.

-Harry, odiabas a Snape...

-Y luego supe que era para protegerme.

-Eso no quita el hecho de que te castigaba y humillaba públicamente.

Harry gruñó por lo bajo.

-Tengo una idea- dijo Harry con una gran sonrisa- Usemos una moneda, si yo gano, le pondré el nombre que yo quiera y si tu ganas, tu lo escoges.

Anne lo pensó un momento.

-Bien.

[...]

-Mi pequeño, Albus Severus- decía Harry mientras acariciaba el vientre de su esposa.

Ya solo faltaba un par de meses para que el pequeño viera la luz.

-A veces te detesto, Potter.

-Yo también te amo, cariño.