Alianza Forzada. Cherik. Wolversilver

Capítulo Veintitrés: Limando Asperezas

Alianza Forzada

Este fanfic participa del evento de la semana Cherik (del 3 al 9 de junio) para celebrar a nuestra pareja favorita. Le añado el hashtag "#Cherikweek2019"

Muchas gracias a @KiKaLoBe, por su ayuda.

Capítulo Veintitrés: Limando Asperezas

Erik no tenía la mutación de su esposo para localizar la mente de Logan y lo buscó por los diferentes pisos. No sabía que el lobo había salido un momento del hospital para comprarle un regalo a Peter. Charles no podía andar ligero por su estado pero usó su poder para encontrar a su cónyuge. Cuando Erik regresó a la planta donde estaba internado Peter, el telépata captó no solo su mente sino la vibración metálica que había por su excitación, y se le acercó.

Erik reconoció sus pasos y se recargó contra el muro. Estaba angustiado y furioso. Las emociones no le permitían pensar en la persona sincera que Logan era y que no se atrevería jamás a lastimar a Peter. Solo recordaba a su hijo como a un niño, no que ya había cumplido dieciocho, y que él tenía la obligación como padre de protegerlo.

Charles leyó todo esto mientras se le acercaba. Le apoyó la mano sobre el hombro pero Erik no lo miró. Estaba absorto en sus dudas y miedo.

-Erik – lo llamó para que le hiciera caso pero no recibió respuesta -. Erik, escucha. Leí a Peter y está enamorado realmente.

Magneto recién volteó hacia él, enojado.

-De Logan, Charles – espetó sin esconder la bronca -. De mi amigo, que tiene más de cien años encima, que conoció a mi hijo cuando yo todavía le limpiaba los mocos. Por eso lo llama mocoso, ¿sabes?

-¿Te impresiona la diferencia de edad? – quiso entender Charles. No lo quería leer por respeto, tampoco enviarle paz porque se daba cuenta de que su esposo necesitaba abrirse y dialogar para tranquilizarse -. Escucha, amor. No hay nadie en la Tierra con la edad de Logan, si se enamora de alguien, tendrá que existir esa diferencia sí o sí, y él se enamoró de Peter.

-Peter es un niño – soltó Erik con furia y convicción.

-No lo es más – rebatió Charles tranquilo -. Lo fue hace unos años pero ahora es un adulto, o, al menos, un joven que sabe lo que quiere. Tú lo educaste muy bien, aun con las limitaciones que tuviste, y hoy él eligió a Logan como su pareja.

-Peter es un niño – insistió -. Tengo que reprenderlo, guiarlo, puede tener dieciocho pero todavía se comporta como un chiquillo.

-No, Erik – rio el telépata -. Se comporta como un adolescente no más como un niño, y está madurando y dejando su adolescencia atrás. ¿Crees que lo hubiese aceptado en el equipo X-Men, si fuera un niño, o un adolescente descuidado? Jamás, amor.

Erik quiso rebatirle pero se dio cuenta de que se estaba quedando sin argumentos. De igual manera, no daría su brazo a torcer. Peter podía no ser más un niño pero no podía convertirse en la pareja de un mutante centenario. Era un no a su relación y punto.

Charles le masajeó el hombro que le estaba apoyando. Sabía que a su esposo le costaría aceptar esta realidad, y comprendió que no sería conveniente insistir. Erik necesitaba tiempo.

-¿Por qué no vamos a la cafetería a comer algo? – propuso y se masajeó el vientre abultado -. Las criaturas y yo tenemos hambre – sonrió.

Magneto masculló.

-Si llega a lastimar a Peter. . .

-Sabes que Logan jamás haría algo así – rebatió Charles, serio y convencido -. ¡Erik! Entiendo que estés sorprendido y un poco angustiado, pero no puedes dudar de uno de tus mejores amigos.