No more illusions.

Tengo frío, lo juro.

Se cruzó a Steve y Bucky justo saliendo para empezar su entrenamiento matutino, les saludo con desgano y continúo. La manta sobre sus hombros ocupaba el lugar de su capa, y el cuero de su armadura, ahora era un suave pijama. El sofá le esperaba, como siempre solitario a esas horas de la mañana. Un té, aparentemente recién preparado, reposaba sobre la mesita, cortesía de Steve.

Arropado a una manta que no necesitaba, apretando un café que quemaba hasta herir sus manos y viendo su programa favorito, Loki aparentaba normalidad.

- El muñeco de nieve tiene frío. – Se burló Clint entrando al verlo así.

Apenas llegaba de una misión, con un pequeño corte en su mandíbula y otro cruzando su nariz. Loki volteo a verlo, y sus ojos brillaron en verde. Barton sintió terror por un segundo, pero luego se percató que los dolores en su cuerpo ya no estaban, ni tampoco las heridas en su rostro.

El villano continúo ignorándolo y riendo a ratos con su programa de humor. Barton lo miro por un par de segundos más, pensando en una excusa para golpear al ojiverde. Sin embargo, también lo ignoro y fue a la cocina por un aperitivo antes del desayuno. De vuelta en la sala con una galleta en la boca, apoyo su cuerpo contra el respaldo del sofá, lo más lejos posible del pelinegro.

Loki dejo la taza a la mitad sobre la mesita, dejando a la vista sus palmas el suficiente tiempo para que Clint notara las heridas en sus manos curarse solas. Eran obvias quemaduras por la taza.

- Oye, ¿Por qué demonios tomas el té caliente si te hace daño? – Reclamo indignado, como si ese comportamiento le pareciera el más estúpido del mundo.

- Sanan rápido. – Excuso, sin darle importancia.

- Es estúpido.

- La gente normal toma su té caliente, ¿Por qué yo no puedo? – Una pizca de enojo denoto su tono.

Clint volvió a inspeccionarlo. Aferrado a aquella manta que le proporcionaba un calor que su cuerpo eliminaba por supervivencia, y empedernido en aquella estúpida taza de té. ¿Por qué? ¿Para hacer feliz a Steve? ¿Para ocultar algo que todos ya sabían? Habia dejado la taza sobre la mesa porque no podía soportar más el dolor, y Barton se dio cuenta ahora de lo que pasaba.

- Haz fingido toda tu vida. – Afirmo, como quien descubre la ficha con la que su rompecabezas tiene sentido.

Loki hacia siempre este tipo de cosas sin darse cuenta. Fingir que sentía frio, fingir que disfrutaba de los baños calientes, fingir que le gustaban las mismas cosas que a su hermano, fingir que era normal.

- Ups, me atrapaste. – Irónica sorpresa. - Cuando eres el rarito de un mundo entero... - Elevo sus hombros restándole importancia. – te acostumbras.

- Finges con nosotros también, ¿No?

Loki sonrió y negó suavemente, ondeando sus rulos casi imperceptiblemente.

- No es necesario fingir con todos. – Elevo su mirada hasta toparse con la ajena. – Pero tú ya sabes eso, ¿No?

El arquero lo observo sin entender, tratando pero sin éxito.

- Natasha sabe lo que sientes con respecto a mi persona, pero el resto... - Elevo una ceja, casi juzgándolo. – el resto piensa que tan solo me odias.

- Eso no es...

- Te asusto, pero no por lo que te hice, sino por lo que tú sabes.

El villano volvió a sostener su taza de té, ahora tibia, era aceptable para sus manos.

- Esa es la parte que ella no conoce, tú sabes que lo que hice era un teatro. –

- Yo no...

- Pero tu mente lo oculto, porque entonces yo no sería el malo. – Sorbió un poco más de la infusión, permitiéndole pensar al menor. – Y finalmente lo recordaste cuando se lo confesé a Thor.

El silencio solo fue ambientado por la televisión. Loki observaba el programa, Clint lo observaba a él.

- ¿Cómo sabes que...?

- Estuve en tu cabeza. ¿No crees que te conozco lo suficiente?

El presentador se despidió y el ojiverde se levantó para dejar su taza en el lavaplatos. Para cuando paso de nuevo por la sala, Clint seguía allí estático.

- Voy a ducharme antes de que vuelva Steve, tal vez deberías hacer lo mismo. – Señalo su ropa ensangrentada. – Aun hueles a sangre y no voy a gastar mi magia en eso.