Rencor.

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De vuelta en casa, Loki había logrado evitar maravillosamente a Thor. Su cama y demás cosas fueron transferidas a la habitación de James y muy probablemente, las únicas veces que cruzaba a su hermano era a la hora de comer.

Thor había terminado con Jane finalmente, harto de los reclamos de la midgardiana. No iba a alejarse de su hermano menor, mucho menos ahora que había empeorado su deteriorada relación. No había encontrado la forma de remediar la situación y Steve le aconsejo que mantuviese una distancia hasta que las cosas se suavizaran.

El ambiente estaba en una paz casi acordada, incomoda algunas veces. Pero todo eso fue olvidado cuando Natasha llamo para informar que se dirigía a la torre con Barton herido. Loki salio de su habitación nueva y los espero directamente en el puerto de aterrizaje.

Se había vuelto costumbre, en este corto tiempo, recurrir al hechicero cuando las cosas iban un poco mal, en vez de esperar asistencia médica. Tres del grupo aun no confiaban en el villano, pero Loki cumplía su pequeña tarea sin rezongar, ya que no requería demasiado esfuerzo sanar a los humanos usualmente.

Clint llego apoyando su peso sobre la Viuda, a punto de caer. Su costado derecho era una gran mancha de sangre que se escurría entre sus manos. Loki pidió que lo recostaran en el propio suelo a un lado de la nave. Natasha obedeció, pero continuo mirándolo con rencor, cosa común y que Loki aprendió a ignorar.

Las manos del pelilargo se acercaron a la herida, dejando centímetros de distancia. La magia verde comenzó a manifestarse, pero Loki se detuvo de improviso.

- ¿Qué pasa? – presiono la mujer, aumentando su enojo.

- Hay un trozo de metal, tengo que sacarlo. – Explico antes de comenzar.

Pero en cuanto lo toco, Clint grito del dolor.

- ¡Le duele! Intenta otro maldito truco tuyo. – Apuro la pelirroja.

Si, lo sabía bien. Dolía porque estaba muy dentro, rozando de cerca algunos órganos, la punta de algo se había adentrado profundo. Y no podía dejarlo allí, por infecciones o un futuro daño a sus órganos por el filo.

Loki lo decidió, tenía una idea. La mano izquierda paso a la cabeza de Clint. Pero este la alejo inmediatamente.

- ¡Oye! ¡Nada de tus mierdas mentales! – Reclamo.

Barton recordaba muy bien la última vez que la magia había entrado en su cabeza, y no tenía recuerdos lindos de aquellos días. Ya era un gran trabajo para el recibir ayuda mágica del villano que le lavo el cerebro.

Harto. Loki estaba harto de las quejas, los reclamos, las negativas. Hacia todo lo que podía para merecer la maldita vida, y esta bola de superdotados se pensaba que podían tratar a su sanador como si entendiesen algo de magia. ¡¿Qué demonios querían que hiciese?

Volvió a colocar su mano sobre la frente del más bajo, y por mucho que Clint se resistiera, su fuerza era mucho mayor. Natasha enloqueció entonces, intentando empujar a Loki, a lo que el villano la golpeo con una onda tan fuerte que término contra la nave. El resto no intento nada, a sabiendas de que era lo correcto y socorrieron a la dama del grupo. Entonces Clint perdió la conciencia inducido por Loki. La mano derecha ingreso en la herida, sabiendo perfectamente el camino al objeto.

Los ojos verdes se llenaron de lágrimas, mientras Loki intentaba no retorcerse de dolor sobre sí mismo. Logro atrapar el filoso metal, retirándolo y camuflando un grito en un gruñido suave. Volvió a respirar cuando saco por completo el objeto y volvió ambas manos a la herida para terminar de curarla, mientras Clint volvía en sí.

El sudor cubría la frente del pelinegro, sonriendo con satisfacción a pesar de todo.

- ¿Qué demonios hiciste? – Reclamo nuevamente Hawkeye.

- Evitarte el dolor, debilucho. – Insulto mientras se marchaba, de vuelta a su cuarto nuevo.

Natasha estaba hecha una furia, sin entender porque sus compañeros no intervinieron cuando Loki ignoro a Clint y tomo sus propias decisiones, y desde que llegaron se la había pasado discutiendo con todos. Jamás la habían visto así, y sabían que no era tanto por Clint el problema, sino por Loki quien había jurado que le partiría el cráneo a su amigo después de obligarlo a asesinarla, y eso no es algo que olvidas fácil.

- Solo hizo lo que debía. – repitió Tony. - ¿Podrías dejar de quejarte de que Barton esté vivo? A veces es un pesado, pero tampoco para dejarlo morir en el techo. – Bromeo, enfureciendo más a la otra.

- Lo que debía hacer es lo que nosotros le digamos. – Replico la pelirroja.

- Loki es un aliado, no un esclavo. – Defendió Thor metiéndose a la conversación.

La verdad esto era una guerra de bandos entre los cuatro que defendían al villano, y Clint y Natasha que querían que ardiera en el infierno. Mientras Bruce comía yogur en una esquina del comedor, sin intervenir y esperando que nadie deseara que interviniera. 

No more illusions.Where stories live. Discover now