Memorias Postergadas

Capítulo 12

Capítulo 12

—No debiste hablar. Te necesitan afuera, no aquí encerrado conmigo —dijo Emily, sin mirarlo. Nunca tuvo una relación muy fuerte con su padre, pero eso no quitaba el hecho de que se preocupara por él.

Desde pequeña se había criado en el laboratorio, llena de máquinas y cables por todos lados, sin ningún amigo de su edad que la comprendiera. Su padre era el único contacto con el mundo exterior. Siempre le traía regalos de afuera y le contaba sobre toda la tecnología moderna y cómo eran las grandes civilizaciones, haciendo que algunas veces soñara despierta con esos lugares.

—Si tú caes, yo caigo —dijo con serenidad su padre. —Si ella decide que lo mejor es que estés encerrada, yo también lo estaré.

Lo miró con melancolía. —Eso decía mamá —su voz apenas se escuchó.

Su padre sintió la necesidad de correr a abrazarla, pero las esposas no se lo permitían; solo podían verse el uno al otro por el campo de fuerza que dividía las celdas.

—Nunca me dijiste qué pasó con ella.

—No es el momento.

—¿Y entonces cuándo lo será?—dijo con desesperación. —¿Cuando Kate nos destierre a ambos? ¿O cuando nos espere su mismo destino incierto? Solo me haces pensar lo peor.

—Eres igual a ella, siempre quería saberlo todo, aunque eso la destruyera.

—¿Qué quieres decir?

—Tu madre descubrió algo que no debía, un secreto que no cualquiera podría mantener,  , fue demasiado para ella—dijo con tristeza—. Trato de advertirles a los demás, de quitarles la venda de los ojos, pero no lo logró.

—La mataron —concluyó Emily, mientras pequeñas lágrimas bajaban por sus ojos. —Lo mismo le pasó a Cody, ¿no es así?

—No, no mezcles las cosas. Lo de tu madre no se relaciona con Cody, él tuvo una historia diferente.

—Quiero saberlo —dijo con la voz entrecortada. —Si Nick no puede, al menos quiero saberlo yo. Cuánto debe de estar sufriendo ahora.

—No,  .Cuando Nick tenga más edad, así como tú, podrá saberlo, si es que no lo ha recordado ya.

— ¿Qué? Recuerdo cuando anunciaron la muerte de Cody, Nick no estaba allí, ¿Qué tiene que recordar?

—Si no quieres terminar boca abajo en una tumba, deja de preguntar —dijo otra voz frente a ambos. —Su charla ha sido muy conmovedora, pero es de alto riesgo que continúen hablando o que la señorita Jensen se comunique con el prototipo 2. Serán trasladados a celdas nuevas dentro de 24 horas. La señora Kate ha sido piadosa con ustedes, así que les aconsejo que no busquen más problemas.

Emily no tardó en reconocerle: era Roger, la mano derecha de Kate a toda costa (aunque ella no lo notara y lo viera como un empleado más). Nunca comprendió a que se debía tanta lealtad, pero no le importaba el motivo: sentía repulsión hacia ambos.

Sabía que el tiempo se le haría eterno; sin embargo, no podía dejar de pensar en aquellos chicos, especialmente en Nick, recordando la primera vez que le conoció.

Nick la miró de reojo y se sentó en el sillón frente a ella. La examinó con la mirada, le parecía realmente extraño que le asignaron como guía a alguien tan joven, pero no esperaba algo extraordinario. Sabía que ella era como los otros y no permitiría que le lavara el cerebro.

—Me parece que todo será mejor si somos francos, señorita Jensen. Usted solo tratará de que yo no me sienta tan loco, cuando en realidad sí lo estoy, y yo no pienso hacerle caso, así que no le veo sentido a que malgaste su tiempo conmigo.