capítulo 65: Prométeme algo...

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Una semana, era lo que faltaba para terminar el año escolar y yo aún no le había dicho a James. Mi familia ya sabía y ya tenía decidido a que universidad iba a ir, pero por ahora sería un secreto para muchos. Ya había terminado en el colegio e iba a ir a mi casa a darme una ducha y prepararme para ir a la academia porque adivinen qué: ya pronto seria la final y pues había estado hablando con Mark quien estuvo muy al pendiente de mis terapias en las piernas por causa de la lesión en el accidente y como ya estaba completamente como nueva me recordó la oferta que me había hecho de hacer el solo para la final y... ¡Acepte!

Estaba muy nerviosa por ello, pero por eso me iba a esforzar lo más que pudiera en los ensayos y en mi tiempo libre en casa ensayaría también para estar completamente preparada, claro que todavía faltaban alrededor de mes y medio para la competencia, mientras teníamos que ir a las competencias de fines de semana excepto que yo no iba a participar porque Mark dice que es mejor que me concentre en el solo de la final porque nadie se va a esperar que yo lo haga y que si quería podía ir a ver a los chicos en la competencia semanal que se acercaba.

Estuve hasta muy tarde en la academia con Mark por lo que estábamos modificando un poco la coreografía de mí solo, pero el no quiso quitar la parte que me traumatizaba hacer en público aun y confiaba en que esta vez sería capaz de lograr hacerla a la perfección. Acabamos de modificar y ensaye unas cuantas veces para ver como saldría y me pareció bien, luego seguiría ensayando en casa cuando tuviera tiempo ya que tenía que llegar a estudiar para el examen de cálculo de la semana siguiente y aunque no era muy complicado, habían algunas cosas que no había entendido y en las cuales Sav se había ofrecido a ayudarme y mañana después del colegio vendría a casa a explicarme algunas cosas.

La casa no estaba vacía, escuche voces en el comedor y allí me dirigí. Cuando entre me encontré con Elizabeth tomando café y charlando tranquilamente con mi madre, me acerque y salude a ambas me ofrecieron quedarme con ellas a charlas, pero les explique que no podía porque tenía tarea pendiente, tome unas galletas y un Yogurt, me despedí de ambas y subí a mi habitación.

Me puse a estudiar para el examen de cálculo lo poco que sabia y poco a poco fui entendiendo el resto, ya no necesitaría la ayuda de Sav y tendría el día de mañana libre para ir a ensayar un rato bajo la supervisión de Mark y estudiar cuando llegara a casa, me comí las galletas y luego el Yogurt, guarde los libros y mis útiles en el bolso del colegio para luego darme una ducha y prepárame para dormir.

Al otro día cuando desperté me prepare para ir al colegio e inmediatamente cuando estuve lista partí ya que iba un poco retrasada porque mi alarma no había sonado y se me había hecho tarde. Cuando llegue el timbre había sonado hace un buen rato, la profesora Weber de Trigonometría me recibió en la entrada hable con ella y le explique mi retraso, me dejo entrar no sin antes hacerme firmar un acta. Entre y note que la única que faltaba en el aula era yo – a excepción de aquellos que jamás entraban en ciertas clases – Me senté junto a mi compañera que se llamaba Angela y comencé a tomar apuntes de lo que la profesora explicaba.

Luego de esta clase tenia Biología con El profesor Green, esta clase la compartía con James, era una clase práctica en la que estudiaríamos la Mitosis en raíz de cebolla sonaba complicado pero a medida que nos fueron dando los pasos era fácil y era algo para hacer en casa y traerlo en 6 días al colegio para cortar el ultimo centímetro de la raíz y separarlas por tipo de célula, era en parejas y gracias a dios me toco con James y no tenía que ir muy lejos de casa, ni mucho menos me retrasaría con los ensayos.

Finalizaron los horarios de clases y me había traído en la mochila la ropa para ir a ensayar a la academia, cuando llegue Mark estaba con el grupo de chicos que harían el dueto este domingo y me pidió que comenzara sin él, me fui a cambiar de atuendo y comencé el ensayo, cuando iba a hacer un salto me tropecé y caí. Di un golpe al suelo de madera lisa y me levante sin esfuerzo, lo volví a intentar una cuantas veces hasta que al fin lo logre justo cuando Mark entro por la puerta me alegre mucho de haberlo hecho y el me felicito, por lo visto yacía un rato viéndome a través del espejo doble.

El chico nuevoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora