contrato de... amor?

De regreso a la escuela

Sakura iba de camino al instituto, su mente estaba realmente confundida después de lo sucedido en la fiesta del hospital, más bien cuando Sasuke fue a dejarla a su casa.

*Flash back*

Sasuke estacionaba el auto frente al edificio de Sakura, se bajó y le abrió la puerta a la pelirosa. Sakura sale del auto y camina junto al pelinegro hasta la entrada.

- Yo... gracias por traerme.

- Hmph - fue lo único que salió de la boca del chico. Sakura abrió la puerta y se dispuso a entrar, entonces él le detuvo - No quiero que malinterpretes lo que sucedió esta noche... tú y yo tenemos sólo un negocio, recuérdalo.

El comentario por alguna razón la molestó mucho - Claro - dijo mientras entraba.

- Y Sakura... - continuó el chico mientras la miraba - Ya que no tenías obligación de estar con mi tía en la fiesta, como compensación no tendrás que pagarme los intereses de los próximos dos meses.

- Como digas - respondió la ojiverde con desgano. Entonces cerró la puerta de la entrada y comenzó a subir las escaleras. Al ver desaparecer la figura de la chica, Sasuke volvió al auto y se fue.

*Fin del flash back*

Sakura movió su cabeza de un lado a otro.

- Deja de pensar en tonterías, Sakura, ¿Qué diablos te sucede? - se decía para sí misma, soltó un suspiro y miró su reloj - ¡No puede ser 8:15! ¿cómo puede ser tan tarde? ¡Maldición! - exclamó mientras corría.

Al llegar a la entrada de la escuela, escuchó que gritaban su nombre.

- ¡Sakura-chan! - exclamaba Naruto mientras se acercaba corriendo hacia su amiga - ¡Me quedé dormido!

- ¡Date prisa Naruto o vamos a llegar tarde!

En realidad tarde ya era, ambos siguieron corriendo hasta el último piso de la escuela dónde se encontraba su salón, Naruto abrió la puerta intempestivamente y vio que todos tomaban nota mientras Kurenai escribía en el pizarrón.

- ¿Por qué entras así Naruto? - preguntó molesta Kurenai al ver al rubio.

- Sumimasen sensei - respondió mientras intentaba recuperar el aliento, luego se hizo a un lado para que Sakura se disculpara por su retraso.

- Es suficiente, están los dos castigados, hoy no habrá período de descanso para ustedes.

Después de oírla, los chicos se dirigieron a sus asientos y comenzaron a tomar nota sobre la clase. Después de algunas horas, sonó el timbre indicando el fin de las primeras cuatro horas de clase, todos se pusieron de pie y comenzaron a salir, a excepción de Naruto y Sakura.

- No puede ser - decía el rubio mientras se dejaba caer en su mesa - Salí tan rápido de mi casa que ni siquiera tuve tiempo de desayunar, de haber sabido que aun así iba a llegar tarde, hubiera desayunado algo.

- Ay Naruto - dijo Sakura en un suspiro - ¿Cómo pudiste quedarte dormido y llegar tarde el primer día de clases?

- Es que me quedé con Kiba escribiendo una nueva canción, mira - dijo mientras le enseñaba una hoja de papel - ¿Y qué me dices tú, Sakura-chan? También llegaste tarde.

- Si, bueno, yo... me quedé pensando en otras cosas y se me fue el tiempo, pero déjame ver la canción.

Naruto y Sakura se pasaron la hora de descanso repasando la canción, el rubio le dio la tonada y ella comenzó a cantar.

- La canción es genial Naruto, pero hay algo que no me suena bien.

- ¿A qué te refieres? Yo creo que se oye perfectamente.