-The Mechanic- |EXO|

Capítulo 10

10

—¿Cómo pudiste hacerme eso? — Luhan se quejó, sintiendo el frio traspasar su ropa.

Sehun había escuchado en silencio cada una de las réplicas de rubio, no era para tanto. Le había entregado su saco escolar para cubrirlo del frío.

Cuando divisó su casa agradeció al cielo no tener que oír más quejas. Introdujo su llave a la cerradura e invitó a Luhan a pasar a regañadientes.

Era su culpa que ahora el rubio estuviera empapado de pies a cabeza.

Luhan agradeció en murmuró y observó todo con mucha atención, a decir verdad era la primera vez que entraba a un hogar como ese. Usualmente los lugares que visitaba eran mucho más grandes.

Sehun dejó las llaves en el mostrador mientras se quitaba la camisa caminado hasta su cocina, naturalmente.

Luhan le miró de reojo y no pudo evitar sentirse muy excitado por su cuerpo trabajado, cuando lo vio desaparecer suspiró mirando algunas cosas.

De pronto la voz de Sehun se oyó nuevamente. —El baño esta al fondo, a la derecha. Puedes tomar una ducha si quieres. — comento sin mucho interés.

Luhan asintió y fue rumbo al baño, no podía estar con esa ropa encharcada un segundo más o moriría.

Cuando entró, observó con decepción la regadera. En esos momentos extrañaba demasiado su bonita y amplia bañera. Se deshizo de su ropa e ingresó a la ducha, encendiendo el grifo.

No sabía si el agua era fría o no, había caminado con ropa mojada y no lo distinguía bien. Dejó que los chorros de agua lavaran su cuerpo, tomó sin necesidad de pedirlos, los productos de limpieza de Sehun.

Uso su shampoo, como su jabón, y extrañamente no se sintió asqueado en absoluto.

Su baño fue corto, pero reconfortante. Cuando salió buscó algunas toallas pero no encontró ninguna. Mordió sus labios, no tenía nada más que roja mojada.

—Mierda...

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Sehun bebió de la leche de cartón en su nevera, cuando recordó que esa mañana antes de ir a la escuela no había dejado las toallas limpias en el baño, suspiró exhausto, y fue por el cambio de toallas en la lavandería.

Cuando tomó la perilla del baño, era tarde para detenerse, había abierto la puerta sin preguntar antes, encontrado a Luhan desnudo y goteando frente a él.

El platino le observó a detalle sin poder evitarlo, y con su misma expresión irritada. —Hay ropa limpia en mi habitación. — le lanzó las toallas y cerró la puerta con fuerza.

Maldijo su puta sincronización y fue a la cocina a mojarse la cara.

Tenía que sacarlo de la casa o todo terminaría mal.

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Luhan se había quedado en piedra, ese mocoso había entrado al baño sin tocar si quiera y lo había visto encuerado.

¿Y que fue esa reacción?

¡¿Acaso había encontrado a dos hipopótamos follando?!

Solo era él desnudo, no tenía por qué enfadarse. El enfadado debía ser él.

Se secó con las toallas rápidamente, y se enredó la más grande en las caderas. Cuando entro a la habitación encontró la muda de ropa sobre la cama. Entró con mucho sigilo observando cada rincón. Sentía que estar ahí le permitiría conocer un poco más del excéntrico Sehun.