Capítulo 20: ¡Que comience la guerra!

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Al Noir declarar sus sentimientos por ella, Natalie se levanta del sillón sorprendida, no le responde y sale de la habitación golpeando la puerta, la cual hace un sonido desconcertante. Este portazo era bastante fuerte para alguien normal, aunque siendo un vampiro eso ni siquiera contaría. Sin embargo, Noir queda perplejo por su reacción, esperaba un grito, un enojo, algo... no ser ignorado totalmente.

Los siguientes días, no solo fue ignorado, fue evitado y el simpático Noir comenzó a arrepentirse de haberle expresado lo que sentía. Decidió centrarse en la búsqueda de Bast.

― Einer ― se acercó a su amigo ― la única forma que tengo de contactar con él, es a través de un remitente que no sé quién es... es lo único que puedo dar sobre la información del paradero de Bast. Mi amo nunca quiere ser encontrado.

― ¡Uf! Que mal... no creo que sirva, ni siquiera debe existir esa persona, debe ser el nombre de un lugar ¿No hay otra forma?

Noir niega con la cabeza.

― En todo caso, si yo lo llamaría, quizás mandaría a alguien a ayudar. No vendría él específicamente...

― Bueno, ya pensaremos en algo... ― suspira Einer y luego sonríe ― hey ¿Qué anda pasando con tu amiguita? ― refiriéndose a Natalie.

― ¿Qué anda pasando con qué? ― levanta una ceja.

― Los escuche ― hace en tono cantarín, deja de sonreír y se detiene pensando ― lástima que te rechazo.

Noir frunce el ceño.

― No me rechazo ¿Y qué haces escuchando conversaciones ajenas?

― Culpa a mi oído de vampiro ― se lo señala ― además, no creo ser yo solo el que lo oyó, hay varios de los nuestros aquí...

― Cállate ― suspira ― no debí haber dicho nada...

― ¿Por qué? ¿Te lo sacaste de adentro, no? No tiene nada de malo ¡Es ella quien se lo pierde! ― exclama con confianza.

― Ese no es el punto, aún no hemos aclarado nada...

― ¡¿Pues qué esperas?! Ve y acláralo ― le grita sonriendo.

― Lo dices como si me dejara hacerlo, se escapa...

― Acorrálala ― mueve las cejas pícaramente.

Noir se ríe.

― Tú y tus ideas.

Mientras tanto, en el clan de los Oscuros, todo parecía calmo...

Una explosión se escucha y se ponen alerta, varios salen de sus casas, insectos por todas partes rodean la ciudad. Entonces se percatan, un ataque sorpresa de los arácnidos. Una lucha intensa comienza, los Oscuros están siendo distraídos por la cantidad de bichos, pero aun así son más fuertes y cuando visualizan un Arácnido se deshacen de este. Mientras, los vampiros que son culpables del ataque, aprovechan sus distracciones para acabar con el enemigo Oscuro.

― Esto no me lo esperaba de ti, Louise ― dice Crow a la líder de los Arácnidos al encontrarla.

― Nadie espera nada de nadie ¿Lo olvidas? ― ella sonríe y lo ataca.

Ambos pelean en una lucha a muerte.

En la casa de Milán, él sale para luchar también.

― Quédate aquí ― le pide a Marilyn.

― ¡No! Yo voy a luchar ― ella se enoja.

― No es momento de nuestras discusiones, te quedas aquí y punto ― ordena y se va.

La sangre que corre por mis venas (sin editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora