Capítulo 5: Exterminando lo inevitable

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Jackson Blake, cazador, informante, un hombre preparado para una guerra, listo para la acción, ojos oscuros, cabello castaño, mirada amenazadora, en pocas palabras, un chico rudo.

Llamando a los vampiros presas, destruyendo sus orgullos, su confianza en sí mismo les hacía temer, tan inteligente para encontrarlos y atraparlos, demostraba que podía aparecer enseguida frente a "él".

Si, Nerón se enteró, observo su información, al ver tantos datos del cazador que lo estaba buscando, se estremeció aunque era el líder.

"Asesino Blake" como lo denominaban todos los vampiros que eran precavidos, para no convertirse en sus presas, intentaban ser lo más posible invisibles en su lista de exterminación.

Nerón caminaba por los pasillos de su clan, junto con otros vampiros, sin darse cuenta, más pasos daba, los que estaban detrás de él, fueron desapareciendo uno por uno, cuando se detuvo y observo, a su espalda no había nadie. Continuo a la otra habitación confundido, cuando de pronto escucho un sonido.

― ¡¿Quién está ahí?! ― grito nervioso.

― Hola ― dijo Jackson apoyado sobre una columna con los brazos cruzados y una sonrisa ganadora.

― ¿Qué has hecho? ― frunció el ceño.

― Si miras a los techos lo sabrás ― corre uno de sus cabellos, el cual había rosado su ojo.

Al mirar, Nerón ve a los vampiros clavados con flechas especiales para destruir los corazones de estas criaturas en pedacitos, mientras la sangre adornaba las paredes con tanta facilidad, cayendo a grandes gotas.

― ¿Quieres matarme de esa forma? ¿Es un honor? ¿Por qué tengo tu odio, "Asesino Blake"? ― Nerón sonríe.

― Natalie era una preciada joya y tú la convertiste en basura ¿Eso explica tu pregunta? ― pone un rostro serio y vuelve a acomodar su cabello.

Nerón observo todas las armas que el cazador tenia, con solo ese artefacto de muñeca había matado a cinco vampiros de una sola vez, pero también utilizaba una pistola bastante grande atada a su espalda, en su cinturón dos pequeñas más y unas cuantas bombas listas para destruir lo que sea. No eran artefactos cualquiera, sus materiales estaban preparados para destruir vampiros y más si ese cazador era el que las utilizaba.

Nerón no estaba listo para este ataque sorpresa, solo se le ocurrió decir una cosa.

― Los ancestrales te castigaran y... ¡Ah!

Nerón grita pero quien lo mata no es Jackson, una mano paso por su espalda muy velozmente y lo atravesó sacándole el corazón.

― Tik tok, se acabó tu tiempo ― dice Verónica apareciendo por detrás con una cara sin expresión alguna, luego saca su mano y empuja lo que queda del vampiro al suelo, observa a Jackson y sonríe ― lindo, más lindo que Noir ¿Quién lo diría? Estoy contenta de que seas guapo.

Jackson observa detenidamente a la vampira, efectivamente era un ancestral, sus ojos la delataban, pero no entendía lo que buscaba ella.

― ¿Qué quieres, anciana?

― Hay que malote ― muerde su labio inferior observándolo de arriba abajo ― solo quiero un siervo y tú me pareces apetitoso.

― ¡Ja! Sueña, antes prefiero ahorcarme ― agarra el arma de su espalda lentamente y la apunta sin titubear.

Ella con una velocidad impresionante se acerca a el arma y presiona su pecho contra esta.

― Dispara aquí, es mejor ― acaricia el arma observándola detenidamente sin ninguna expresión facial visible.

Blake sabe perfectamente que no es tan fácil matar a un ancestral y menos con esa arma, que aunque es buena, para un vampiro como este no lo es tanto.

― ¿Te burlas de mí? ― pregunta él indeciso de sus acciones.

Verónica lo vuelve a mirar.

― Cazador, seguro sabes cómo se convierte un humano en vampiro ¿No?

Él traga saliva esperando lo peor.

― ¿Por qué? ¿Por qué me preguntas?

― Te deseo ― mueve su lengua entre sus labios lentamente demostrando como si tuviera hambre― hay tres formas ― juega moviendo los dedos en el arma ― la primera... es la que usan "los sangre roja" y "los luz divina", una mordida incrusta el veneno, la segunda... es la que usan "los creyentes" y "los arácnidos", con solo beber su sangre tendrás su veneno y la tercera... mi favorita ¿Cómo te convierte un ancestral? Te muerde pero... si no bebes su sangre, mueres, mueres en poco tiempo.

― ¿Por qué tengo que escucharte? ― frunce el ceño.

― Solo estoy preguntando ¿Quieres vivir? ― presiona el arma tan fuerte que la destruye, logrando herirlo, lo empuja hacia el suelo provocando una herida también en uno de sus brazos ― delicioso ― lame la sangre que cae de su hombro, mientras él intenta quitársela de encima sin poderla detener ― aun no me has respondido.

― ¡Ja! Anciana, no me asustas ― Jackson sonríe.

― Dime... ¿Dónde ves mis arrugas? ― pone su cara en frente de la de él.

― Para mí sigues siendo un trapo viejo, maldita bruja.

― Mm lo de bruja me gusta más ― lo besa y no le da tiempo a reaccionar porque rápidamente lo muerde en el cuello.

― ¡Ah! ¡Perra! ― grita mientras ella sigue succionando.

― Delicioso, es como lo imagine ― muerde su propio brazo y tira de su cabello para hacerlo beber, sin embargo, Jackson, en un arranque de ira logra empujarla, zafándose sale corriendo a la puerta de salida.

Verónica aparece delante de la puerta y pronuncia.

― ¡Que malo! ¿De verdad quieres morir? ― estira su brazo para ofrecerle su sangre.

Jackson mira la sangre detenidamente y recuerda las palabras que le dijo por teléfono a Natalie.

"Solo quiero verte"

Luego de aquel recuerdo, todo se vuelve oscuro, se escucha el sonido de la sangre gotear, los ojos brillosos de Verónica se ven en la penumbra y una sonrisa sale de su cara de póker.

Lejos de allí, Natalie y Noir estaban en la casa de Galen, esperando información o algo que hiciera que ella dejara de estar inquieta. Noir no podía dejar de ver como ella se movía de un lado para el otro, como un pajarito enjaulado que solo quiere huir. De pronto se detiene.

― Voy a ir ― refiriéndose sobre visitar a Verónica.

― No, es no ― le niega él ― ya te avisara ¡Cálmate!

― ¡No puedo!

― ¿Por qué tanto ruido? ― aparece Galen por una puerta.

― Siempre durmiendo Vos ― Noir acota.

― ¿Quién es este? ― Natalie lo señala confundida.

― El dueño de la casa ― dice Noir ― lo que pasa es que le gusta dormir, por eso no lo habías visto.

― Los vampiros no necesitamos dormir, pero yo disfruto haciéndolo ― Galen alardea sobre sí mismo ― por cierto, hay que estar alertas, parece que la guerra comenzara pronto.

Ambos lo miran intrigados ¿Qué guerra podría estar por comenzar? Los vampiros se estaban preparando, sin embargo ¿Era realmente lo que iba a ocurrir? Después de todo, el que había comenzado todo esto estaba muerto, aunque en realidad todavía nadie sabía que Nerón, había sido eliminado.

La sangre que corre por mis venas (sin editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora