Sabor a prohibido (#Wattys2016)

Capítulo 28

-Ya estoy cansado de ti Nicole. ¿Cómo es que no entiendes que contigo nunca va a ser nada serio? Por eso me voy, porque yo pedí mi cambio, ya no quiero verte, sólo me traerás problemas con tu hermano. Yo no estoy atado a una sola persona.-tomó sus maletas y se fue a abordar el autobús que lo llevaría lejos.

Las lágrimas recorrían mis mejillas, una a una susurrando "Te lo dije".

-Niki.-esa voz.

-No.-seguí diciendo.

-Nicole.-me sacudía de los hombros.

-NO.-grité.

Abrí los ojos y respiré profundo....

-Tranquila ¿qué soñabas?-era Jonh sentado a mi lado en la cama.

-Nada...interesante.-contesté un poco ida.-¿Qué quieres?.-pregunté con una sonrisa.

-Iré a dejar a Ian a la central dentro de media hora.

-¿Puedo ir?-interrumpí.

-Ah pues claro.-contestó un poco sorprendido.-Entonces arréglate.

Me levanté de la cama lo más rápido que pude para estar lista en 30 minutos. No quería despedirme de él pero los tres días habían pasado y ayer arreglaba sus maletas para irse. Al parecer estaría trabajando en un proyecto por dos meses. Terminé de ponerme mi ropa, una blusa blanca que me quedaba un poco grande, unos jeans y mis botines favoritos, dejé caer mi cabello en pequeñas ondulaciones y bajé al comedor.

Ian ya estaba abajo, platicando con mamá.

-Le agradezco por todo señora.-decía.

-No hay de que Ian, un gusto tenerte con nosotros.-se abrazaron e Ian volteó a verme.

Estaba a punto de abrazarme y darme un beso en la mejilla pero interpuse mi mano.

-No. Aún no te despidas, voy a acompañarte a la central.-dije sonriendo.

Subimos al auto, yo en el asiento de atrás callada mientras Ian y Jonh platicaban, a Jonh igual le desanimaba un poco que Ian se fuera, pues ya todos estábamos acostumbrados a tenerlo todo el día con nosotros pero él lo vería mucho más seguido que yo, ya que el proyecto los relacionaba a ambos.

Llegamos a la central y nos bajamos, recorrimos los pasillos hasta la sala para esperar a que tuviera que irse, ya tenía pagado su viaje, la empresa lo cubría todo, incluso el alojamiento de los dos meses. Platicamos unos minutos hasta que una voz nos anunció que ya era hora.

-Bueno pues, nos vemos después hermano.-dijo Jonh mientras estrechaban las manos y se daban unos golpecitos en la espalda.

-Oh vamos.-dije.-son amigos, no personas que se acaban de conocer, un abrazo chicos.

Rieron ante mi comentario pero terminaron accediendo, se abrazaron como buenos amigos.

-Adiós, Niki.-dijo Ian tomándome la mano.-Gracias por ofrecerme tu casa un tiempo.-dijo para disimular.

-Te voy a extrañar Ian.-lo encarcelé con mis brazos alrededor de su cuello, me estrechó con sus brazos fuertes por la cintura provocando que me alzara un poco de puntas. Jonh no veía mal esto pues sabía que yo era muy efusiva y que en este lapso me había llevado muy bien con su amigo.

-Nada cambiará pequeña.-me susurró en medio del abrazo.

Nos soltamos y me dio un beso en la frente.

-Cuídate Niki.-dijo esto último y se fue a tomar el bus.

Lo vi caminar hacia el autobús, empujando su maleta, subió y escogió el asiento pegado a la ventana, cuando el bus arrancó, se despidió con la mano y después el bus se perdió entre los demás autos.

Jonh y yo regresamos a su auto y esta vez ocupé el asiento de copiloto.

-Hey. ¿Por qué esos ánimos tan bajos?

-Nada solo tengo un poco de sueño, es todo.-dije tratando de imitar un bostezo para que Jonh no se diera cuenta.

-Venga, solo serán dos meses Niki, se convirtió en un buen amigo para ti ¿no es así?-dijo revolviéndome el cabello.

"Claro, un buen amigo" pensé. "Si supieras"

-Aja.-contesté indiferente.

-¿Quieres un helado? Yo invito.

Asentí y miré por la ventanilla.

Tal vez un poco de helado me haría bien, si, un poco de helado...