Capítulo 25

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Me costó mucho trabajo poder conciliar el sueño, no paraba de darle vueltas al asunto de Hannah. Así que salí a tomar aire al jardín.

Me senté en la pequeña banca que teníamos. Sostenía mi celular cuando escuché una voz.

-¿Qué haces aquí afuera?-dijo Ian saliendo en su pijama que era una camisa blanca bastante pegada y una bermuda.

-No puedo dormir, no dejo de pensar en Hannah.-Él tomó asiento a mi lado.

-¿Qué fue lo que pasó?-preguntó pasando un brazo por encima mío para abrigarme.

-Traté de que me dijera lo que pasó entre Jonh y ella, se molestó y se fue de la parada. Me siento tan estúpida.-recargué mi cabeza en su hombro.

-No es tu culpa hermosa. Tal vez debiste ser un poco más paciente en ese tema pero sabemos que nada grave le pasó.

Nos apoyábamos el uno en el otro cuando mi teléfono comenzó a vibrar. Era la mamá de Hannah.

-¿Señora Darson?-dije apartándome un poco de Ian.

-Siento llamarte tan tarde Niki pero Hannah ya despertó, supuse que te gustaría saberlo.

-¿En serio?-respondí con mucha alegría.-¿Podría verla ahora?

-Lo mejor sería que fuera mañana, después de la escuela puedes pasar.-Anunció. Claro, mañana había clases, tal vez debería tratar de dormir.

-Esta bien, gracias. Buenas noches.-colgué.

-¿Buenas noticias?-preguntó Ian.

-Hannah despertó.-dije más alto de lo que quería y lo tomé del rostro para depositarle un beso tronado.-Voy a dormir amor.

-¿Amor?.-se levantó y comenzó a reír.-Eres muy cursi niñata.

Ian y sus cambios tan constantes, en un momento es cursi y en el otro ya no.

-Que idiota.-dije dándole un pequeño empujón. Le di un último beso en el cachete y me metí a mi casa.

(................)

Desperté para hacer mi rutina diaria, me sentía ansiosa porque terminaran las clases, en cuanto terminaran, tomaría el autobús para ir directo al hospital. Me pasé el día con David ya que sólo con ellos dos me entendía de maravilla.

-¿Puedo acompañarte?-preguntó David.

-Si, por supuesto, a Hannah le encantará verte ahí.

Tomamos el autobús y nos la pasamos platicando de un montón de cosas. Bajamos en la parada y caminamos unas cuantas calles para llegar. Al entrar, en la sala de espera estaban su madre, la saludamos y el doctor se acercó para decir que podíamos pasar a verla.

-Pasen ustedes.-dijo su mamá.-yo la vi anoche.

David y yo pasamos a la habitación, y ahí estaba Hannah, recostada, con unos cuantos moretones y su brazo enyesado.

-Hannah.-me acerqué lento, tenía miedo de que me rechazara.-Yo lo sien...

-Calla tonta, yo lo siento.-dijo Hann con esa sonrisa que siempre nos brindaba a todo mundo.

-Bueno, bueno. Ambas están perdonadas.-dijo David y ambas sonreímos.

Nos quedamos un buen rato platicando hasta que una enfermera nos interrumpió para decirnos que la hora de visitas ya había terminado.

-Bueno, esperemos tenerte pronto en clases, nos vemos linda.-se despidió David.

-Adiós feo.-contestó Hann mientras se despedía con un beso en la mejilla.

-Adiós Hann. Te quiero.-dije dándole un beso en la frente.

Antes de que saliera de la habitación, Hann me detuvo del brazo.

-Te contaré después de que salga.-se refirió a lo de Jonh.

-Claro, ahora descansa.

Salimos de la habitación ante la mirada de pistola de la enfermera. Regresamos a la sala de espera donde su mamá nos avisó de que en la noche darían de alta a Hannah.

Me sentía mucho mejor, entre ella y yo ya no había molestias, David me llevó hasta mi casa, él era muy atento, era nuestro mejor amigo. No tenía novia porque insistía que esperaba a alguien en especial, no nos quería decir quien era pero después de lo que sucedió con Hannah no presionaría a nadie más....


Sabor a prohibido (#Wattys2016)Where stories live. Discover now