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Tzuyu acababa de enterarse de la noticia por su hermana, quien se había encerrado en su habitación para preparar los papeles para su próxima boda. Había llamado a Minhyuk a su habitación para hablar sobre las noticias.

-Estoy preocupado por Nay. Jeongyeon fue a decírselo.

La latina se mordió el labio inferior. -Espero que el de Nayeon sea simplemente un flechazo.

-Me gustaría detener a Jeong pero si lo hiciera, ella y Jieun perderían todo y a Nayeon solo le quedarían la mitad de los autos.

-No iré a la boda. No voy a bodas en las que no creo.

-Jeongyeon tuvo una despedida de soltera el viernes por la noche. Estaremos yo y un par de amigos. Quizás podamos intentar encontrar una solución juntos.

-La única solución sería que Nayeon, Jieun o Sana se casaran con alguien. Sana está fuera de discusión. Nay no estaría dispuesto a hacer eso. Jieun... ¿No hay un viejo viudo rico?

-Incluso si Jeong no se casara, ¿en serio crees que habría una oportunidad para ella y Nayeon?

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Llegó el viernes y con él un estado general de tristeza. Minhyuk había reservado su lugar para Jeongyeon y sus diez amigos. Estaban sentados en una mesa hablando de que nadie esperaba ver a la chica casada.

-Y pensaba que me casaría antes que tú.- dijo Carl riendo.

-Los acontecimientos inesperados de la vida...- comentó Minhyuk.

Un par de chicas se acercaron a la mesa vestidas solo con sujetador y tanga y trajeron más bebidas y comida.

-Debería ir a tu club más seguido.- dijo Logan.

Hubo un golpe en la puerta. Minhyuk se levantó molesto. -Está cerrado.- gritó pero siguieron tocando. Abrió pensando que no lo habían oído. -Wow... Quizás funcione... Por favor, pasa.- dijo y luego volvió a cerrar la puerta.

De repente, todas las miradas de los hombres se dirigieron a la chica de la peluca rosa. -¡Buen regalo, Minhyuk! También te invito a mi despedida de soltero.- comentó Carl.

Jeongyeon inmediatamente frunció el ceño cuando vio a la chica usando un vestido negro brillante muy corto. Se detuvo frente a Jeongyeon y comenzó a quitarse lentamente los tirantes de su vestido, deslizándolo por su cuerpo, quedando en ropa interior. Llevaba un sostén muy pequeño y una tanga, ambos de color morado. Jeongyeon inmediatamente se levantó.

-Está bien chicos, se acabó el espectáculo.- dijo colocándose frente a ella para taparla. Tomó su chaqueta de la silla e inmediatamente se la puso a la chica.

-¡Vamos!- se quejó Jacob mientras Jeongyeon llevaba a la chica hacia el estudio de Minhyuk.

Una vez dentro, encendió las luces y cerró la puerta. -¿Qué estás haciendo aquí?

-Solo quería hacerte un regalo de despedida de soltera.- le explicó la chica.

Jeongyeon se quitó la peluca rosa y la máscara. -¿Y decidiste hacerlo haciendo que todos esos pervertidos te miraran?

La chica se encogió de hombros. -Me gusta que me miren, me gusta que me presten atención.

-Lo sé. Por eso siempre te la presto.

-Aun así no soy lo suficientemente sexy para ti.- dijo tirando su chaqueta al suelo.

-Nayeon, hablemos de ello cuando estés vestida. Si tu objetivo es volar mi boda, lo estás consiguiendo.

-Bien, porque ese es exactamente mi objectivo.

-¡Lo hago por ti! ¿¡Qué no entiendes!? ¡Sin el dinero de Nicla no somos nada!

-¡Yo no soy nada sin ti!- gritó Nayeon con lágrimas en los ojos. -Ahora tócame, mírame, pruébame. Al menos hoy. Hoy es tu última oportunidad.

-Si hiciera eso, mi matrimonio se iría a la mi*rda.

-Jeongyeon, nos creamos a nosotras mismos, podemos solucionar el problema sin tener que casarnos con nadie. Sana dijo que su padre, que tiene un banco, nos ayudará.

-Esto te ayudará a ti. ¿Y yo? ¿Y Jieun?

-Cásate conmigo.- dijo la chica de mejillas rojas a pesar de que era diciembre y solo tenía dos trozos de algodón cubriéndola.

Jeongyeon se rió entre dientes. -Se objetiva, Nayeon. No podemos recuperarnos financieramente sólo a través del amor.

-¿A través de qué?- preguntó Nayeon con los ojos llenos de esperanza.

-Tú me amas, pero yo no.

-¿De verdad no sientes nada por mí? Si tienes el coraje, dímelo mirándome a los ojos.

-Yo... Yo no te amo.- dijo mirándola directamente a los ojos.

-Dudaste.

-No te amo, Nayeon.

-Oh... Duele más de lo que pensaba.- dijo conteniendo las lágrimas y con una sonrisa que ocultaba todo el dolor. -Voy para allá, hay gente que me aprecia.

-No quiero que otros te miren, que te toquen... Quiero que seas mía y de nadie más. Por eso saboteé D.O. y James. Pero Dylan... Él te habría hecho feliz. Es el chico de tus sueños.

-Ya no. Espera... La cita...

Jeongyeon acercó su rostro al de Nayeon. -Fui yo. Quería que todo fuera perfecto. Quería que hicieras realidad tu sueño.

-Jeongyeon, mi sueño nunca estará completo sin ti.

La más alta la miró directamente a los ojos. -No digas eso...

-Es la verdad. Y sé que no lo compartes, que no me amas, que me odias, que sólo quieres usarme como lo haces con las demás, pero no puedo vivir sin ti. Te amo tanto que te odio porque me duele. Mi abuela tenía razón, el amor duele. Primero con mi amor maté a mi padre y ahora me estoy haciendo daño a mi misma.

Jeongyeon no pudo evitarlo y abrazó a Nayeon con fuerza. La más baja empezó a llorar sobre el pecho de la otra.

-No llores. No puedo verte llorar. Eres tan frágil, mi pequeña Nayeon. Han pasado algunos meses desde que ya no soy yo misma, o tal vez he descubierto un lado de mí que había mantenido oculto durante años. Nunca quisiera verte llorar. Eres preciosa.

-No te cases.- le suplicó llorando.

-No puedo casarme con una mujer que no amo. No puedo pensar en estar con ella cuando todo lo que hago es pensar en ti. No puedo pensar en ti con otra persona, me vuelve loca. Ahora ponte algo, te dará frío. Mañana voy a hablar con el señor Smith. Lo solucionaremos todo, esta vez juntas.

fun fact de la autora: a veces, cuando escribo, de repente me detengo y pierdo las ganas porque recuerdo que estoy soltera y que al escribir historias de amor me estoy haciendo daño jaja
:(

Business women |2YEON|ESPحيث تعيش القصص. اكتشف الآن