Llámame la Madre de la Transmigración Rápida

Capítulo 117: La hija adoptiva de la viuda (parte 17)

Esta fue la primera vez que Li Su le dijo que no a Wang Si Qin. Esta reacción parecía normal para todos los demás, pero parecía algo inaceptable para Wang Si Qin.

Durante mucho tiempo, Li Su no siempre siguió a Wang Si Qin. En el corazón de Wang Si Qin, su madre siempre había sido quien mejor la conocía y quien más la apoyaba. ¿Por qué su madre ahora se oponía a esto?

Wang Si Qin estaba muy desconcertada. Ella no habló, sino que miró a Li Su.

Li Su estaba muy ansiosa. ¿Cómo debería explicar esto? Ella entendió las ambiciones de Wang Si Qin y entendió por qué Wang Si Qin quería entrar al palacio, pero ¿cómo podía decirle a Si Qin que no quería que ella entrara al palacio porque tenía miedo de que Si Qin se encontrara con el príncipe regente?

El regente era al menos un príncipe. Si tuviera pensamientos sobre Si Qin, incluso si la Mansión Yong An interviniera, ¡sería demasiado tarde!

Li Su trató de persuadir pacientemente a Wang Si Qin. –Si Qin, si quieres tener éxito, hay muchas maneras. ¡No hay necesidad de elegir de esta manera! Todavía eres joven y no has aprendido lo suficiente. ¿Qué puedes hacer si entras en el palacio ahora?

– Madre, lo he pensado seriamente. El mundo es injusto con las mujeres. Una mujer que quiere tener éxito confiando en su propia fuerza actualmente no puede hacerlo. La razón por la que las generales femeninas de la Familia Yang podían ir al campo de batalla era porque eran miembros de la Familia Yang. Los hombres de la Familia Yang tenían méritos sobresalientes y convencieron a la gente de la fuerza de la Familia Yang, por lo que los miembros de la Familia Yang pudieron ir y demostrar su valía en el campo de batalla. Hua Mulan se unió al ejército en nombre de su padre bajo la apariencia de un hombre. Si no lo hubiera hecho, entonces ni siquiera habría podido entrar al cuartel. Quiero tener éxito, pero es difícil hacerlo sin depender de un hombre. Ya que tengo que depender de un hombre, ¿por qué no puedo elegir al más noble? Mientras me gane su confianza, mi camino futuro será mucho más fácil.

Wang Si Qin analizó todo esto seriamente.

– Mamá está preocupada de que no haya aprendido lo suficiente. No olvides que es el príncipe y el hijo predilecto de Su Majestad. Debe tener la mejor educación. Con él, ¿qué te preocupa? No puedo hacer nada cuando soy tan joven, pero este es el mejor momento para acercarme a él. Cualquier relación debe manejarse con cuidado, ¿verdad, madre? Wang Si Qin miró a Li Su.

Esto no era lo que más le preocupaba a Li Su, pero no podía decirle a Wang Si Qin qué era lo que más le preocupaba. Li Su se sintió un poco ansiosa.

Wang Si Qin se puso en cuclillas junto a Li Su y tomó las manos de Li Su. –Madre, ¿qué te preocupa?

Li Su abrió la boca y finalmente dijo: –Si Qin, cuando estás en el palacio... Eres demasiado joven y tu corazón es inestable. Madre está preocupada....

Wang Si Qin se rió. –Madre, ¿te preocupa que me deje influir por la gloria y la riqueza en el palacio? Te has estado preocupando demasiado. Siempre he tenido muy claro lo que quiero. Usted puede descansar seguro.

Sería extraño si se sintiera segura, pero Li Su no pudo refutar a Wang Si Qin. Entonces, ella solo podía aceptar esto pasivamente.

Li Su estuvo de acuerdo. Los demás no siguieron insistiendo. Solo la anciana sostuvo a Wang Si Qin y lloró durante varios días. Wang Si Qin acompañó pacientemente a la anciana durante varios días. Durante este tiempo, ella no explicó nada. Ella solo acompañó a la anciana.

Aunque la anciana se mostró reacia, también era una persona ilustrada. Sabía que Si Qin era una niña muy reflexiva. Aunque amaba a esta niña, no se opondría a lo que Si Qin quería hacer.