Llámame la Madre de la Transmigración Rápida

Capítulo 64 - Mi Hijo es el Nueve Milenios (parte 4)

Li Su y sus hijos se instalaron en una casa que era similar a un patio 3 en 1 en la capital central. La casa no era tan grande, pero era más que suficiente espacio para su familia. Jiang Zhi En también envió algunos sirvientes y una enfermera para Li Lu Xi.

Li Su revisó la nueva residencia y asintió con satisfacción.

–Señora, si no hay nada más, entonces este viejo sirviente regresará. El Maestro todavía está esperando que este viejo sirviente responda –. Jiang Zhi En también había preparado el exterior de la casa. Esta mayordomo fue responsable de la decoración.

–Dale gracias a tu maestro por mí–. Li Su no conocía la etiqueta aquí. La dueña original era solo una chica de campo que sabía algunas palabras y no sabía nada de etiqueta. Entonces, esto no era extraño.

–La señora es educada. La señora es prima del amo, así que está bien. Oh, el maestro también dijo que invitó al joven maestro. Este viejo sirviente vendrá a traer al joven maestro a clase en tres días–, dijo el mayordomo.

–Vale, muchas gracias–. Li Su asintió y ordenó que el mayordomo fuera despedido. Luego, llamó a los sirvientes y sirvientas para dar instrucciones.

Jiang Zhi En envió algunos sirvientes, un hombre cojo que estaba a cargo de la puerta, una mujer de unos treinta años que era la cocinera y una niña de 5 a 6 años. La niña obviamente era una criada de Li Lu Xi. Li Lu Xi todavía era joven, por lo que no podía usar una criada. Solo necesitaba una enfermera. Al menos, Li Su podría dejar que la enfermera se encargue de Li Lu Xi.

Después de aclarar sus responsabilidades personales, Li Su les pidió que se instalaran. Luego se dio la vuelta y fue al dormitorio.

La enfermera lo pensó y quiso seguir.

En el dormitorio, Li Yi Cheng vio dormir a su hermana menor. Li Yi Cheng había estado en guardia desde que Jiang Zhi En insinuó sus ideas desfavorables para su madre y su hermana menor. A excepción de él y su madre, no podía creerle a nadie, ni siquiera a su padre adoptivo, a pesar de que tenían una relación de cooperación.

Ahora, había muchos extraños alrededor. No quería que nadie se acercara a su hermana menor.

–¡Yi Cheng! – Li Su llamó.

–¡Madre! – Li Yi Cheng levantó la cabeza.

–Baja tú primero. Te llamaré si pasa algo–, dijo Li Su a la enfermera, Madre Qiu.

–Sí–. La madre Qiu pensó un poco y luego dijo: –Señora, la joven señorita tiene más de un año. Además de la leche, también debería tener otras cosas. Esta sirviente puede dejar que la tía Zhang cocine una papilla de calabaza para el almuerzo de la joven señorita. ¿Eso está bien?

Li Su asintió. –Está bien, ¡puedes arreglar eso!

Después de que la Madre Qiu se fue, Li Su le dio unas palmaditas en el hombro a Li Yi Cheng. –Está bien ser cauteloso, pero no necesitas sospechar. No necesitas sospechar de todos los sirvientes o vivirás una vida muy cansada.

–Madre, solo tengo miedo... – Li Yi Cheng también sabía que esto era agotador. Nunca durmió en paz en el camino aquí. Pero él no tenía opción. Solo tenía 2 familiares, su madre y su hermana menor. No podía perderlos a los dos.

–Jiang Zhi En es una persona loca, pero también es una persona inteligente. Hay algunas cosas que, cuando se han abordado directamente, las tomará en serio y cambiarán sus pensamientos–, dijo Li Su con una sonrisa. –No importa si lo que dijo Jiang Zhi En es cierto. Esta es nuestra única opción por el momento. Podemos dejar la ciudad natal o dejar Da Liang para que mi hijo pueda tener un futuro, o vivir una vida de incógnito. Estos dos caminos no son los que queremos tomar. Por lo tanto, solo podemos creer que Jiang Zhi En realmente tiene un profundo odio hacia la princesa Chang Shan y sinceramente quiere cooperar con nosotros.