Llámame la Madre de la Transmigración Rápida

Capítulo 100: Mi hijo es el villano principal (final)

Después de dificultades incalculables, Yuan Wei Xiu y su grupo finalmente llegaron al Palacio Shen Shui.

Shui Yi Yi miró la imponente entrada del Palacio Shen Shui y estalló en lágrimas de emoción. Inmediata y desesperadamente saltó del carruaje. Corrió hacia adelante y gritó: – ¡Papá! ¡He vuelto, papá! ¡Regresé!

En el carruaje, Ou Yang Yi cerró los ojos con dolor. Esto tardó mucho en llegar.

Yuan Wei Xiu frunció el ceño levemente, pero pensó que Shui Yi Yi estaba emocionada de regresar después de haber estado fuera durante tanto tiempo. De hecho, estaba un poco emocionado. Finalmente habían llegado. Con la ayuda del Palacio Shen Shui, su viaje para encontrar la medicina podría ser más sencillo.

Con estos pensamientos en mente, Yuan Wei Xiu condujo el carruaje con entusiasmo, pero se detuvo en la entrada. – ¿De dónde eres?

Yuan Wei Xiu frunció el ceño. ¿Había estado Shui Yi Yi demasiado emocionada por no haber explicado esto? –Somos amigos de tu joven mayor.

Los guardias se miraron unos a otros. Cuando la joven mayor pasó, no había dicho nada. Pero, la joven mayor se había bajado de su carruaje. Tal vez realmente eran amigos de la joven mayor.

Los guardias discutieron esto y luego saludaron a alguien en el lado opuesto.

El puente colgante fue bajado. Yuan Wei Xiu condujo el carruaje hacia adelante lentamente.

Yuan Wei Xiu miró a su alrededor. Este Palacio Shen Shui era más como una pequeña ciudad. La ciudad estaba rodeada de agua y el río tenía entre 7 y 8 pies de ancho. Lo único que cruzaba esto era el puente colgante.

Después de que entraron en la ciudad de Shen Shui, Yuan Wei Xiu no vio a Shui Yi Yi. Pensó en ir directamente al señor del Palacio Shen Shui, pero pensó que no era apropiado. Por lo tanto, encontró una posada en la ciudad para quedarse.

Después de lavarse y cambiarse de ropa, Yuan Wei Xiu asintió con satisfacción. –Yi'er, como tu maestro, te llevaré a visitar a tu futuro suegro.

Ou Yang Yi sonrió amargamente. ¿Futuro suegro? Ja ja. La actitud de Yi Yi ya había explicado todo, ¿pero su maestro aún no lo había visto? – ¡Maestro, olvídalo!

– ¿Cómo puedo olvidarlo? Esto es etiqueta. ¡Además, para encontrar el Ungüento Intermitente de Jade Negro, todavía necesitamos la ayuda del Palacio Shen Shui!– dijo Yuan Wei Xiu con seriedad. Mucha gente los ayudó en el camino, pero la mayoría les dio dinero y comida, nada más. Yuan Wei Xiu sabía que era imposible encontrar el ungüento intermitente de jade negro solo, por lo que el Palacio Shen Shui era su única esperanza. Definitivamente no podía olvidar esto.

Ou Yang Yi también sabía la razón por la que Yuan Wei Xiu insistió en visitar el Palacio Shen Shui, lo que lo hizo sentir más avergonzado. Todo fue por él.

El resultado fue exactamente como esperaba Ou Yang Yi. Los guardias de la puerta no los dejaron entrar, incluso cuando Yuan Wei Xiu dijo repetidamente que eran amigos de la joven mayor.

– El anterior señor del palacio murió. El nuevo señor del palacio ha sucedido en el cargo. Los ociosos y otros no pueden entrar. Ya te estamos dando la cara, dejándote entrar a la ciudad. ¿Ahora quieres entrar en el palacio? ¡Date prisa y vete!– dijo el guardia con severidad.

Yuan Wei Xiu había estado viajando por las tierras durante tantos años y nunca había recibido tal trato. Inmediatamente se enojó.

En ese momento, una niña pequeña apareció de repente en la puerta. –Hermano mayor Yang, realmente son los amigos de la joven mayor. La señorita mayor me ha mandado a decirles algo y darles algo. ¡Déjame salir!– dijo la joven criada. Levantó el equipaje que sostenía.