Capítulo 19

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Capítulo 19 | "Libre"

Madison Davis

No sé cómo terminé en ese punto de mi vida, pero me encuentro envuelta en los brazos de Oliver quien trata de calmar lo que reconozco como una de las desesperaciones más puras que he sentido. Creo que susurra palabras en mi oído intentando calmarme pero no logro escucharlo completamente.

Tengo un jodido hermano.

Alek Morosov.

Que resulta está trabajando con mi padre mientras dirige sus negocios en Rusia.

Genial.

Mi mente recopila todos los recuerdos de mamá que tengo sobre como ella le rogaba a papá ver a Alek, que descubro ahora se trata de mi hermano. Como papá hablaba con sus hombres sobre el entrenamiento de Alek y que todo avanzaba según los planes. Recuerdo cómo mamá siempre estaba viendo esas malditas fotografías en esa caja, como lloraba tantas veces.

¿Por qué nunca me lo dijo? ¿Qué más me ocultaste, mamá?

Veo como Kace y Connor toman las fotografías que se han desperdigado por el suelo luego de mi arrebato mientras calmo mi respiración poco a poco. Oliver finalmente me libera de la prisión entre sus brazos y corre a ver las fotos que sus hermanos analizan.

Los ojos de Kace suben de las fotos a mi rostro, hace el recorrido varias veces mientras su ceño se frunce.

— ¿Quién es Annika Morosova, Madison? — cuestiona Connor.

Maldigo entre dientes, no puedo creer que Alicia Davis, mi mamá, me ocultara algo tan jodido como tener un hermano.

— Madison.... — la advertencia de Kace no me pasa desapercibida.

— Soy yo.

— ¿Tu? — cuestiona Oliver confundido.

— Sí, es mi nombre — explico — Madison Annika Morosova Davis, ese es mi nombre real.

— Eso quiere decir que...

— Sí, Alek Morosov es mi hermano.

No he dormido bien, no he comido como debería, no he levantado mi culo de esta silla y malditamente tampoco he conseguido alguna información sobre donde está Alek Morosov y cómo luce ahora. Llevo cuatro días en esta rutina.

Muñeca, creo que ya te has involucrado lo suficiente, venga, toma un descanso.

No volteo ante la voz de Connor, aunque por su sombra puedo deducir que se encuentra en el marco de la puerta, he estado revisando día y noche los expedientes que Kace me ha dado pero no encuentro nada, nada que no supiera ya ni mucho menos nada que me funcione ahora.

— No lo entiendo — suspiro mientras hecho mi cabeza hacia atrás — ¿Por qué mamá no me lo dijo?

No responde, sólo me deja divagar y expresarle todas las dudas que tengo ahora, como si él pudiera resolver todos mis problemas.

— ¿Por qué mamá nunca me lo dijo? ¿por qué nunca lo conocí? ¿por qué no nos criaron juntos? — bufo frustrada — Él trabaja para Egor, ¿quiere decir eso que papá nunca fue malo con él? ¿él tuvo algo de papá que yo nunca tuve? ¿quiere decir eso que Alek también está cazándome? ¿quiere matarme?

— Nunca lograrán dar contigo mientras estés con nosotros.

— Tampoco tengo otra opción, ¿o sí, Connor?

Mis palabras lo dejan quieto unos segundos mientras las analiza. Yo también lo he pensado un poco, hemos avanzado en lo que sea que surge conmigo y sus hermanos, es muy notable la tensión sexual que manejamos tanto él y yo como con sus hermanos, ya no les temo, sé que no me lastimarán al menos por ahora y he logrado ir generando una especie de confianza hacia ellos.

As de CorazonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora