Simplemente Eternos ~ KookMin ~ Tae-Kai-Gyu ~ HyunIn ~ Omegaverse

Capítulo 23⁓En otra vida

Maratón final 1/9

TaeHyun y Kai miraron a HyunJin llegar de la mano con JeongIn, ambos riendo y felices. La joven pareja había desarrollado la bonita y sencilla tarea de llegar juntos al trabajo. HyunJin madrugaba un poco más e iba por el menor a su apartamento. Dejando así que BeomGyu y Jimin fueran los únicos Omegas en compartir coche.

Así que, los mejores amigos Alfas, se quedaron parados juntos a la puerta esperando por su Omega. Cuando, pasados veinte minutos de la hora de entrada, el Omega no había llegado; decidieron golpear gentilmente la puerta de la oficina de Jeongin.

-¿Sabe dónde está el señorito Choi? -JeongIn sonrió desde su posición entre los brazos de HyunJin. El Alfa había tratado de alejarlo por vergüenza y a la vez respeto en el trabajo, pero el Omega se había negado a ser soltado en cuanto supo que eran sus subordinados.

-Jimin nos avisó ayer de que entró en celo, está pasándolo con JungKook. -Los tres Alfas asintieron sabiéndolo pues también habían recibo un mensaje de su nuevo amigo JungKook. -BeomGyu se suponía que vendría por su cuenta. Es raro que no haya llegado ya. -Frunció su ceño. -Lo llamaré, mientras tanto ir a su oficina y comenzar a trabajar.

Eso hicieron, aún si sus lobos gruñía en desacuerdo mientras se dirigían a su destino. Sus Alfas interiores queriendo ir a toda prisa a donde fuera que estuviera su Omega y comprobar su bienestar.

Sumidos en el silencio de la oficina, BeomGyu llegó más de media hora después envuelto en capaz, innecesarias por el tiempo del momento, de ropa. Su pelo ligeramente despeinado y el rubor en sus mejillas dejando en claro que el Omega tenía fiebre.

-¿Estás bien? -Preguntó apresurado Kai.

-Solo es un resfriado corriente. -Respondió restando importancia a su malestar.

-Los resfriados corrientes no lucen así. -Negó Tae con una notable mueca de disgusto.

-Ya he tomado medicación, vamos a preparar la clase de mañana. -Dijo ignorando a los mayores y tomando asiento en el pequeño sofá de dos plazas de su santuario. -Lo de mañana es una charla importante y debemos tomarnos en serio nuestro trabajo.

-Sí, pero... -Trató volver a negarse Kai.

-Pero nada. -Le interrumpió, su mirada sería pero cansada que no dejaba más objeciones a tomar. -Lo prepararé con vuestra ayuda o sin ella. -Ambos Alfas asintieron finalmente rendidos ante la autoridad de su superior y su Omega. -¿Habéis podido preparar el informe preliminar que os pedí sobre las reencarnaciones?

-Sí. -La charla que darían al día siguiente iría dirigida en especial a las reencarnaciones de los lobos siglos después, como podían influenciar en la personalidad del humano en la antigüedad y sociedad en la que vivieron. -Incluso hemos hecho un pequeño resumen de los síntomas que pueden ocasionar las vidas pasadas dañadas en los humanos y lobos.

-Perfecto. -Murmuró reposando su espalda en el sofá. -Por favor, ir pasando todo a limpio y juntarlo con todo esto. -Señaló su portafolios.

Ambos mayores comenzaron a trabajar entre pequeñas conversiones para organizar el dirigir de modo ameno, pero informativa, la charla. Llegado a un punto casi culminada, cuando faltaba simplemente dar el cierre final, dejaron su motivación por su trabajo para mirar a BeomGyu. El Omega lucía agotado incluso dormido, sus mejillas rojas al igual que sus labios inflamados por la fiebre. Se había recostado en el sofá y estaba encogido abrazándose a sí mismo.

TaeHyun se puso en pie, retirando rápidamente su chaqueta de traje y dejándola sobre el pecho de Beomgyu. Kai copió su gesto dejando la suya sobre las piernas del Omega. Sin embargo, aún entre sueños, Choi tomó la chaqueta de Kai y la subió hasta estar también en su pecho. Su cuerpo visiblemente más relajado mientars abrazaba ambas chaquetas y enterraba su nariz en ellas.

Kai sonrió, enamorado, acercándose hasta quedar de cuclillas junto el rostro pálido de mejillas rojas. Era glorioso ver que BeomGyu no se podía negar a ellos en sus sueños cuando era vulnerable y no tenía su orgullo y razón, que aún así ambos adoraban, brillando.

-Me mata verlo así. -Murmuró, sus manos picando por acariciar su cabello. -Debería estar descansando.

-Es comprometido, es leal a sus creencias. -Dijo TaeHyun tomando la misma posición que su mejor amigo. -Me gusta. -Sonrió, sencillo y real. Kai era de los pocos afortunados en conocer esa sonrisa.

-A mí también. -Copió su feliz sonrisa. -¿Crees que nosotros tuvimos la suerte de estar con BeomGyu antes? -Apoyó su cabeza de lado en el hombro del rubio.

-Creo que tú y yo nos conocemos de antes Kai. -Asintió, dando caricias a al pelinegro con su propia cabeza. -Siempre hemos sabido que nuestra conexión es superior a la de cualquier otros Alfas. -Enfatizó su último punto. -Y no creo que sea solo por compartir Omega.

-Tal vez le hicimos daño Tae. -Susurró con un nudo en la garganta. -Por eso él no confía en nosotros y huye a su vez. -Un pequeño silencio roto por su siguiente declaración fría. -Tal vez le rompimos el corazón.

-Fuera o no así, en esta ocasión, no pasará. -Prometió, entrelazando sus dedos con los de su mejor amigo y al fin, entre ambos, acomodando el cabello de BeomGyu fuera de su rostro.

Lo que ninguno de ellos sabía, era que el Omega lo había estado escuchando todo con la congoja y arrepentimiento de sus actos por alejarlos en su ser.

Nota Autora: Bueno, lo prometido es deuda. Vengo con el final de esta historia y por ende de la trilogía Eternos. Porque sí, es un trilogía, ya que personalmente no considero DIGNA esta secuela de formar parte de Eterno Cachorro, ni de Eternos Destinados, ni de Eterna Manada. No es que esté decepcionada con la historia, trama o el resultado final; pero sé que podría haber sido mucho mejor y más brillante. Sin embargo, me recuerdo y os recuerdo, que esto solo fue la extensa necesidad de no dejar a mis bebés marchar. Ahora, que todos vais a poder leer el final definitivo de ellos, solo espero sacaros una sonrisa y haceros felices mientras lo leíais. Iré dejando notitas curiosas sobre esta historia en los siguientes últimos capítulos.