Simplemente Eternos ~ KookMin ~ Tae-Kai-Gyu ~ HyunIn ~ Omegaverse

Capítulo 1~Aromas

JeongIn caminaba por los pasillos de la empresa, en su mano revisaba una y otra vez los mensajes de su hermano mellizo Jisung mientras su mejor amigo Jimin le discutía sobre la nueva incorporación que el consideraba innecesaria en la empresa.

-In, ¿me estás escuchando? -El llamado elevó su vista de su móvil y sonrió al rubio.

-Lo siento Hyung, ¿qué me decías? -Jimin sujetó su mano y entrelazó sus dedos a la par que entraban a la sala de juntas.

-Que esto es una empresa dirigida por Omegas, así se creó y con ese fin. -Inició. -Que ahora quieran incluir Alfas a la empresa me pone de los nervios.

-¿Desde cuándo eres tan Omeganazi? -Rebatió JeongIn arrugando su nariz.

-Eso no es cierto. -Se quejó Jimin.

-Pues deja de andar de exagerado. -Rio el pelinegro abrazando al rubio y besando su mejilla hasta hacerlo reír a él también.

-Chicos, comportaos. -La voz de su jefe, anunciando su entrada a la sala de juntas, les hizo separarse asustados en un primer instante.

Park Jimin, un rubio y lindo Omega de mejillas mullidas y labios gruesos, era uno de los tres jefes de la empresa "Eternos". Su labor principal eran los cachorros, sus principales clientes como Auror, los cachorros de lobos desparecidos.

Yang JeongIn, un pelinegro y adorable Omega de sonrisa brillante y ojos pequeños, era el segundo de los tres jefes de la empresa "Eternos". Su labor principal era dirigir a los profesores del hala estudiantil que comprimía las enseñanzas privadas como Aurores. Los casos que más solía atender JeongIn eran los de lobos nuevos en sus primeras vidas.

Choi BeomGyu, un hermoso y de cabellos largos Omega con sonrisa amplia y nariz de botón, era el tercero de los jefes de la empresa "Eternos". Su labor principal siendo la de gestionar una armonía entre todos y teniendo como principal casos a atender los de Omegas en cinta.

-Beom, no seas aburrido. -Hizo puchero JeongIn, sujetando el codo de su amigo para incluirlo en el abrazo. Beomgyu se removió y resopló fingiendo fastidio antes de corresponder el abrazo siendo la parte central, el relleno, de ese abrazo de sándwich.

-¿Por qué van a entrar Alfas a la empresa? -Murmuró Jimin escondiendo su rostro en el cuello de Beom, este lo hizo en el de JeongIn.

-No entran a la empresa. -Susurró Beom. -Son asociados, nosotros somos la mayor empresa de enseñanza privada de Aurores, pero casi todos nuestros estudiantes son Omegas entonces debemos tratar de llamar la atención de Alfas para ser Aurores.

-Los hombres que vienen son Alfas Aurores y vienen a contarnos su experiencia en el sector y ayudarnos con la escuela. -Añadió JeongIn, Jimin suspiró y asintió. -Será un llamado a la normalidad entre Alfas y Omegas. -Los tres Omegas cerraron sus ojos arrullándose en el aroma familiar de sus amigos desde la infancia.

-Perdón, ¿se puede? -Cuatro voces resonaron en perfecta armonía, perfecto eco de tonos graves y rasgados a la par que cinco aromas inundaban la sala de juntas.

Los Omegas se separaron quedando de frente a esos cuatro Alfas enfundados en trajes entallados.

Jimin no pudo evitar sonreír como bobo, con sus mejillas abultadas y sonrojadas, achicando sus ojitos almendrados en medias lunas; una sonrisa ciertamente infantil que hizo sonreír, mostrando más sus palas superiores que a su vez hicieron que tres arruguitas aparecieran a los lados de sus ojos a JungKook. El algodón de azúcar y las gominolas de fresa volviendo a reencontrarse con el chocolate puro y la hierba húmeda.

Beom cogió una gran bocanada de aire que mantuvo en sus pulmones cuando estos se impregnaron del aroma a pino y madera que aquellos dos Alfas desprendían. Tae ansiando abrazar y rodear a ese Omega pelinegro entre sus brazos, Kai sintiendo a su lobo aullar preso de la emoción del aroma a malvaviscos tostados de ese Omega mezclado con el suyo propio y el de su mejor amigo de pino y madera.

JeongIn se vio sobrecogido por las emociones, su pecho se encogió a la par que su lobo sollozaba y su aroma a miel y dulce de leche aumentó en el ambiente. Ante él un rubio con el cabello ligeramente trenzado lo miraba embobado, con una sonrisa ladeada que fue aumentando y aumentando hasta hacerse una profunda y real. JeongIn copió su sonrisa cuando ese lugar bajo el ojo izquierdo del Alfa desapareció al este sonreír amplio, el aroma a lima y menta calentando su alma.

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Nota: hasta aquí por hoy, no tengo más tiempo, actualizaré en unos días ❤️❤️❤️ gracias por tanto