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Capítulo 37: Reunión

"¿Porqué me estas diciendo esto?" Qin Yi preguntó directamente.

Yun Huan se puso de pie y frunció los labios. "Solo estoy manteniendo la buena relación dentro del equipo".

Después de hablar, Yun Huan levantó sus largas piernas y se fue.

Qin Yi se rió entre dientes y luego se dirigió a la cocina para preparar el desayuno.

A Qin Yi le gustaba mucho la comida hecha con harina de trigo y estaba preparada para hacer albóndigas para el desayuno.

Su mente se disparó y tres paquetes de albóndigas congeladas aparecieron en su mano.

En solo un momento, las albóndigas translúcidas y de aspecto delicioso estaban listas. Las albóndigas del supermercado no eran grandes, pero el relleno era bastante sustancioso.

Qin Yi acababa de preparar la comida cuando Lin Qing olió el aroma y entró.

Cuando vio las albóndigas rodando en la olla, los ojos de Lin Qing brillaron pero desaparecieron en un instante.

Lin Qing sonrió mientras miraba a Qin Yi. "Qin Yi, eres increíble. Incluso puedes hacer que las albóndigas huelan tan bien".

Después de hablar, Lin Qing se inclinó para olerlo y salivar. No dejó de alabar a Qin Yi. "Realmente huele tan bien".

Qin Yi le pasó a Lin Qing algunos tazones y palillos. "Ayúdame si quieres comer pronto".

Lin Qing estuvo de acuerdo de inmediato y se puso a trabajar rápidamente.

Cuando Qin Yi trajo el último tazón de albóndigas a la sala de estar, el equipo de cinco de Yun Huan estaba presente.

Qin Yi levantó las cejas y miró al hombre de aspecto tonto en el sofá y al otro con una exquisita cara de muñeca.

Estos dos deberían ser Du Ruan y Chu Mohe.

Antes de que Qin Yi pudiera hablar, ese hombre de aspecto tonto se acercó y tomó el plato de albóndigas de la mano de Qin Yi.

El hombre se rascó la cabeza y sonrió de manera tonta. "Mi nombre es Du Ruan. Gracias por salvarnos. Serás el benefactor de Du Ruan a partir de ahora. Siempre que Benefactor necesite algo, yo, Du Ruan, le devolveré su amabilidad incluso si tengo que escalar una montaña de espadas o sumergirme en un mar de llamas".

Du Ruan parecía muy serio cuando dijo eso y eso también fue lo que pensó.

Sabía lo peligrosa que era la situación en ese momento y, para ser honesto, si fuera él, no los habría salvado.

No sabía cuál era el motivo de Qin Yi, pero definitivamente le devolvería su amabilidad.

Además, la mirada de Qin Yi era clara y podía decir que ella no era una persona malvada. Además, ellos mismos no eran muy buenas personas.

Chu Mohe miró a Qin Yi durante bastante tiempo con la cabeza inclinada. Entonces sus labios rosados ​​se movieron ligeramente. "Tienes la misma aura que el Jefe".

Qin Yi levantó las cejas. '¿Qué quiere decir él con eso?'

Chu Mohe se levantó lentamente y de repente abrazó a Qin Yi. Su cabeza se frotó contra la de ella mientras su exquisita cara de muñeca se sonrojaba. Un par de ojos llorosos brillaban. "En, me gustas".

Qin Yi frunció el ceño. No le gustaba que otras personas se acercaran tanto a ella, así que empujó a Chu Mohe con una mano y miró con desdén.

Lin Qing estaba tan sorprendido de que a Chu Mohe le gustara tanto Qin Yi. Su mandíbula casi cayó.

Renacimiento de la Reina del Apocalipsis: ¡De rodillas, joven emperador!  Where stories live. Discover now