Capitulo 32: En contra de nuestros hermanos.

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En algún punto entre la RSS Bielorrusia y la RSS de Lituania.

En el espeso bosque unas sombras se movían sin hacer ruido, la noche se asomaba ya en el horizonte y todo era calma.

Un grupo de 20 hombres un tanto peculiares se trasladaban para cumplir con una misión: liquidar a los mandos independentistas.

Éstos eran los spetsnaz del Departamento Central de Inteligencia (GRU) que habían sido enviados por el mismísimo Secretario general para comenzar a desmontar éste intento de desestabilizar a la URSS. Nadie, a excepción del Alto Mando soviético sabían dónde estaban los líderes de la rebelión lituana por lo que no iban a perder la oportunidad de acabar el problema de raíz.

Varios aviones de combate pasaban esporádicamente, a éstas alturas los aeropuertos civiles y militares tomados por los rebeldes habían sido destruídos ataques de la Fuerza Aérea Soviética, por lo que ahora probablemente estaban haciendo labores de bombardeo.

El comandante de la unidad era un mayor con amplia experiencia en éste tipo de escenarios por lo que ciertamente el trabajo podría considerarse hecho, el único problema radicaba en qué era territorio soviético. Ninguna unidad desde la Gran Guerra Patria había sido asignada para éste tipo de misiones y menos aún en un momento tan crítico como lo es ahora.

El avance fue relativamente rápido, debido a que gran parte de las fuerzas de los insurrectos combatían a las fuerzas que seguían fieles al gobierno soviético en Lituania, mientras una mínima parte se dedicaba a hacer labores de patrullaje preventivo.

La noche cayó finalmente y éste sería el momento de mayor avance, iban trotando sin descuidar ni un segundo sus alrededores. La niebla poco a poco se hizo presente en la atmósfera dando una oportunidad de ir más directamente hacia su objetivo que aún se encontraba muy lejos.

Nadie hablaba ni una sola vez, debido a que solo estaba autorizado siempre y cuando fuera estrictamente necesario y el comandante acataba la orden al pie de la letra.

Repentinamente...

<"Psss... Contacto dentro de mi campo visual">. Sonó la radio que estaban conectados a un equivalente militar de los auriculares.

"Recibido, rodea y que no vea". Ordenó el mayor.

A diferencia de otras misiones no era del todo necesario matar a los patrulleros, incluso si se trataban de traidores; de cualquier forma la patria se lo demandará.

El efectivo del spetsnaz siguió la orden y pronto pasó de la posición del vigilante. Probablemente estaban cerca de un campamento.

<"Vehículos acercándose por carretera, al parecer estamos más cerca de Vilnius de lo que se esperaba">. Avisó alguien que se había adelantado.

"¿Qué recomienda hacer?. Estamos en la dirección equivocada". Preguntó uno de sus subordinados.

"Hagan un perímetro, haré revisión de mapas junto al de navegación".

La orden de ejecutó según lo esperado, unos diez minutos después se ordenó reagruparse.

"Estamos aún algo lejos, podemos avanzar unos 10 km antes del amanecer y posterior a eso instalaremos el campamento donde mejor convenga".

Oriente: La Unión Soviética.Where stories live. Discover now