Lo Hice Por Tu Bien. (Sesshome)

40

Después de dos días como humano Nao había vuelto a la normalidad, pero con su nueva apariencia resultó encontrar nuevas cosas que no pensaba que tenía como enamorarse.

- Kirinmaru-sama, ¿Cómo podría un Daiyokai saber si está enamorado? - preguntó curioso.

- ¿Acaso te gusta alguien? - preguntó mirándolo.

- ¡¡No!! - exclamó sonrojado - Bueno no sé -

- Entiendo, pero realmente no lo sé, porque jamás me he enamorado - respondió - Solo puedo decirte que cuando un Daiyokai o yokai se enamora será para toda la vida -

Nao asintió entendiendo que el amor era algo muy importante para los Yokais.
En la cabaña de Kagome, está se encontraba preparando la comida para su familia, pues a pesar de que su pequeña bebé tuviera algunos meses su crecimiento era rápido.

- Jamás pensé que un bebé hanyō creciera un poco más lento - confesó sonriendo.

- Secerdotisa dígame, ¿Cómo era Nao de pequeño? - preguntó Kin'u.

- Bueno el era muy serio y a la vez alegré, también era muy amable y educado - respondió sonriendo - Recuerdo que todas la noches lloraba por no tener a su padre con el como los demás -

- Debió ser muy difícil - mencionó Gyokuto.

- Lo fue, pero ahora todo está bien cuando Sesshomaru despierte está familia estará bien - dijo sonriendo.

Las dos gemelas asintieron, pero el ruido de la entrada las hizo mirar a Rin quien entraba con Sango y su pequeña bebé de dos semanas de nacida.

- Rin, Sango - nombró - ¿Por qué no me dijeron que vendrían? -

- Lo siento amiga, pero queríamos sorprenderte - respondió sonriendo.

- Gracias, realmente me siento feliz de que hayan venido - confesó.

- No tiene porqué decir eso señorita Kagome, además Seijun le gusta estar con Hanae - dijo.

- Lo sé, parecen casi hermanas - mencionó.

- Vaya es la primera vez que no veo a Inuyasha a Nao o a ese Kirinmaru - confesó Sango.

- Bueno Inuyasha dijo que debía ir con Kōga hacía las fronteras, ya que debían resolver un conflicto contra otros Yokais, Nao y Kirinmaru-sama se encuentran revisando la aldea, pero no tardan en volver - explicó.

- Que lastima y yo que quería molestar a mi futuro cuñado - mencionó Gyokuto.

Aquellas palabras hicieron que Kin'u se pusiera realmente roja y esto hizo reír a las damas que se encontraban.

- A mi también me gustaría que Kin'u fuera pareja de mi Nao, pero todo queda en el - confesó.

- Pues a Kin'u le gusta Nao y supongo que sí Nao-kun se anima terminemos siendo las suegras amiga - dijo sonriendo.

Kin'u realmente estaba roja por las palabras de todos, pero mientras todas hablaban fuera de la cabaña Nao se encontraba escuchando la conversación y las palabras que su madre había dicho hacían que le latiera el corazón.

- Veo que esa humana realmente tiene el valor seguir ahí - mencionó.

- Kin'u siempre es así, la verdad desde niños siempre nos dijeron que haríamos una buena pareja en el futuro - dijo - Y después de lo que pasó con papá ella me besó -

- ¿Y tú qué sientes por ella? - preguntó mirándolo.

- No lo sé - respondió mirando a Kin'u - La verdad cuando era humano y ella estaba conmigo me sentía feliz y se me aceleraba el corazón, también sentía celos de ver cómo alguien más se acercaba a ella -

- ¿Y ahora qué sientes? - volvió a preguntar.

- La veo y me alegra de verla feliz, cuando está triste me molesta, cuando la veo nerviosa me da curiosidad y cuando me sonríe Shingo está feliz - respondió.

- Realmente eres más expresivo que Sesshomaru - mencionó.

- ¿Eh? -

- Nada, debemos entrar - dijo.

Nao asintió y sin interrumpir la alegría siguieron la plática, pero esta vez se lanzaron contra Nao haciendo que levemente se sonrojara.

- Realmente está creciendo este niño - pensó Kirinmaru.