11° Mi pasatiempo

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Akem

— ¿Daddy? — elevo la voz, me sorprende mi propia reacción, pero no me gusta que le diga así.

— Sí, mi daddy — lo reitera ella — así le digo de cariño, ¿A poco no papi?

— Ss.. si mi niña — dice apenado — bueno volviendo al tema, ¿tú crees que por ser directora, dejarías tus obligaciones? Pues estás muy mal jovencita.

— Señorita Duarte — la miro fijamente — usted seguiría como hasta ahora, la diferencia sería que tendría que ir a congresos nacionales e internacionales para representar el hospital; es mas hasta yo la podría acompañar — sonrío

Me queda viendo por un momento, analizando mi propuesta.

— O te acompaño yo mi niña — contraataca Ivan — con tal de que tu te sientas cómoda te acompaño para donde tú quieras.

— Gracias señor Ivanov pero ya di mi decisión.

— ¿Por qué no piensas mejor la oferta y el lunes me das una respuesta? — secundo.

— Exacto mi niña piénsalo bien

— Está bien daddy el lunes a temprana hora les digo qué decisión tomé.

— Bueno, entonces yo me retiro — me levanto del sofá — tengo otros asuntos que atender, la veo el lunes — le guiño un ojo — hasta luego señor Lombardi.

— Hasta pronto señor Ivanov.

Salgo de la oficina dejando ahí a mí diosa con Iván. No me gusta el trato que él tiene hacia ella, la mira con un brillo en los ojos. La forma en que él también se ofreció a acompañarla no fue normal, voy averiguar que se tiene entre manos, no voy a permitir que me quiten algo que me llama la atención.

Saco mi móvil del saco del traje y le escribo a Boris, mi mano derecha y vicepresidente de Fármacos Industry International Ivanov.

¿Ya está todo listo para el embarque del domingo?. No quiero fallas esta vez.

Akem I.

Inmediatamente mi móvil vibra en mi mano anunciando un nuevo mensaje.

Tranquilo amigo, todo ya está preparado... El domingo a las 22h le montamos la trampa a los Medinas.

Boris. L

Guardo el móvil en el saco y voy directo al ascensor. Tengo un ajuste de cuenta que atender.

[...]

Me encuentro en mi ático, viendo por el gran ventanal toda la ciudad de Barcelona, bebo un trago de mi whisky. De reojo veo el piano de cola color negro. Me encamino hacia él y me siento.

Desde que era niño mi pasatiempo siempre fue tocar el piano, tocarlo me libera de todos mis problemas. Tengo 22 años sin tocarlo, cuando mi padre murió se me quitaron las ganas. Dimitri Ivanov era un hombre al que le encantaba la música clásica, mi madre Ágata Ivanova y mi padre siempre fueron mi único público. Los únicos que saben que esto me apasiona son mis padres, mi nana y Boris.

Destapo el piano y veo las ochenta y ocho teclas, acaricio cada una, se me viene a la mente unas de mis melodías favoritas.

Toco "Für Elise Nighmaret de Beethoven", es una melodía llena de eufonía. Me dejo llevar por el momento, mis manos fluyen a manera que voy tocando; de repente se me viene a la mente a mi diosa encima de su escritorio gritándome que quiere más, la azoto varias veces y gime como una posesa.

Enredo mi mano en su melena negra y la jalo, se arquea cada vez que me la follo como un animal. La melodía acaba y abro los ojos, mi respiración parece una locomotora de lo agitado que estoy. Bajo la mirada y me encuentro con una gran erección en mi pantalón, siento que la polla me va a explotar. Mi corazón dicta de manera descontrolada.

¿Que haz hecho conmigo Arabella Duarte?

— Akem me alegra que estés tocando otra vez — me dice mi nana. Ella vino conmigo desde Rusia, mi madre se quedó allá para estar al pendiente de los negocios familiares.

— Nana me asustaste, pensé que te habías ido a tu departamento — me volteo para encararla. — Ninguno de los voyevikis me informó que estabas aquí.

— Oh se me había olvidado decirte mi детка, mañana tengo consulta con el cardiólogo y como el hospital me queda más cerca aquí me quedé — explica — espero que no te moleste.

— Para nada nana — le sonrío

— Y ¿Quién te inspiró para que volvieras a tocar el piano? — me mira burlona — no me digas que fue una chica — dice entusiasmada — ¡ayyy ya mi niño consiguió el amor!.

— Por Dios nana déjate de tonterías — la miro serio — toqué porque se me salió de los huevos — digo molesto.

— Mira niño del demonio a mi no me hables así, que yo te lavé el culo cuando eras un mocoso — levanta la voz.

— Entonces no digas cosas que no son joder — me levanto, agarro el vaso de whisky y me lo tomo de un solo trago. — Voy a salir.

— Y tú deja de ser tan cabezota — me regaña.

La miro seriamente y me voy a mi habitación.

Ya ni uno en su casa puede estar tranquilo.

Necesito un baño con agua fría para bajar esta erección, ni loco me hago la paja; no soy un hombre necesitado para hacer tan grata tontería. Tengo mujeres detrás de mí para hacer esa nefasta locura.

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Traducción:

детка: Bebé.

CENIZAS +18 [1] ✓ [Borrador]Where stories live. Discover now