Capítulo 4: Chico en el baño de mujeres.

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Me encuentro en el enorme edificio del hospital cuando debería estar en mi casa descansando o viendo una serie de televisión, que es lo que más me gusta ya que ni tampoco puedo salir a tirar mis fotos, pero hace dos días que no ha parado de llover y la tormenta no le gusta estar a mi favor. Alan había llamado para decirme que no me podía ir a buscar hasta que no se detenga la lluvia, y como es temporada baja, creo me voy a quedar más tiempo del que debía.

Estoy sentada en una pequeña banca a fuera de mi habitación con unas gafas de sol puestas. Sé que es bastante raro tener gafas de sol dentro del hospital, pero no tuve más opciones gracias a que las personas me miraban asustadas, como si yo fuera un fenómeno recién salido de un laboratorio secreto. Si piensan que estoy sola, pues no, no lo estoy, siempre tengo a Anna de mi lado en todo momento, es mi amiga aquí en la edificación. Además de estar en buena fase recuperativa, en algunos momentos ayudo con algunos pacientes, como si fuera una enfermera auxiliar o algo así, me gusta, me mantiene ocupada y eso es bueno para mí porque odio estar en un lugar estancada sin hacer nada.

Por el pasillo escucho el típico ruido que causan los tacones al caminar y visualizo a Anna que se acerca.

-Beatrice necesito tu ayuda - Suelta Anna con rapidez, traía una foto de alguien en sus manos.

Hoy lucía muy bonita, se recogió su larga cabellera en una coleta alta, maquillada de manera sencilla resaltando sus celestes ojos y aún trae esa sonrisa de inocente y tierna. Su típico uniforme de enfermería no podía faltar.

-Claro, ¿En qué te puedo ayudar? - Digo sacándome las gafas para limpiarlas con un pequeño pañuelo azul que estaba en mi bolsillo.

-Se acaba de escapar un paciente del área 23, es un chico de tu edad y se llama Dylan, todos los enfermeros lo están buscando desesperadamente, pero aún no lo han encontrado- Dijo con nervios. Ella me entrega la foto de claramente un chico, era castaño y de ojos verde oliva, casi idénticos a los de tía Rosa, además se notaban algo de pecas en las mejillas, sus dos hoyuelos se marcaban con la amplia sonrisa del muchacho.

-¿Y qué quieres que haga?- Le pregunto sin apartar mis ojos de la foto; el chico es lindo y tiene un gran parecido con el actor Dylan Kingwell, hasta tienen el mismo nombre.

Coincidencia, no lo creo.

-Me gustaría que lo buscaras por esta zona y si lo encuentras tráelo a la sala de operaciones- Agrega para después irse--Con algo de rapidez--sabrá dios a donde.

-Claro, no hay problema- Susurro para mi misma guardando la foto en uno de los bolsillos del pantalón que me prestaron del hospital.

Me levanté de la banca y caminé adentrándome a las miles de puertas que hay en esta área. Primero entré en las habitaciones y preguntando algunos de los pacientes si por casualidad habían visto al chico de la foto; negativo. Seguí la búsqueda en los almacenes y por supuesto en las salas de espera, tal vez busqué en las zonas prohibidas sin ser detectada por la seguridad, y el resultado es lo mismo, nada. Ni rastro de aquel chico llamado Dylan.

Me dolían los pies y estaba demasiado cansada, tan sudada que suelto maldiciones de vez en cuando. El hospital tenía calefacción y yo de estúpida me puse un abrigo bastante cubierto, tanta búsqueda para nada. Quizás el chico logró salir del edificio y seguro está en su amada casa, con su suave mantita y disfrutando de sabrá que delicia casera; lo que yo daría por estar en estos momentos en mi casa y ver mi serie favorita.

Entré al baño de el final del pasillo y me acerqué al lavamanos, abrí la llave del grifo permitiendo que un montón de agua saliera, me quito las gafas y me humedezco el rostro, no había nadie en el baño para que no le moleste o se asuste al ver mis ojos. Entonces escuche un sonido, más bien un sollozo, como si alguien estubiera llorando. Entre todas las puertas logré ver los pies de alguien encerrado, abrí la puerta del cubículo siguiente y me senté de espaldas en el suelo. Parecía que se encerró a propósito, yo lo hacía en el baño de la universidad cuando quería estar sola o cuando me molestaban.

Beatrice: La Nueva Identidad©( Historia Completa)Where stories live. Discover now