𝗖𝗔𝗣𝗜𝗧𝗨𝗟𝗢 𝟯𝟭

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James estaba celoso, sólo que aún no lo sabía

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James estaba celoso, sólo que aún no lo sabía.

Se encontraba detrás de unos estantes de la Biblioteca mientras miraba cómo Alexandra le explicaba a Macmillan algo de Pociones.

-Eso es acoso. -dijo Remus a su lado.

James se sobresaltó y golpeó su codo contra el mueble por lo que reprimió un grito mientras su rostro enrojecía.

-No se de qué hablas. -dijo fingiendo que buscaba un libro.

-Alex te gusta.

-Oh, no. ¿Tú también con eso? Sirius ya te llenó la cabeza.

-Bien, como digas.

-Alexandra es sólo una amiga, no la veo como algo más. Punto final. -dijo cansado.

Ambos dejaron de hablar y Remus obligó a James a abandonar la biblioteca, ya que lo que el azabache hacía estaba mal.

Detrás de ese estante, se encontraba una Danielle con una sonrisa amplia. Había escuchado todo, y sabía que hacer para lastimar más a la pelirroja.

Luego de que Alexandra ayudara a Sam, se despidió del él. El chico le agradeció mil veces por lo que ella había hecho, ya que en verdad necesitaba ayuda.

Se dirigió a la Sala Común y al llegar, James estaba sentado en el sillón con sus brazos cruzados y una cara seria. Parecía un niño haciendo un berrinche.

-¿Todo bien?

Un sonoro "mmh" salió de su boca, indicando que sí. Alexandra lo miró confundida.

-¿Sucede algo?

James suspiró y restó importancia con su mano mientras negaba con la cabeza.

-No. Sólo pensaba. -la pelirroja lo miró dudosa. -En verdad, tranquila. Tenemos un poco de tiempo libre antes de la cena. ¿Practicamos el Encantamiento Patronus?

-¿No estás cansado?

-Nop. -dijo resaltando la "p" y levantándose rapidamente. Tomó a Alex por los hombros y la guió fuera de la Sala Común.

-¿A dónde vamos?

-La Sala de Menesteres. Allí podemos practicar tranquilos.

-¿Estás seguro? James, es viernes. Podemos hacer otra cosa.

-Si, seguro. A demás, pasaremos tiempo juntos.

Alexandra se sonrojó levemente y miró al suelo. Al llegar a la Sala de Menesteres, James caminó tres veces frente al muro.

Una vez que la puerta apareció, ingresaron. Adentro había un espacio completamente vacío. Algunos libros de Defensa Contra las Artes Oscuras se encontraban en un estante a la izquierda.

QUEROFOBIA; James Potter Where stories live. Discover now