POV Jazmín
Mi cabeza no da más… ¿Han sentido alguna vez que su cabeza está a punto de estallar? Pero literalmente… así me siento hoy.
No puedo creer que se haya atrevido a venir a verme. Es tan… loca. No sé por qué en parte eso aún me encanta, y eso es lo que me pone mal… que me siga encantando ¿Por qué? Se supone que deba odiarla. Odiarla con todas mi fuerzas… pero no… no puedo
-Mamá, mamá, mamá- insistía Mateo. Eso era otra de las cosas que me ponían mal. Desde que vio a Flor no deja de hacer preguntas, como por ejemplo ¿Quién es ella? ¿Fueron novias? ¿Amigas? ¿De dónde se conocen? ¿Te cae bien? ¿Qué pasó?
-¡Maaaaa!- gritaba tratando de llamar mi atención. Debo admitir que se ponía a veces un poco pesado
Frené en seco y tropezó con mis muslos
-¿Qué, Mateo? ¿Qué quieres saber?- dije ya cansada
-¿De dónde conoces a esa chica?- insistió
-¿Qué chica?- la voz de Lolita apareció y al verla a mi lado suspiré aliviada. Ella me sacaría de esta… espero
-Flor- dijo rápidamente Mateo y vi como los ojos de mi representante se abrían como platos
-¿Quién? ¿Flor? ¡¿La misma Flor?! ¡¿Flor?!-
-¡Sí! ¿Quién es?- dijo Mateo emocionado. Sabía lo chismosa que era Lolita
-Ella es…-
-Nadie- intervine –No es nadie, ya te lo dije-
-Pero…-
-Pero nada- dije seria y él asintió dándose por vencido
-Me tienes que contar todo ya…- susurró Lolita para que el peque no oyera nada
-Lo sé… pero no ahora ¿Sí?-
…
Horas más tarde
Le conté todo a Lolita una vez llegamos a casa, y por supuesto se emocionó. No sé por qué todos quieren que volvamos… odio esto
Estaba por ir a descansar cuando recibí una llamada de Lucía, o más bien de su editorial, la cual me decía que debía ir a una reunión
Y aquí estoy ahora. Sentada en esta fría oficina esperando a que me atiendan.
-Hola, Jazmín- dijo Lucía entrando acompañada de una chica que seguramente era su asistente
-Lu ¿Qué pasa? ¿Por qué me citaste?-
-Es que debido a la fama que ha obtenido el libro hemos decidido que hagas una gira por las ciudades más importantes de Estados Unidos, no solo por Nueva York-
-Bien, ¿Y cuándo sería eso?-
-Lo más pronto posible- dijo mirando su agenda
-Ok. ¿y para eso me llamaste? Podías habérmelo dicho por teléfono o por e mail- le dije agotada
-Sí, lo sé. Perdón, pero es que también quería comunicarte otra cosa- dijo y vi como su cuerpo se tensó
-¿Qué?-
-Nada, que por decisión de la editorial irás acompañada por uno de nuestros representantes- Lo entendía
-Ok, por mí no hay problema mientras me dejen llevar a Mateo conmigo-
-Bueno, creo que serás mejor que sepas quién es el representante- dijo Lucía y miró a su asistente –Dile que pase, y tú quédate fuera- la chica asintió y yo miré a Lucía con el ceño fruncido ¿Por qué tanto misterio? –No te enfades- me dijo y sentí la puerta abrirse
Me volteé a ver y… No sé por qué no lo vi venir