Labios Compartidos (Flozmín)

Capítulo 75 "Ella es mi vida"

POV Flor
No podía ser verdad! ¡No! Vir no pudo verla con ella… ¡Con ella no! ¿Por qué? ¿Acaso me estaba engañando? No, no, Jaz, tú no me falles. ¡Mierda! ¿Por qué Elena?
No podía creer lo que me había dicho Vir ¿Jaz y Elena? ¿Juntas? ¿En un bar? ¿Qué hacían? ¿Por qué no me lo dijo?
¡Ahhh! Que rabia
En cuanto la historia salió por la boca de Vir yo me alejé corriendo de ella y me encerré en este pequeño cuartito donde guardaban las fotocopiadoras. Necesitaba estar sola, lejos del mundo… lejos de la realidad ¿Jazmín me engañaba?
Tomé mi móvil y de vuelta, apagado… ¡Dios! ¿Estará con ella? ¿La estará besando? O peor… No, no quiero ni imaginarlo. Es muy doloroso para mí imaginarme a Jazmín siendo tocada por otra mujer…
Juan tenía razón. Ella era la que me engañaba… Y con Elena
Al parecer yo fui la que sobré en esta relación siempre… yo fui la simple aventura del tiempo de descanso
¿Qué estoy pensando? No, Jazmín me ama. Obvio que me ama, debe haber otra explicación para su encuentro con Elena ¿Pero cuál?
Me dejé caer al suelo, donde me refugié en mis propias manos. Quería morir del miedo que sentía ¿Habría vuelto a caer?
De golpe la puerta se abrió golpeando un costado de mi cuerpo
Me quejé y alcé la vista para encontrarme a Juan quien me miraba preocupado
-Flor, ¿Qué te pasa?- se agachó -¿Qué sucedió?-
Me limpié rápidamente la cara –Nada- traté de levantarme pero este me lo impidió
-Nada, no. Te pasa algo ¿Qué tenés?- insistió
-¡Nada, joder! ¡Nada! ¡Déjame sola, boludo!- dije bastante alterada y él me miró sorprendido
Hubo silencio…
Él se levantó y estaba dispuesto a irse
-Perdón…- salió de mi boca
Me miró con una sonrisa comprensiva y se agachó para sentarse a mi lado
-Si quieres no me digas nada, pero no voy a dejarte sola- dijo y me brindó su hombro de apoyo
Agaché mi cabeza y la junté a su cuerpo y ahí lloré, lloré… lloré por mis celos, por mis miedos… por Jazmín
…
Media hora más tarde…
-¿Estás segura de que querés entrar sola?- me dijo Juan quien había insistido en llevarme a casa. No le había contado toda la historia pero si una gran parte, a pesar de saber lo que eso significaba
-Sí, sí… esto es algo que debo hacer sola- dije seria mirando hacia la puerta de mi edificio
Sentía que mi corazón ya no ocupaba su lugar en mi pecho
-¿Las vas a dejar?- la pregunta me tomó por sorpresa
¿La dejaría? Si me había engañado realmente ¿La dejaría?
La respuesta de una persona normal hubiera sido un sí sin dudas, pero yo… Yo no sé lo que es vivir sin ella, sin sus besos… A pesar de que eso significara pisotear mi orgullo no sería capaz de dejarla
Al parecer mi respuesta se dio con mi silencio
-¿Tanto la amas como para perdonarle algo así?- me preguntó sorprendido
-Jazmín es mi vida, Juan- le dije con la voz rota –Sin ella no sé lo que soy-
Él me miró y pude notar ¿Pena? Sí, pena en su mirada
-Sin ella seguís siendo la mujer maravillosa que eres, Flor. No lo olvides ¿Ok?- Lo veía imposible –No hagas que tu vida dependa de una persona-
Sin querer hablar de más nada, salí de aquel auto y entré a nuestro edificio, dispuesta a saber la verdad, toda la verdad