Querido Ed:
Antes de que leas toda esta maraña de sentimientos que te he escrito desde nuestra (ay Ed, nuestraaaa) cama, date cuenta que este sobre es nuevo, compré el paquete hace una semana por internet (ventajas de la modernidad) pero llegó hace media hora y he decidido estrenarlo contigo.
Seré breve, (te lo prometo) sé que necesitas descansar así qué siéntate, y deja lo que sea que estés haciendo. Hablo en serio.
Ahora que te marchaste por tu nueva gira, he comenzado a sentirme sola y caí en la cuenta lo mucho que me he acostumbrado a ti, a tu bendita presencia y no sé si eso está bien o mal. Había comenzado una nueva traducción y tuve que parar porque simplemente no me pude concentrar y comencé a traducir tan feo, tan literal que me dio ganas de aventar la pantalla y patear la pc.
Para sobrevivir a mi propio drama, me tomé mis 5 minutos de descanso que se convirtió en 5 horas porque a Beth Salmon se le ocurrió sacar los álbumes del armario.
Y qué te digo, habían tantas fotos que ni siquiera recordaba cuando fueron tomadas con exactitud, hasta que me topé con aquella foto, esa que nos tomamos el día de la fiesta del día de la Juventud, donde tu mano derecha pasa por mi cuello y yo sólo apreto la mandíbula con una sonrisa, gracias a la pena que había acumulado en el momento (y te veías muy guapo). Cuando la foto estuvo lista, la tomaste sin preguntarme si quería conservarla y sólo dijiste "para recordarte si algún día dejamos de hablarnos" y sólo pensaba en lo cutre que había salido, que de haber sabido que ibas a quedartela tú, hubiese puesto mi mejor jeta. Después me puse a pensar si realmente seguiríamos hablándonos y sentí una punzada en el estómago, pero en cuanto comenzamos a hablar todo se relajó y me sentí mejor. Me hiciste sentir mejor.
Sin embargo, encontré otras y al verlas automáticamente me quité 9 años de encima Ed y comencé a reír con una especie de nostalgia porque eran las fotos que Ald había tomado cuando nos aventamos al lago en pleno invierno gracias a una apuesta que habíamos hecho entre Ald y yo.
¿Te acuerdas? Espero que sí porque faltamos a la escuela durante 3 ó 4 días (ya no recuerdo muy bien) porque nos dio gripe y el pobre de Ald casi se nos muere de neumonía (me da escalofríos con sólo acordarme porque fue mi culpa) y le tuvimos que decir a su mamá que se había rebalado del muelle. Y como vimos que sí se podía sobrevivir de una neumonía, nos fuimos a Candies & Sugar a tomar unas milkshakes en su nombre. Qué saludable.
De verdad que tienes que verlas, te harían sentir mucho mejor de lo que te imaginas porque sabes que disfrutaste cada momento, cada error, que lo harías 1000 veces más.
Sé que estás cansado, exhausto de todo el mundo de la fama (de toda esa mierda si lo digo en tu léxico) y está bien. Se me quebró el corazón cuando en tu última carta leí que me extrañabas y que sólo tenías ganas de estar en casa porque me siento exactamente igual, y no te preocupes Ed, si no puedes responder de vuelta. Recuerda que estoy aquí para ti, cuando te sientas angustiado, perdido, cansado puedes llamar sin importar qué, si es las 3 de la mañana o las 5 de la tarde; siempre estaré ahí para ti , ¿a qué no, Ed? Todo es más fácil entre dos. Prometimos cuidarnos el uno al otro y yo a ti te amo.
Puedes mirar éstas fotos si te hacen sentir mejor, puedes refugiarte en nuestras memorias mi querido Ed.
Descansa guapo
Con mucho amor y cariño, Beth Sheeran
xoxo