Los dos se dirigieron hasta la caja a pagar las cosas que habían comprado, el moreno saco su billetera para pagar todo Jimin estuvo a punto de negarse pero Namjoon no lo dejo, estaba bastante apenado por el comportamiento de su hijo así que era lo menos que podría hacer.
Al entrar al auto las cosas se pusieron algo raras ya que cuando intentaron colocar a Jungmin en su silla para bebés, este se negó tomando la camisa del rubio con fuerza, no tuvieron más remedió que hacer que Jimin entrara en los asientos traseros con él bebé en sus brazos, el cuál no tardo en quedarse dormido.
Namjoon miro aquella escena con algo de ternura, pero también con precaución ¿Por qué su hijo se estaba comportando así?
– En verdad lamento lo que pasó con jungmin, te aseguro que él no es así con las personas – dijo mirando el camino que Jimin le estaba indicando para llegar a su casa.
– No se preocupe – suspiro – es solo un pequeño cachorro, así que puedo entender – sonrió leve sosteniendo más fuerte al niño – no le tome mucha importancia – miro el camino, notando a lo lejos su casa – yo me quedo aquí, señor Kim.
Este asintió buscando donde aparcar, cuando lo hizo se bajó para ayudar al rubio con las cosas y así despedirse.
Al ver el auto de Namjoon marcharse, fue cuando decidió entrar a la casa encontrándose a su hermano viendo televisión.
– Pensé que no estabas – dijo dirigiéndose a la cocina para acomodar las cosas – dijiste que llegarías hasta tarde.
– Lo sé, pero no tarde mucho así que regrese temprano, Mimi – y fue cuando sintió un fuerte olor a Alfa – ¿Estabas con un Alfa? – ahora su semblante estaba serio.
Y fue en ese momento que sintió el fuerte olor que tenía impregnado en su cuerpo, al parecer el pequeño niño había impregnado su olor en él.
– No se de que estás hablando – hizo como si no supiera que había sido impregnado por el olor del pequeño cachorro, hasta que sintió las feromonas agrias de Hoseok.
– No te hagas el tonto, Park Jimin – se veía furioso – hueles a alfa ¿Con quien estabas? – este se quedó callado haciendo enojar más a pelirrojo – habla, Jimin – dijo usando su voz de mando, haciendo que el Omega bajara la cabeza.
Se sentía bastante vulnerable y sus lágrimas no tardaron en salir, Hoseok jamás había usado su voz de mando, lo que significaba que estaba bastante enojado pero ¿Por qué? ¿A caso no podría salir con un Alfa? Aunque sabía muy bien que el olor de alfa que tenía era de un pequeño cachorro.
– Estaba en el súper comprando lo de la despensa y un pequeño cachorro se me acercó, todo fue muy extraño pero no sabía que iba a impregnar su olor en mi – bajo la mirada.
– ¿Y quieres que me crea ese cuento tan forzado? – se acercó amenazante.
– Es la verdad, su padre se sentía bastante apenado – tal vez no debió decir eso ya que los ojos de Hoseok cambiaron a un verde intenso, lo que significaba que su parte lobuna había tomado el control.
– ¿Ahora que no puedes tener bebés piensas recolectar niños de otros Omegas u Alfas? – eso había herido bastante a Jimin.
Jamás, en los años que llevaba de vida el pelirrojo lo había tratado así, además de usar su parte más vulnerable sacándolo asi como si no le doliera, hizo que su llanto fuera más fuerte.
– ¡Te estoy diciendo la verdad! – lo dijo bastante herido – además, ya estoy lo suficientemente grande para hacer lo que yo quiera ¡¿Cuando vas a entender que ya no soy un cachorro, Park Hoseok?! ¡Soy un adulto, puedo cuidarme solo!
– No – dijo con más rabia – ¡Lo único que eres es un Omega inútil! – grito sin pensar – por eso es que estoy todavía contigo.
Un Omega inútil.
Inútil.
Eso era lo que era.
Un simple Omega inútil.
Y que eso lo pensará su hermano, su hermano mayor que siempre tenía razón en lo que le había dicho.
Al parecer si era cierto y si era un Omega inútil, lo único que pudo hacer fue subir hasta su habitación para ocultarse debajo de sus sábanas y empezar a llorar como niño pequeño.
Cuando su cuerpo recupero la cordura se dió cuenta que la había cagado, que la había cagado bastante grande. No sabía en qué momento toda esa mierda había salido de su boca pero es que... Jimin era su hermanito, su niño pequeño al que siempre cuidaba y que llegara con olor a Alfa lo había vuelto bastante loco de la ira, no quería que le hicieran daño.
Subió a la habitación con bastante precaución, no sabía cómo iba a arreglar aquello ¿Como la había cagado tan grande?
– Mimi- toco suavemente la puerta, al no recibir respuesta volvió a tocar – perdóname, Jimin – sollozo – en verdad no quería decir eso, eres mi hermanito... Mi hermanito pequeño y no quiero que ningun Alfa idiota te lastime, pero al parecer ese Alfa idiota soy yo, eres lo único que tengo si pudiera encerrarte en una caja de cristal lo haría.
Tardo unos cuantos minutos en abrir la puerta, cuando lo hizo Hoseok no tardo en abalanzarse en sus brazos para apretarlo a su cuerpo.
– Perdóname Jimin, te prometo que no volverá a pasar – en eso Jimin le dió un fuerte golpe en el pecho – ¿Y eso porque?
– Por lastimarme, idiota – en eso se sonrieron, olvidando ese incidente aunque Jimin todavía se sentía bastante herido.
(...)
Tras dejar a Jimin en su casa, conduje hasta la mía, baje todas las cosas. El caos comenzó cuando saco al bebé del auto para acostarlo en su cuna, cuando el pequeño cachorro no sintió el olor del Omega comenzó a llorar como si su vida dependiera de ello.
– Ya, cachorrito – empezó a arrullarlo – papá está aquí, papá te está cuidando.
Al pasar una hora de intentar de todo y decía de todo, porque enserio lo intento todo, desde arrullarlo por toda la casa, cantarle, intentar darle su leche, mirar su pañal, darle un baño relajante. Nada hacía que su bebé se calmara, no quería tomar esa opción, se sentía bastante apenado pero si Jungmin seguía llorando así, podría lastimar su garganta.
Así que tomo las llaves del auto para dirigirse a la casa del rubio, condujo lo más rápido que podía ya que su bebé seguía llorando y eso lo estaba preocupando demasiado.
Al llegar a aquella casa, dudo en tocar, pero finalmente lo hizo cuando su hijo se atragantó con su saliva haciéndolo toser y llorar al mismo tiempo, cuando la puerta se abrió pudo ver a un Alfa, esto sería más incómodo de lo que creyó, ya que podría ser el Alfa del chico y él estaba allí molestando porque su bebé lloraba desesperado.
– Me apena llegar a su casa así, pero ¿Podría ver a Jimin, por favor? – dijo lo más amable posible.
– ¿Para que lo buscas? – dijo Hoseok bastante serio, mirando al moreno de arriba a abajo.
– No quiero malos entendidos – empezó a ponerse nervioso – mi hijo conoció hoy a Jimin y paso algo muy vergonzoso, me disculpo por llegar así pero ya intenté de todo para que dejara de llorar y eso me está preocupando.
En ese momento Hoseok se dió cuenta que lo que decía su hermano era verdad, pero eso no quitaba el hecho de que ese hombre era un Alfa, estaba a punto de cerrarle la puerta en la cara cuando el llanto del bebé se hizo más desgarrador, lo que hizo al pelirrojo abrir la puerta para que los dos pasarán.
El rubio estaba viendo tranquilo una película, cuando escucho los pasos de su hermano estuvo a punto de preguntarle quién había tocado la puerta hasta que escucho el llanto de un bebé, se levantó con prisa hasta que vio Namjoon con su hijo, este último llorando desgarrador haciendo que el lobo de él se desesperara para ir a calmar a ese pobre bebé pero se contuvo.
– ¿Que pasa con el bebé, Namjoon? – Jimin lo miraba preocupado.
– Lo siento tanto, Jimin – el moreno se sentía bastante desesperado, que hasta se sentían las feromonas de preocupación – no tengo idea que hacer, a estado así durante una hora y por el incidente que tuvimos creo que podrías ayudarme pero... Insisto no quiero molestar y más si tú Alfa está aquí.
Los dos hermanos se miraron para luego soltar una carcajada, haciendo que el moreno los mirara confundido y el niño calmara su llanto.
– El no es mi Alfa, es mi hermano – decía Jimin entre carcajada.
– Entiendo – el platinado iba a decir algo más cuando el llanto regreso – ¿P-podrias ayudarme?
– Espero que pueda servir de algo – Jimin se acercó con cuidado al bebé para sostenerlo en sus brazos y como arte de magia el niño dejo de llorar aferrándose a su camisa.
Namjoon sonrió, sintiéndose aliviado porque su bebé dejo de llorar pero sentía terror porque no sabía que hacer ahora, parece que Jungmin había reclamado a ese Omega como su madre.
– Te lo agradezco mucho, Jimin – este le sonrió haciendo que sus ojos se convirtieran en dos líneas, luego el moreno dirigió su mirada al pelirrojo – no quería molestar llegando a su casa así, soy Kim Namjoon.
– Un gusto, soy Park Hoseok y lo del bebé – Jungkook miro al bebé – no es molestia, estabas bastante preocupado así que entiendo.
Namjoon noto como su hijo se aferraba con sus manos a la camisa del rubio, eso le preocupaba, no sabía que hacer y estaba a punto de entrar en un ataque de pánico, al parecer Jimin lo noto y decidió sonreír con ternura.
– Pueden quedarse a dormir, no me molesta tranquilizar a su hijo – dijo amable.
– Eso sería demasiado, además ya ha hecho mucho por Jungmin para que me quede.
– Namjoon, el niño no se quiere separar de mi y creo que sería bastante malo que llore de nuevo eso podría lastimarlo – este lo miro dudoso – quédese está noche y ya mañana decidiremos que hacer ¿Le parece?
Este asintió aceptando aquella propuesta, miraron a Hoseok pero este le tomo cero importancia llendose a su habitación para poder dormir. Después los tres se dirigieron al cuarto de invitados dónde Jungmin no quería separarse ni un minuto de Jimin, lo que los llevo a que Jimin y Jungmin durmieran juntos, lo que dejaba a Namjoon en aquel sillón que estaba en la habitación, cuando los dos soltaron sus feromonas eso hizo que el bebé cayera dormido de inmediato, lo que no tardo que los otros dos también cayeran dormidos.