[24∆] Capítulo Final

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Guerra Parte 2.

Los truenos empezaron a golpetear los cielos anunciando que el diluvio pronto cubriría la alfombra de sangre y caídos. Era el escenario perfecto para inmortalizarlo. Solo que nadie estaba para admirar dicha escena, el querer ganar y vencer, derrumbaban el instinto de plasmar lo que se veía. La lluvia con cada segundo que pasaba quería purificar los suelos de las miserias. Su tierra no merecía tener esa clase de detalle ofensivo para el mundo, el elemento estaba cansado de ver destrucción en un mismo día. Exigía que acabara o pronto recibiría la furia de toda la naturaleza.

Las luces entre las nubes sonaron furiosamente e hicieron simulación del anuncio del  enfrentamiento, la tormenta misma tomó el papel de iniciar y culminar la batalla. Nadie cuestionaba su dictámenes. Con un breve trueno, la furia y el dolor comenzaron a dar su veredicto.

Pasos chocaron contra el duro fragmento y mientras que se daban, se podía oír como algunos huesos y tripas eran aplastadas por los mismos con cada paso, luego se empezó a correr y el ruido desagradable de los elementos se esfumó. Un rayo no perteneciente a la madre del mundo, trató de impactar contra el enemigo en el pecho, pero ese insignificante acto no sería capaz de hacerle ni cosquillas. Realmente no era necesario usar poderes cuando estaban en su punto auge de fuerza. Eso les sobraba prácticamente. Fue un movimiento muy ansioso de su parte. Con velocidades sobre humanas, ya habían colisionado y ahora la lucha sería mano a mano. Las habilidades ciertamente eran innecesarias cuando se tenía un cuerpo casi indestructible.

La castaña se agachó cuando la pelinegra quiso impregnar su puño en su rostro, y cuando estuvo lo suficientemente flexionada, se impulsó hacia adelante con ayuda de sus piernas e impactó su hombro contra el pecho de su contrincante, una vez que estuvo allí, antes tomó la espada que tenía más cerca para hundirla en el mismo lugar, y ni siquiera tuvo que mover los dedos cuando la enemiga desapareció de su vista. Kano se desvió al intentar atacar por la espalda porque Ishani la copió. Otra vez estaban de frente y ambas se defendía de la lluvia de puños que recibían. Lo siguiente que ocurrió, fue que la castaña alzó su habilidosa pierna en dirección hacia el costado de la pelinegra, pero fue atrapada en el acto y como si fuese una pluma, fue lanzada hacia el aire y en el trayecto, Kano saltó y pateó como cual bola, lejos de sí.

Ishani no se dejó impactar con el suelo, se movió en el aire como si este no fuera nada para ella, se sujetó de la tierra sangrienta con sus garras para impedir que la velocidad con la que fue lanzada la hiciera impactar contra algo. Por suerte resultó su movimiento. No esperó a que Kano se le acercara cuando ya ella lo hacía. Kano había comenzado a arrojar sus rayos como cual tormenta furiosa hacia la que venía por sí. Lo lamentable para ambas es que el mismo poder lo tenían, por lo que les resultaba fácil esquivarlos, tenían que buscar la manera de realizar un ataque severo.

Y Kano tuvo la primer idea.

Kano recordó la vez que sus mismos poderes colisionaron y las hicieron casi explotar cuando impactaron, así que nuevamente usaría esa táctica.

Ishani entendió lo que quería hacer su compañera de sangre, por lo que la acompañó. No temía que fuera una trampa.

Los brazos se extendieron al frente y de sus palmas comenzaron a salir la gran potencia de daño.

Ambas hermanas impactaron sus grandes potencias de energía estando distanciadas a más de tres metros, poco a poco se acercaban sin tener mísera idea de lo que ocurriría si estaban a dos pasos de cerca. Pero la ingenua esta vez fue la propia Kano. Ishani no esperó a estar lo suficientemente cerca cuando ya había dejado de seguirle el juego.

No estaba para patrones de quién sería la primera derrumbada.

Ganar o morir. Punto.

Con ligereza se movió a un lado y ese elemento que estaba por hacer impacto, se desvaneció con ese movimiento. Las energías se habían unido con el aire, tomando la calma por un momento. Pero aquello no duró ni medio minuto cuando ya Ishani comenzó a contraatacar.

Eternos finales © ✔️Libro #0Donde viven las historias. Descúbrelo ahora