«LIZZU; SE MONSTA X» #4

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Pre-debut

Lizzu apagó la luz, caminando medio adormilada. Sabía que era el turno del líder de lavar los platos, pero había estado trabajando tan duro que fue incapaz de verle tan cansado, y le mandó a dormir con él insistiendo hasta que aceptó que él haría su cama por una semana.

Miró el calendario del pasillo de manera distraída, bostezando. Este marcaba abril, y sonrió perezosamente, recordando que su debut estaba programado para la primera mitad de mayo, y aunque eso suponiera el triple de ensayos, era feliz haciéndose a la idea de estar en un escenario, y que el resto de los chicos también estuvieran felices y animados.

— ¿Lizzu-ssi?

Se giró, sobresaltada, y se llevó una mano al pecho, tratando de calmar el salto que había dado su corazón.

— Oppa, es tarde – dijo con tono suave, tratando de no despertar al resto, los cuales estaban tan agotados como ella, pero parecía haberse acostumbrado a sentir sus músculos tensos y la sensación de tener sueño siempre.

— Lo sé – asintió, mirándola con atención–. Te he escuchado hablar con HyunWoo hyung – hizo una pausa, rascándose la nuca–. No tienes que ser tan buena con nosotros, Junhee, noto que estás cansada y te duele caminar.

Lizzu se sintió un poco incómoda cuando escuchó a Kihyun decir eso. Razón no le faltaba, pero estaba claro que ellos jamás entenderían ese impulso que salía de ella para tratar de ayudarlos incluso si era para atarse los cordones, colocar los cubiertos o colocar la habitación. Era tan inconsciente y natural que se había acostumbrado a ello, tal vez a falta de alguien para dar su cariño, ya que su hermana jamás quiso acercarse a ella de manera cariñosa, y Junhee tenía demasiado amor para dar.

— Estoy bien – afirmó, sonriendo–. Aunque me duelan las piernas, no me importa correr hacia vosotros si necesitáis ayuda – suspiró–. Aunque me pesen los párpados, no me importa quedarme la noche en vela para ayudaros – dijo, con firmeza. Kihyun se acercó un par de pasos, y ella sonrió con calidez–. Sé que vosotros no me queréis como queríais a Habyul o Sora, pero yo sí os quiero. No busco complaceros para que me aceptéis por completo, simplemente me gusta veros felices.

— Junhee...

— Buenas noches, Kihyun oppa, deberías ir a dormir también – hizo una inclinación ligera, entrando a la habitación en silencio.

Kihyun suspiró, y Jooheon escondió su cabeza de nuevo en la habitación, haciendo gestos a Minhyuk y Hyungwon para que no hicieran ruido, y fingieran estar dormidos. Todos habían escuchado esa conversación con Kihyun a falta de sueño por los nervios del debut, y todos se sintieron horribles.

...

— Buenos días, Junhee – saludó Kihyun, cocinando el desayuno. Ella le miró extrañada, frotándose los ojos con sueño–. Sé que te gusta el café con leche y dos cucharadas de azúcar, tienes ya tu taza preparada.

Junhee le miró aún más extrañada, pero agradeció, sentándose en la silla libre frente a la taza humeante. Era una bonita taza, tal vez nueva.

— ¿Qué hace tan temprano despierto, oppa?– preguntó, curiosa.

— Cocinar – señaló con obviedad, sonriendo–. Minhyuk está duchándose, Jooheon tratando de despertar a Hyungwon y Changkyun en el otro baño lavándose o yo que sé – comentó, apagando el fogón y llevando un plato de arroz a la mesa, dejándole junto a los otros platos–. Sé perfectamente que mi comida no será como la tuya, pero está pasable.

— No digas bobadas, oppa – negó, cogiendo unos palillos–. Es un gran cocinero.

Kihyun rió, sentándose frente a ella, y comenzó a servirla comida en el plato, junto cuando el resto llegó, Minhyuk con el pelo húmedo y Changkyun prácticamente tirando de Hyungwon. Miró el reloj de la cocina, las seis y cinco, y ellos no solían despertarse hasta y media para estar en la agencia a las siete y cuarto. ¿Qué les sucedía hoy?

— Buenos días, Lizzu-ssi – saludaron a la vez, sonriendo y sentándose alrededor de la mesa, comenzando charlas casuales pero poco fluidas por el sueño.

Una sensación cálida invadió a Lizzu cuando Changkyun y ella parecían estar plenamente incluidos en el ambiente, aunque la duda de porqué su comportamiento había cambiado de la noche a la mañana. Dudaba que Kihyun hubiera dicho algo de su charla nocturna, por lo que no encontraba otra explicación lógica a todo eso.

— Aigoo~ – exclamó Hyungwon de la nada, sobresaltando a la chica, sentada entre él y HyunWoo–. ¿Solo comerás eso, Junnie? Ten, seguro tienes hambre.

Comenzó a servirla más comida, y casi siente que aún seguía dormida.

— ¿Quién pasa a ducharse ahora?– preguntó, algo tímida. El apartamento era pequeño, apenas dos habitaciones, dos baños y una cocina-comedor bastante mona por como la habían decorado a su manera. Uno de esos baños no tenía ducha, por lo que por las mañanas y al venir de las prácticas era todo un poco caótico, y nadie sabía cómo organizarse.

Algunos simplemente optaban por ducharse tras las prácticas y así estar más frescos, ya que el olor no era problema, y otros decían que mañana y noche eran lo mejor para su cuerpo. Ahí entraba Lizzu, la cual descubrió que una ducha matutina y otra tras el esfuerzo de su trabajo lograban relajarla considerablemente.

— Tú – dijo de inmediato Hoseok, el que más discutía por ese tema–. Es tu turno.

Se disculpó para poder levantarse de la mesa, y fue al baño mirándolos de reojo desconfiada, notando como ellos la seguían con la mirada, como si estuvieran comprobando si de verdad iba al baño, o si no se iba a caer de repente.

Tanta atención era rara, pero la gustó.

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5AM en mis tierras, y aquí despierta,cuando mañana no dormiré nada lol

Kill me plox, solo quería publicar este capítulo y ya irme a dormir 😓