Capitulo 2

2.6K 123 4
                                    

-¿Para dónde vas?- dijo mi papá mirándome fijamente.

-¡Hola papito lindo! Estoy bien, gracias.-

-Irina, ¿para dónde vas? Que yo sepa no me has pedido permiso para salir.- dijo mirando el televisor.

-Papá voy a salir con Esteban para una fiesta, lo normal.

-Bueno, cuando llegues me llamas para saber si estás bien. Si Esteban no te puede traer, no dudes en llamarme.

Le sonreí, le di un beso en la mejilla y salí. Esteban ya estaba esperándome en su auto.

Me acerqué a su auto y tomé asiento rápidamente.

-Hola muñeca.- besó mi mejilla y arrancó el auto.

-Hola cariño.- esta vez yo le di un beso en la mejilla después de colocarme el cinturón de seguridad.

-¿Estás lista para tener sexo alocado?- rió.

-Jajaja. Amigo eso no se pregunta.- sonreí.

Mientras Esteban conducía, íbamos cantando "Problem" de Ariana Grande. El camino fue un poco largo, pero ya habíamos llegado. El lugar estaba repleto de gente, así que señoras y señores ¡hoy iba a tener sexo!

Después de encontrar en donde estacionarnos, Esteban me ayudó a bajar del auto. Al entrar el olor a cigarro inundó mis fosas nasales.

-Muñeca un amigo me llamó, así que ya sabes.- guiñó el ojo.

-Claro, pero te voy a llamar si me aburro.- lo señalé con el dedo.

Esteban asintió con la cabeza y desapareció entre la gente. Llamé a mi papá y le avisé que ya había llegado. Después de haberle hablado, colgué, así que comencé a buscar a algún chico para divertirme. Pero cada chico que veía, ya estaba borracho. Resignada me acerqué a la barra por un trago.

-¿Que desea tomar señorita?-

Sus ojos azules me flecharon de momento. Sentí una sensación rara.

-Hola muñeco, quiero una cerveza y a ti de postre.- sonreí picara.

El chico de ojos azules me miro serio, jamás un chico me había mirado así. ¿Qué le pasa?

-Oye, ¿estás sordo?

-Necesito su identificación señorita.- dijo serio.

-¿Mi identificación? ¿para qué? ¿Quieres saber mi nombre? Pues yo te lo digo. Me llamo Irina, mucho gusto.- extendí mi mano pero no respondió a mi saludo.

-Señorita necesito su identificación, sino, no beberá nada esta noche.-

¿Qué rayos le pasa? Ya me está sacando de quicio este naquito.

-Oye naco, solo quiero una cerveza. No te vas a morir por dármela, voy a pagarla.- le mostré mi cartera.

-Mi nombre no es naco, es Fabián. Y no me interesa si va a pagar o no, son las reglas del lugar.- dijo mientras limpiaba unos vasos.

-¿Reglas? ¿De cuándo acá piden identificación en un centro?- pregunté un tanto confundida.

-No lo sé señorita, reglas son reglas.- me miró por última vez y se marchó dejándome ahí y sin un trago.

-Ughh, ¡este imbécil me las va a pagar!

Capitulo Editado

También existen chicas malas |EDITANDO|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora