"No soy quien crees, yo no caí del cielo."

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Capitulo 69: 

— Ellos...— Da un golpe en mi pecho y cae de rodillas.

— No voy a permitir que estés así. — Me agacho a su altura, aún siendo más alto que ella, sujeto sus brazos y junto conmigo la levanto.

Se sienta en su cama, mira a su tía, luego a mí y comienza a limpiar sus lagrimas.El silencio reina en la habitación color amarillo y me siento abrumado.

Las personas creíamos tener las soluciones de muchos problemas, quizás dijésemos que todo estaba perdido pero aún así parte de nosotros reservábamos esperanzas en que todo saldría bien.¿Como solucionar un problema así?. 

El tacto de piel, tanto como un abrazo o como hacer el amor, no eran la solución, y mucho menos el amor existente o inexistente que sintiéramos por otra persona, harían que aquellos seres queridos volviesen.Solo se trataba de una herida tan dolorosa como la de un cigarrillo sobre la piel, el ardor y el sufrimiento siempre sería recordado, y en casos como este..permanente.

— ¿Quieres que te prepare un té? — Dijo con suavidad su tía.

Melanie intentó hablar pero fue ahogada por un mar de sentimiento y solo pudo asentir y tapa su boca para no volver a rebosar en lagrimas. Dios, quería curarla.

Había olvidado lo indefensa que se podía llegar a ver, todos veían tanta seguridad en sí misma pero solo era una mascara de la que pudiera arrancar y solo así, luego, podríamos ver quien era ella verdaderamente.Una pequeña, sí, pequeña.. indefensa, tímida y sin el amor incondicional de sus padres.Le había dejado claro que jamás nadie tenía que destruirla, aquella noche en la que se lo dije.. sus pequeños ojos me miraron con intriga como si no supiese que era la valentía, la seguridad y sobre todo el autoestima, el quererse a sí mismo y acerté en pensar que ella no lo sabía.Toda su vida se vio rodeada dentro de una burbuja debajo del ala de su tía, que la protegía y mimaba, y sin salir al mundo exterior y explotar la vida de un adolescente.En momentos me hubiese gustado que permaneciera allí y evitar los miles de momentos en el que se sintió sola y rechazada por la misma gente del colegio pero de cada situación, mantenía su sonrisa frente a mí y me hacía saber que todo estaba bien en ella mientras me tuviese.

— ¿Estas un poco mejor? — Me acerco con cuidado y me siento junto a ella.Su perfume tan dulce, llena mis fosas nasales.

Apoya su cabeza sobre mi hombro y permanece sin decir nada.Solo nuestras respiraciones pueden escucharse en la habitación.

— Sí, estas aquí..Justin, yo..— Susurra temblorosa.

— Shhh — La callo. — No importa, no hablemos de eso ahora.

— Siempre estás cuando te necesito pero no me estas haciendo bien.— Siento sus ojos sobre mí rostro pero no me atrevo a mirarla.

— ¿Por qué? — Exijo en susurro.

— Porque siento no poder superar nada si estás a mi lado.— Acaricia mi brazo con suavidad.— Necesito que te vayas y dejarte ir.— Susurra en mi oído.

— No.— Respondo con frialdad.

— Por favor, no hagas esto difícil, entendí que ellos no volverán..— Limpia una lagrima deslizando en su mejilla.— Pero también entendí que no voy a olvidarme de ellos si estas aquí porque lo haces todo difícil — Su voz esta quebrándose del dolor.— y tu amor no es correspondido.

Corre su cabeza de mi hombro y me da la salida libre a poder irme.Ahora, por fin, la miro a los ojos y necesito decirle que..me gustaría asegurarme de que todo estuviese bien en su vida pero sabía a lo que se refería con el que yo complicaba las cosas y tenía que dar al costado.Me acerqué con cuidado y le di un beso en la frente.Toma mi mano con fuerza pero después me libera y me dirijo hacía la puerta.Creía que habría parte de arrepentimiento en ella pero solo me mira sonriente, como siempre, como si todo va a estar bien pero sabía que no lo estaría, no en su vida.

Twins (Segunda temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora