Capítulo 14: pasado

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CAMERON

Mi madre no dejaba de gritarme que me levantara ya de la cama o llegaría tarde a clase. Era el último día antes de las vacaciones de verano, no íbamos a hacer nada, ¿enserio tenía que ir? Con un gruñido me tapé la cabeza con la almohada cuando la agradable señora que me trajo al mundo abrió las cortinas.

—No me obligues a tirarte un vaso de agua.

Salió de la habitación y yo rodé sobre la cama hasta quedarme boca arriba. Ayer me acosté tarde por quedarme pensando una buena respuesta para el mensaje de Leah. Quería algo chulo, sincero pero que no pareciera cursi ni nada parecido. Mis neuronas se debían haber chamuscado con tanto sol porque no funcionaban bien. Al final le escribí un "me alegro de que te guste, espero verla mañana". ¿Podía ser más cutre? Spoiler: no.

Aquella mañana se me hizo, con diferencia, las más larga del curso. A pesar de que a penas había cosas que hacer y todo el mundo hablaba animado sobre sus planes para el verano, yo solo podía pensar en lo despacio que me movían las agujas del reloj. Deseaba que llegara la tarde y pasar el tiempo entre las olas con los chicos y Leah. Leah... ¿qué estaría haciendo en ese momento?

—Ey Cameron. Algunos compañeros de clase vamos a ir a la playa esta tarde. ¿Quieres venir? —preguntó Riley con la esperanza de que dijera que sí.

—Lo siento, tengo planes.

Planes con una chica que me gustaba más que los tíos de mi clase. Cuando por fin dio la hora de largarnos de allí, fui el primero en recoger y abrir la puerta. Ya en el pasillo los chicos me alcanzaron.

—¿Se puede saber a dónde vas con tanta prisa? —me reprochó Hannah.

—A casa, tengo hambre y quiero salir ya de aquí.

—Bueno, espera a que salgan Evans y Maddy —me recordó Oliver.

Nos paramos a un lado del pasillo. Muchos alumnos se abrazaban y daban besos. Por favor, iban a verse dentro de un mes y medio si es que no quedaban en las vacaciones. Nuestros amigos salieron por fin y caminamos hasta el parking. Como llegaba tarde, hoy vine yo solo en el coche, mientras que el resto vinieron en el de Maddy. Normalmente veníamos todos los días en el suyo, los cincos juntos.

—¿Vamos pasado mañana al Luna Park? —preguntó Oliver. Todos nos giramos para mirarle, era una buena idea. Nos lo pasaríamos muy bien.

—Por supuesto, escribiré a Leah —respondió Evans con el móvil en la mano.

—No te va a hacer falta —comentó Hannah sonriente a la vez que miraba al frente. 

Nos giramos para saber qué estaba mirando, y entonces fue cuando la vi. Estaba apoyada sobre el coche de Maddy, tecleando algo en el móvil de manera distraída. Evans, Oliver y yo nos giramos confundidos hacia ella. Al parecer la propietaria del coche también estaba enterada ya que sonreía al ver a su amiga.

—Como era el último día decidimos escribir a a Leah para que viniera e irnos todos juntos a comer. Vuestros padres ya los saben, les informamos de ello.

Joder, ¿había algo que estas chicas no supieran planear? Llegamos hasta el coche y la nieta de Kimberly guardó el móvil en sus vaqueros.

—¿Nos vamos? Me muero de hambre —dijo ilusionada.

El día acababa de mejorar drásticamente y solo podía darle las gracias a mis amigas. Tenía a los mejores y estaba orgulloso de ello.

Our Last Sunset [✓]Where stories live. Discover now